2020 fue el año con más homicidios en una década
CIFRAS. De enero a diciembre se registraron 28 crímenes en la región. Policías y expertos apuntan a un fenómeno multicausal.
Según estadísticas proporcionadas por el Centro de Estudios y Análisis del Delito del Ministerio del Interior, en 2020 se registraron 28 homicidios en la región de Antofagasta. Siete más que en 2019 y la cifra más alta que se ha registrado en la zona desde 2010, cuando se alcanzaron 27.
Estos números han causado sorpresa y alarma, considerando que durante gran parte del 2020, el movimiento en la región estuvo restringido por las medidas sanitarias aplicadas a causa del coronavirus, las que incluyeron más de tres meses de cuarentena y la imposición de toque de queda durante las noches.
Ahondando en los números, el jefe de Operaciones (s) de la II Zona de Carabineros, coronel Hernán Montoya, señaló que de los 28 crímenes cometidos "14 fueron con arma blanca, 12 con armas de fuego y 2 con elementos contundentes en el contexto de riña".
Posibles Causas
Al analizar los factores que pudieron incidir en esta alza, el coronel Montoya indicó que pudo deberse a una mezcla de circunstancias provocadas por la pandemia.
"Creemos que se debe a una variable socio policial, debido al encierro, problemas económicos, adicciones, lo cual deriva en un aumento en la agresividad de las personas", declaró el oficial.
Para el jefe de la Brigada de Homicidios de la PDI en Antofagasta, comisario Randolph Verdugo, el fenómeno también pudo ser causado por delincuentes que encontraron nuevas formas de perpetrar crímenes ante las restricciones impuestas.
"Hay que recordar que el delito sigue funcionando. También ha sido un año difícil para el delincuente, el narcotraficante, porque ha tenido que buscar la forma de poder ingresar la droga. Son situaciones que llevan a que este actúe de otra forma en la sociedad, y eso fue el detonante de esta situación", explicó
Perito
Desde una perspectiva más social, el perito y psicólogo forense del Servicio Médico Legal, Cristián Cordero, alerta que el confinamiento es tan solo una de muchas variables a considerar a la hora de analizar las motivaciones detrás de un asesinato.
"No es necesariamente determinante (el encierro). No es posible establecer una relación causal o inequívoca. Así como hay gente más impulsiva, la situación de cuarentena incide a su vez en que otras personas se inhiban más. Entonces, no se puede achacar como la única causa", puntualizó.
El profesional señala que en los casos que él ha observado una de las principales características es la presencia de algún trastorno de personalidad.
"Son patrones de conducta que son extremadamente rígidos e inflexibles, y que generan en la persona dificultades para razonar y controlar sus impulsos", precisó.
Alarma
Esta elevada cifra de homicidios ha causado alerta en ciertos sectores de la ciudad de Antofagasta. En algunos casos, se percibe como el reflejo de una sensación de inseguridad y desprotección que se ha instalado en los vecindarios.
Un ejemplo es lo sucedido el pasado jueves 10 de diciembre, cuando un joven de 17 años murió baleado en la intersección de las calles Arturo Pérez Canto con Héctor Albornoz, en el lado norte de la ciudad. Este incidente fue uno de los últimos que registrados durante el año pasado.
Para la presidenta de la junta de vecinos de Villa Altos Arenales, Katherine Rojas, este homicidio es la mayor muestra de un aumento en la cantidad de ilícitos cometidos en el sector, los cuales han ido creciendo desde octubre pasado.
"Lo que estamos viviendo actualmente es mucha pelea y robo. Ese tipo de cosas no se veían acá. En mi población era muy tranquilo. Ahora el tema se ha complicado, porque hay gente tirando balazos, apuñalando", expresó la dirigente.
Sobre el homicidio en sí señaló que "quedamos bien sorprendidos con los vecinos porque nunca habían matado a nadie en ese lado. Uno siempre ha visto cosas más abajo, por la Bonilla, pero nunca por acá. Es preocupante para quienes vivimos aquí".
Prevención
Con miras a bajar el número de homicidios este año, el comisario Randolph Verdugo señaló que el rol de la PDI se centra en el trabajo técnico del proceso.
"La Brigada de Homicidios cumple netamente funciones investigativas en los sitios del suceso. Los organismos tenemos que estar un poco más preparados ante las nuevas situaciones que presenta la pandemia", afirmó.
Por parte de Carabineros, el coronel Hernán Montoya señaló que la institución "aporta en lo operativo con sus servicios policiales de forma permanente. También recibimos denuncias e investigamos para contribuir a la persecución de este delito".
"Creemos que se debe a una variable socio policial, debido al encierro, problemas económicos, adicciones, lo cual deriva en un aumento en la agresividad de las personas".
Randolph Verdugo, Jefe de la BH
"No es posible establecer una relación causal o inequívoca (...)Así como hay gente más impulsiva, la situación de cuarentena incide en que otras personas se inhiban más ".
Cristián Cordero, psicólogo del SML