El 90% de las mujeres ha sufrido acoso en el transporte público
LINEAMIENTOS. Autoridades anunciaron campaña preventiva y apoyo en denuncias.
Autoridades ministeriales, de la Región Metropolitana, representantes de Metro de Santiago, policías y dirigentas estudiantiles presentaron este martes los lineamientos de lo que será el primer plan en contra del acoso sexual en el transporte público, que podría estar en ejecución entre los meses de mayo o junio de este año.
Esto, en medio de las distintas situaciones que han denunciado las estudiantes del Barrio República en el último tiempo y han encendido la alerta respecto a la constante inseguridad que viven las estudiantes y las mujeres en general en la vía pública, con denuncias que resultan infructíferas o que tardan en llegar a resolverse.
De hecho, según datos de la Gobernación, el 30% de las mujeres dicen no saber cómo se puede realizar una denuncia. Además, nueve de cada 10 mujeres de la región han señalado ser víctima de algún tipo de acoso en el transporte público.
Educar a la sociedad
El plan cuenta con una inversión de $200 millones, y busca crear conciencia para evitar y combatir este tipo de hechos, que también incluye protección a las disidencias sexuales en el transporte público, lo que incluye buses, buses interurbanos, Metro de Santiago y taxis colectivos.
"Creemos que hay que educar a la sociedad para no sean solo las mujeres que enfrentan solas esta situación en el día a día, sino que puedan ser acompañadas y guiadas junto a la comunidad", indicó la ministra de la Mujer y Equidad de Género, Antonia Orellana. Además, la cartera ofició a los organismos pertinentes del Poder Judicial y policías para conocer qué medidas se están tomando frente a las denuncias.
Por su parte, el ministro de Transportes, Juan Carlos Muñoz, afirmó que "el 93% de las denuncias de acoso que recibimos son de mujeres; un 90% dice que ha sido víctima de algún tipo de acoso; 95% de tipo verbal; 86% de tipo físico. Como resultado, el 72% de las mujeres que se desplazan en transporte público se sienten inseguras y es una realidad que no podemos normalizar", y si bien los datos apuntan a la RM, la idea es replicar esta iniciativa en regiones.
Una de las principales preocupaciones de las agrupaciones feministas es abordar la gestión de las denuncias y, por otro lado, que existan protocolos adecuados y números telefónicos que puedan atender de manera oportuna los llamados frente a este tipo de situaciones.