Iglesias de Jerusalén piden detener la violencia entre israelíes y palestinos
ESCALADA. Desde el jueves y durante el fin de semana, la violencia se desató en las zonas disputadas y un palestino armado fue abatido por israelíes en Cisjordania.
Los líderes de las principales iglesias cristianas en Jerusalén instaron a israelíes y palestinos a detener la violencia en la región tras una serie de episodios en los últimos días que se saldaron con la muerte de 18 personas, mientras que el sábado, israelíes mataron a un palestino que intentaba un nuevo ataque en un asentamiento en Cisjordania.
"Los Patriarcas y Líderes de las Iglesias de Jerusalén llamamos a todas las partes en Tierra Santa a mostrar moderación y autocontrol", señalaron en conjunto.
"Hemos advertido repetidamente contra la explosión de un ciclo de violencia sin sentido que solo traerá sufrimiento para todos".
"Tal estado de cosas sólo conducirá a atrocidades y terror como consecuencia general, alejándonos de la tan ansiada paz y estabilidad que todos buscamos", puntualizaron.
Las iglesias advirtieron que esta violencia "continuará e incluso se intensificará a menos que los dirigentes políticos y comunitarios de todas las partes emprendan con determinación una intervención enérgica" e instaron a "poner en marcha un proceso político basado en principios de justicia bien establecidos que traiga una paz duradera y prosperidad para todos".
El mensaje llegó tras días de incesante violencia en la zona, comenzando el jueves con una redada militar israelí en Cisjordania que dejó nueve palestinos muertos, seguida por tres ataques palestinos que dejaron al menos siete israelíes sin vida.
Muerte de atacante
En este contexto, se reportó que el equipo de seguridad civil del asentamiento de Kedumim, en el norte de Cisjordania, mató a un palestino armado que intentaba acceder a la colonia aparentemente con intenciones de cometer un ataque, que hubiera sido el cuarto en poco más de 24 horas.
"Un terrorista armado con una pistola fue identificado y fue neutralizado", confirmó el Ejército israelí. El ataque más severo ocurrió el viernes en la noche cuando un palestino de 21 años mató a siete israelíes al salir del rezo de shabat en una sinagoga del asentamiento judío de Neve Yaakov.
18 personas han muerto durante la nueva escalada de violencia entre Palestina e Israel.