Cambios en tendencias políticas en última década aumentan incertidumbre electoral
DEMOCRACIA. La región mantuvo tendencia por la centroizquierda en segundas vueltas hasta el 2017, donde se impuso Sebastián Piñera (RN).
La carrera presidencial entró en su recta final ayer. Mientras que los comicios del 19 de diciembre se acercan, los postulantes a La Moneda comienzan a desplegar a sus comandos y respectivas estrategias para ganar más apoyo, en una segunda vuelta que tiene a la ciudadanía expectante.
La sorpresiva mayoría que obtuvo el excandidato presidencial Franco Parisi (PDG) en la región, convirtió esta zona en un lugar en donde se disputarán codiciados votos tanto por Gabriel Boric (Apruebo Dignidad), como para José Antonio Kast (Frente Social Cristiano). El desempeño electoral en segundas vueltas en la región, sin embargo, plantea más dudas que certezas.
Centroizquierda
¿Cómo ha sido el comportamiento histórico en segundas vueltas a nivel regional? Las cifras muestran hasta el 2017 una inclinación por la centroizquierda. Según datos del Servel, en 1999, cuando se realizó por primera vez este sistema tras el retorno a la democracia, Ricardo Lagos (candidato de la ex Concertación) se impuso en la zona con un 58,05% de los votos, contra el gremialista Joaquín Lavín (41,95%).
La brecha fue más amplia para la segunda votación de las presidenciales del 2006. En ese entonces, Michelle Bachelet (PS) obtuvo un 61,24% de los sufragios, mientras que Sebastián Piñera (RN) tuvo un 38,76% de las preferencias.
Incluso para los comicios en donde Piñera fue electo por primera vez Presidente, el candidato DC y exmandatario Eduardo Frei tuvo mayoría en la zona de Antofagasta, con 52,117% de los votos, versus un 47,83% que obtuvo el postulante del pacto de derecha.
Sin embargo, la tendencia se rompió en las votaciones del 2017. Piñera logró mayoría en la Región de Antofagasta (54,12%), frente al candidato de la ex Nueva Mayoría Alejandro Guillier (45,88%), quien además ya ejercía su cargo como senador de la zona.
Pronósticos
Con todo, los analistas consultados entregan visiones y escenarios distintos sobre lo que podría ocurrir el domingo 19.
Para Pablo Camus, sociólogo y decano de la Facultad de Educación de la U. de Antofagasta, el trabajo en terreno de ambos postulantes "ha estado duro". Argumenta que "son campañas activas que han estado en el territorio bastante desplegadas, con mucha acción concreta. Creo que, la verdad, es que tenemos un final impredecible el domingo".
Camus recalca que "efectivamente habrá un voto progresista. Concuerdo con los análisis que hacen algunos politólogos que tienen que ver que esta segunda vuelta se va a definir con un tema mucho más emocional, que va a estar más lo valórico, en la construcción de una propuesta de ciudadanía, de derecho. El giro que hicieron el candidato hacia el centro para poder captar un voto más moderado indetermina mucho más el resultado. No es fácil de generar una predicción".
Sin embargo, Camus plantea que el peso histórico de la centroizquierda en la región podría verse en eventuales resultados de los sufragios. "Boric ha estado mucho más presente en el territorio que Kast. Los mensajes desde el punto de vista económico han sido para darle un poco más de fondo al modelo de desarrollo económico que nosotros tenemos, además de un poco más de fondo social, un poco más de fondo estructurante para cuestiones de derechos básicos, como vivienda o salud. La región va a empatizar más con ese discurso, que con uno más hacia la construcción de servicios sociales privados".
Otro panorama entrega Francis Espinoza, doctora en Ciencias Políticas y académica de la U. Católica del Norte, quien comenta que "tengo la impresión de que debiésemos mirar el factor Parisi como un antes y un después". Explica que la estrategia desplegada por Parisi y su "democracia digital enmascara un voto más pragmático".
"El Norte ha sido casi siempre de centroizquierda. Pero yo diría incluso que a partir de las elecciones del 2013 y de las municipales del 2012 el voto de la región se ha ido girando hacia la centroderecha", argumenta Espinoza.
También enfatiza que "en regiones neoliberales como las del norte, obviamente predomina un voto más pragmático, más de la preocupación de los temas diarios, y no estas grandes utopías que abanderan los partidos de centroizquierda".
Nulos y blancos
Con todo, los académicos concuerdan en que los candidatos debiesen enfocar sus estrategias en captar sufragios de los ciudadanos que no participaron en primera vuelta.
Camus menciona "será interesante ver cómo se convoca a esa gente que no votó en primera vuelta, que es mucho más relevante que el voto Parisi".
Sobre lo anterior, Espinoza comenta que los candidatos debiesen enfocarse en "cómo motivar a los votantes que piensan como ellos a participar. La campaña debiera estar más enfocada en reforzar que la gente vaya a votar y que manifestara alguna posición".
58,05% obtuvo Ricardo Lagos (PS-PPD) en la segunda vuelta de la carrera presidencial de 1999, superando a Joaquín Lavín (UDI).
61,24% obtuvo Michelle Bachelet (PS) en la segunda vuelta del 2006, superando a Sebastián Piñera (RN), quien tuvo 38,76%.
63,32% 52,17%