Plan de seguridad solicitado por el Gore apunta a recuperar los espacios públicos
CAMINAR SEGURO. El innovador modelo está basado en varias aristas y una de ellas es la participación ciudadana en su concreción y en cómo intervenir en la infraestructura de las ciudades,para hacerlas más amigables para sus habitantes.
Entre las numerosas instancias que han surgido para combatir la creciente ola de inseguridad que se ha formado en Antofagasta, el Gore lanzó una de las más ambiciosas y particulares. En conjunto con la Universidad SEK se anunció la puesta en marcha de "Caminar Seguro", una iniciativa que tiene por objetivo generar una estrategia regional de seguridad que permita tomar acciones en el mediano y largo plazo.
A casi un mes desde su lanzamiento han surgido más detalles sobre su instauración. El proyecto envuelve un presupuesto total de aproximadamente 271 millones de pesos por medio del Fondo de Innovación para la Competitividad que otorga el Gobierno Regional, y su ejecución conlleva un plazo de 18 meses. Si bien el lanzamiento de esta estrategia fue a finales de marzo, está ya se encontraba en desarrollo desde noviembre del año pasado con una fase de diagnóstico que se sigue implementando hoy.
El plan envuelve la incorporación de tecnología, por medio de métodos como Datamining o la interoperabilidad de sistemas. Sin embargo, se hace especial énfasis en el elemento urbano que trae el programa, el cual pretende integrar la visión de los residentes en los sectores más afectados y las condiciones de su entorno en la meta de bajar los indicadores de inseguridad.
Metodologías
Ahondando en cómo se lleva a cabo la participación de vecinos, la universidad tiene como principal referencia el modelo CPTED (sigla en inglés para la frase "prevención del delito a través del diseño ambiental"), el cual tiene antecedentes positivos de inserción urbana desde los años 70 en países como Canadá e Inglaterra.
"La introducción de este modelo de diseño urbano es por cierto una innovación de alto impacto. Sin embargo esta relación entre diseño y seguridad sólo será productiva en la medida que el proyecto de espacio público contemple no sólo un estándar de seguridad en la configuración de sus fachadas y los anchos de calle y visibilidad; además deben considerarse otros factores como las características particulares de la zona y la coordinación de los dirigentes sociales, las policías, las autoridades estatales y privadas y por supuesto el ciudadano común y corriente", profundizó Romina Pizzoleo, coordinadora del proyecto.
Con vistas a ese fin es que durante estos meses los investigadores de la Dirección de Formación Continua de la SEK han estado recopilando información de manera gradual. En primera instancia se tomaron datos por medio de autoridades regionales y plataformas virtuales como el S.T.O.P de Carabineros o el S.I.E.D. Territorial del Centro de Análisis y Estadísticas del Delito. Tras eso, se pasó a la interacción directa con los vecinos.
"Hay mesas participativas ciudadanas que partieron esta semana en el sector norte de Antofagasta. Se sumarán más de 16 durante el proyecto e incorporando a cada una de las 9 comunas de la región. En esta etapa de levantamiento de información secundaria también se contemplan las entrevistas en profundidad que se han realizado los últimos meses y que han implicado reuniones con más de 30 actores relevantes en la región", detalló Pizzoleo.
Objetivos
La investigadora además señaló la importancia de complementar los testimonios con la base de datos recolectada previamente: "Para poder proyectar, primero es necesario establecer una base de observaciones objetivas sobre las cuales operar, de manera que el diseño no es una interpretación personal sino una síntesis de las variables del problema. De esta manera podemos establecer una lectura científica de la ciudad sobre la cual plantear una hoja de ruta en función de las necesidades de la gente".
El proporcionar información exacta para elaborar esa hoja de ruta es justamente el gran objetivo de la instancia. En base a lo estudiado se crearán mapas dinámicos participativos que permitan al Gore tomar las decisiones más pertinentes según la situación particular que viva cada sector. La meta final es el potencial establecimiento de un Observatorio Regional de Seguridad, en el cual todo el trabajo realizado y las medidas tomadas en base a él tengan sostenibilidad en el tiempo.
"Lo que pretendemos es generar una estrategia en donde podamos invertir mejor los recursos para dotar a la región de mayores espacios de seguridad. Y eso es lo que esperamos que se logre a través de este proyecto. El enfoque de seguridad nuestro es uno que apunta a mantener el control, mantener a nuestras policías trabajando, pero también tenemos que tener una mirada preventiva. Una mirada en recuperar los espacios públicos y es por eso que es muy relevante este estudio que está haciendo la Universidad SEK", expresó el gobernador regional Ricardo Díaz.
"Hay mesas participativas ciudadanas que partieron esta semana en el sector norte de Antofagasta. Se sumarán más de 16 durante el proyecto e incorporando a cada una de las 9 comunas de la región".
Romina Pizzoleo, Coordinadora del proyecto
"El enfoque de seguridad nuestro apunta a mantener el control, mantener a nuestras policías trabajando, pero también tenemos que tener una mirada preventiva. Una mirada en recuperar los espacios públicos". Ricardo Díaz
Gobernador regional