Militares
Los militares no están autorizados ni entrenados para garantizar el orden público. El Ejército tiene como objetivo defender el territorio contra un ataque armado extranjero, como parte de una guerra. El papel de mantener la tranquilidad pública no es el papel del Ejército en un sistema democrático. No tienen lugar en nuestras calles. Especialmente dado que, por definición, los soldados colocados frente a los lugares estratégicos solo podrán responder en el mejor de los casos a un posible ataque con las posibles consecuencias que uno pueda imaginar.
Esta normalización de la presencia del Ejército en las calles hace que sea legítimo temer que se le convoque en cada momento de tensión social o política para resolver las demandas de los movimientos sociales.
Cristian Muñoz T.
Crisis social I
Algunas Cortes de Apelaciones del país, han resuelto limitar el uso de elementos disuasivos a Carabineros de Chile, quedando estos en la indefensión, tanto de ellos como de la mayoría ciudadana que quiere vivir en paz, ante ello, como empleados públicos y estando en conocimiento de los delitos que infringen estas personas y que se cometen a lo largo y ancho del país, sean saqueos, barricadas, quemas, robos, etc., están en la obligación de proceder a denunciar de oficio al Ministerio Público, para que en definitiva, quienes traspasan el límite del derecho constitucional de los ciudadanos, a vivir en paz y desplazarse libremente por nuestro territorio, tengan que pagar todo el daño causado, sea este en tangible e intangible.
Ciudadano
Crisis social II
Los últimos hechos han sido como un tsunami social, pero una vez que nos revolcó la ola, balbuceamos hipótesis, armamos relatos y elevamos plegarias. Que se veía venir, que era evidente, que estaba latente, cómo no lo vimos; sí, todas las anteriores quizá. Lo que nunca formó parte de las premoniciones son la furia y la violencia desatada; los insultos y escupos, el desprecio y el pago de inocentes. La lluvia de piedras de chilenos contra chilenos es una escena conmovedora.
Podemos cambiar las estructuras, las leyes, los sueldos, el gobierno completo de diestra a siniestra, pero si no cambiamos nosotros, el país seguirá en una inercia, acumulando energía para el próximo terremoto social.
La división más profunda no radica solo en la clase social y en las injusticias reclamadas, sino en no poder mirar al otro desde la empatía y la humanidad, simplemente no verlo. Cambiar el corazón humano no sucede en la revuelta social, porque es una decisión propia, apagando la televisión, saliendo de las redes sociales y entrando en lo profundo de mi hábitat, donde, a veces, descansa la gran piedra: el propio yo. Ahí cabe justamente la pregunta: ¿Qué espera hoy Chile de mí? Parafraseando a André Frossard se puede decir que, hoy más que nunca se necesita una dulzura activa que quiebre, que exceda a toda violencia.
María Solange Favereau
Precisión
En la edición del 24 de noviembre del presente , en artículo referido a historia constitucional de Chile, se señala erróneamente que la Constitución promulgada bajo el gobierno de José Joaquín Prieto fue en el año 1883, cuando lo correcto es decir año 1833.
Cristián Hidalgo Ortega
Divisiones
He leído como personas se echan la culpa unos a otros que la izquierda, que la derecha, que el centro, señores lo vengo diciendo: la política partidista, la religión y el dinero, dividen al mundo y lo van a terminar destruyendo, el que está casado con un partido político pierde toda validez, por que miran la paja en ojo ajeno, sin ser autocríticos, solo enjuician a los del otro bando por pensar distintos y recuerda si te duele mas ver una calle destruida que ver gente morir en una sala de espera de un hospital durante 46 años y no has hecho nada, te falta humanidad y coherencia.
Marcelo Meneses
Recuerdo
El 21-09-2019, ha fallecido en esta ciudad a la edad de 78 años. Un ex-deportista venido años atrás desde la oficina María Elena. Me refiero a René González Rojas, QEPD, conocido en el mundo del fútbol amateur local como, el gran "coligüe.
Su afincamiento en el barrio de calle Caracoles, le permitió defender los colores de Boca Juniors, Bon Susseso y el club de sus amores: Britania FC. El talento futbolístico que poseía dejó huellas en la juventud del sector, a la cual, aportó inolvidables enseñanzas en la práctica del balompié. Quienes fuimos sus amigos y jugamos vistiendo la misma camiseta, sentimos profundamente su partida. Razón por la cual, hacemos público nuestro pesar y reconocimiento.
¡Adios, gran Coligüe!
M. Díaz Zamora