La creciente inseguridad que enfrenta Antofagasta se evidencia a diario en la zona céntrica de la ciudad con peleas callejeras, venta de drogas, expansión delictual y desborde de ambulantes en distintos sectores de la capital regional, según reconocen comerciantes establecidos, quienes atribuyen a este panorama el cada vez menor flujo de público en el casco histórico de la ciudad.
Debido a esta contingencia pequeñas y medianas empresas (Pymes) del sector han debido anticipar el horario de cierre de sus locales por la alta inseguridad. En medio del intento de frenar el declive en la zona céntrica de la ciudad, un grupo de comerciantes locales concretaron un encuentro la semana pasada con el presidente Gabriel Boric. El primer mandatario encabezó una comitiva presidencial de tres días en la región, que finalizó el viernes pasado.
La reunión se concretó en dependencias del tradicional restorán Chico Jaime del Mercado de Antofagasta y se extendió por unas dos horas. Según algunos de los asistentes, Boric escuchó con atención los planteamientos de los comerciantes establecidos que participaron del encuentro y tomó apuntes de las inquietudes que estos expresaron. En la cita, además de una serie de autoridades locales y la participación del subsecretario del Interior Manuel Monsalve, participaron cinco comerciantes del centro de la ciudad, otro de Taltal y una representante del Barrio Brasil.
Pablo Castillo (46), vocero de las más de 200 Pymes ubicadas en la zona céntrica de la ciudad, valoró el encuentro y las medidas anunciadas por Boric. "Para nosotros es sorprendente que una autoridad del nivel del Presidente nos haya invitado, porque nosotros no habíamos solicitado la reunión. Tres días antes nos avisaron que el Presidente quería conversar con nosotros. Fue un gesto que valoramos (…) Llegamos y expusimos nuestros problemas, en un encuentro en participaron como parte de nuestra delegación una emprendedora colombiana y un emprendedor venezolano. Ellos entraron a Chile formalmente, y acá pudieron desarrollar lo que saben hacer, que es trabajar. Además son emprendedores que dan trabajo", dijo Castillo, quien sostuvo que en el encuentro con el primer mandatario más que estadísticas quisieron exponer lo que viven y enfrentan a diario los comerciantes establecidos de la capital regional.
"Nosotros no buscamos dinero del Gobierno. Somos Pymes y lo que sabemos hacer es trabajar para obtener nuestro propio sustento y dar trabajo. Lo que necesitamos son tres cosas: orden, paz y legalidad. Si se pudieran garantizar estas tres cosas, con las cuales no contamos hoy, podríamos hacer lo que mejor que sabemos hacer: trabajar", agrega.
De acuerdo a la nueva encuesta del Departamento de Estudios de la Cámara Nacional de Comercio (CNC), correspondiente al primer semestre de este año sobre niveles de victimización del sector comercio por ciudad, la Región de Antofagasta encabeza este registro a nivel país con un 63,6% en el primer semestre de este año. Una fuerte alza comparada al 49,2% del segundo semestre de 2021.
Según reconoce Castillo ante el declive sostenido del casco histórico de la ciudad, Boric dispuso de medidas para frenar este deterioro. "El Presidente se comprometió a activar medidas que incluso son competencias del Alcalde (Jonathan Velásquez). Por ejemplo, erradicar los rucos, instalar garitas de vigilancia en el centro y también ayudarnos a tratar de pintar el sector con el fin de hermosearlo. También se comprometió a través de la Delegada Presidencial en activar todos los estamentos necesarios que nos fiscalizan a nosotros, como Servicio de Impuestos Internos, Aduanas y Servicio de Salud; para que fiscalicen también a los ambulantes", añade Castillo.
Decadencia de centro
De acuerdo a la encuesta de la CNC, el comercio ilegal al igual que en sondeos anteriores evidenciaría cierta incidencia en los niveles de victimización. Como muestra de esta realidad, el 68% de los negocios que en el país reportan presencia de comercio ilegal en las cercanías ha sido víctima de algún delito o falta.
Para la residente colombiana Joahanna Alfaro (37), quien administra dos locales en el Caracol de Antofagasta, resultó "muy satisfactorio" el haber participado de la reunión debido a que la máxima autoridad del país demostró su preocupación por la realidad del comercio establecido. "Creo que algo se le va a quedar el haber escuchado de nosotros la problemática que enfrentamos a diario como Pymes. Él solicitó (a autoridades locales) que se ejecutaran muchas cosas, porque nos escuchó. Ahora no queda más que esperar que las autoridades intervengan e interpongan un plan de acción urgente en el centro, también con el comercio ambulante y con el tema de seguridad, en el que fuimos muy enfáticos".
Según esta residente colombiana, con 12 años en Antofagasta, el estado de la ciudad actual dista de la que conoció cuando llegó a la región. "Nosotros vivimos un tema grave de inseguridad. Yo le mencioné al Presidente de competencia desleal y de desigualdad con el tema de los ambulantes, porque estamos muy desprotegidos. Nosotros enfrentamos todo el tema de fiscalizaciones. Nos controlan todo el tiempo, debemos cumplir con todas las obligaciones de impuestos, IVA, tener protocolos (sanitarios). Y afuera, en cambio, no se ve nada de eso (…) Antofagasta era distinto cuando llegué. Uno caminaba libremente, era bonito. La gente salía con su familia. Ahora no. A la gente prácticamente no le gusta venir al centro, porque es horrible. El centro es cochino, está sucio y pintadas las fachadas. Se ve mucha gente pidiendo dinero en las calles, y mucho vendedor ambulante que antes no se veía", agrega Alfaro, quien sostiene que el refuerzo al control de las fronteras anunciado por Boric en la cita resulta clave para restablecer el orden en la región y el país.