Francisco Contreras Uribe
Hace dos semanas en Costa Rica, la taekwondista nacional, Fernanda Aguirre (22) hizo historia al clasificar a los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, certamen que de momento está suspendido por la propagación del coronavirus. Ahora, la nacional se encuentra en su hogar en Viña del Mar junto a su familia.
La deportista, que ganó bronce en los Juegos Panamericanos de 2019 y en el Panamericano de Taekwondo de 2018, mantiene ahora una rutina de entrenamiento desde casa, pues tiene muy claro que debe estar en buena forma cuando todo se normalice y deba defender nuevamente a Chile en su especialidad.
¿Cómo has vivido estos días de cuarentena a raíz del coronavirus?
-La verdad estoy feliz en casa en Viña del mar, porque todo este tiempo estuve practicando en Santiago. Después de la clasificación a los Juegos Olímpicos de Tokio, me dieron dos semanas de vacaciones y hace unos días comencé a entrenar nuevamente.
Esto de estar encerrada no me ha afectado, pero obviamente impedirá hacer los ejercicios normales junto a mi equipo. La actividad física se hace en casa, así que contenta y tranquila de hacerlo, están mis seres queridos presentes, además no queda de otra.
¿Te genera incertidumbre este momento?
-Todo es incierto, pero hay que estar preparado para cuando termine todo esto. Sin embargo, el panorama se ve complicado, porque no sabemos hasta cuándo vamos a seguir así, obviamente eso me genera incertidumbre, pero hay que velar por nuestra seguridad.
¿Te sientes presionada?
-La rutina es la misma de siempre con menor dificultad, porque no tengo a mi sparring o una compañera de entrenamiento. Empezaremos de a poco, nadie nos apura, principalmente porque no sabemos la recalendarización de los campeonatos. Nos estamos preocupando también de recuperarnos de las lesiones.
¿Has tenido la posibilidad de hablar con compañeros y amigos deportistas sobre este momento?
-La verdad es que estamos todos en las mismas, en casa y aburridos, porque no estamos acostumbrado a estar tanto tiempo en el hogar, todo lo contrario, siempre entrenando. Pero hay que adaptarse a lo que está sucediendo.
Juegos olímpicos
Imagino que una de tus metas siempre fue estar en los Juegos Olímpicos...
-Toda mi vida mi sueño ha estar en los juegos olímpicos. A veces se veía imposible, pero ya cuando me fue bien en los Panamericanos y en otras competencias, me di cuenta que nada es imposible de conseguir. Entendí que estaba a la vuelta de la esquina la clasificación y era cosa de seguir entrenando más duro que nunca.
Estuve cuatro años con mi entrenador cubano que llegó a la selección. Yo siempre dije que el que estuviera sicológicamente bien, le iba a ir bien en el Preolímpico, porque todas estábamos en el mismo nivel y con las mismas condiciones.
¿Eras una de las deportistas que estaba de acuerdo con que los JJ.OO se pospusieran?
-Yo estaba de acuerdo. Sabía lo que a iba pasar, y me parece bien que hayan tomado conciencia de la situación, porque si se realizaban los juegos, iba a ser muy perjudicial para todos. Ahora voy a tener más tiempo para trabajar.
Varios dijeron que científicamente nuestro peak de rendimiento sería en julio, pero la verdad es que somos deportistas, nos adaptamos rápidos, así que servirá para tener más tiempo.
¿Cuál es tu gran desafío en Tokio?
-Ganar cada combate e ir paso a paso, además de dar lo mejor de mí y dejar el nombre de Chile en lo más alto. Me encantaría tener una medalla en los juegos olímpicos, ya que siempre he dicho que nada es imposible y por eso me voy a preparar harto.
Si bien todos están felices por lo que logré, emocionados por la clasificación y deseándome lo mejor, ahora todos estamos en las mismas, aburridos de estar en casa, esperanzados en que esto pase y que volvamos a tener una vida normal.
¿Algún mensaje final?
-Mi mensaje es que sigamos aguantando y luchando. La idea es que todos nos quedemos en nuestras casas, y si tienen que salir que lo hagan con mascarillas y guantes, luego cuando lleguen sacarse esa ropa y bañarse rápidamente.
Y no dejen de entrenar en sus casos para evitar que los músculos se atrofien.