Irán alcanza un histórico acuerdo nuclear con las potencias mundiales
Viena. Teherán debe reducir su capacidad nuclear a cambio del fin de las sanciones económicas.
El conflicto por el programa nuclear iraní llegó ayer a su fin tras 13 años de disputas diplomáticas, con un acuerdo alcanzado en Viena entre Teherán y las cinco potencias con derecho de veto en el Consejo de Seguridad de la ONU, más Alemania.
El consenso se logró tras dos semanas de negociaciones maratónicas en la capital austriaca y prevé una clara reducción de las capacidades nucleares de Irán que impida que pueda fabricar una bomba atómica. A cambio, las sanciones económicas impuestas al país persa se irán levantando de manera gradual.
Es un acuerdo "histórico", coincidieron en destacar la representante de política exterior de la Unión Europea (UE), Federica Mogherini, y el ministro de Asuntos Exteriores iraní, Mohamed Yawad Zarif.
"Esta es una señal de esperanza para todo el mundo", señaló Mogherini, que presidió el grupo 5+1 (EE.UU., Reino Unido, Francia, Rusia, China y Alemania) durante las negociaciones. "Se dio vuelta una página y comenzó un nuevo capítulo", dijo el Presidente iraní, Hasan Rohani, en un discurso en que aseguró que las sanciones contra la república islámica nunca fueron exitosas.
Rohani destacó asimismo que el pacto es ventajoso para todas las partes. "Estas negociaciones nunca podrían haber terminado con una solución de ganadores y perdedores. Queríamos que todas las partes fueran vencedoras", dijo el Mandatario.
Para Rohani, la polémica nuclear ha sido exagerada hasta generar una fobia contra Irán. "Se nos atribuyó que fabricábamos armas de destrucción masiva. Ambas cosas las refutamos con la negociación", dijo.
El Presidente estadounidense, Barack Obama, que debe convencer a los congresistas republicanos de que aprueben el acuerdo, señaló que "el acuerdo no se basa en la confianza, sino en la verificación".
El Mandatario elogió el pacto y lo consideró una garantía de un Oriente Próximo más seguro. "Se ha cortado todo camino al arma nuclear", señaló. Además, destacó que contempla fuertes incentivos para Irán si cumple con lo acordado, así como con consecuencias si no lo hace.
El Congreso de EE.UU., de mayoría republicana, tiene 60 días para aprobar el texto. Obama amenazó con vetar la resolución si éste vota en contra del acuerdo. Varios congresistas republicanos expresaron su rechazo al acuerdo. El presidente de la Cámara de Representantes, John Boehner, prometió bloquearlo y acusó a Obama de "abandonar" el objetivo de evitar que Irán desarrolle su programa nuclear.
El secretario de Estado norteamericano, John Kerry, instó a Irán a cumplir con lo firmado para que se puedan ir retirando paulatinamente las sanciones.
Tanto Kerry como Rohani dejaron en claro que el consenso logrado en Viena no logró aún eliminar las tensiones y desconfianza entre ambos países, que rompieron relaciones tras la Revolución Islámica de 1979.
Rechazo de israel
El acuerdo recibió amplios elogios en todo el mundo, con excepción de Israel, acérrimo enemigo de Irán. El primer ministro Benjamin Netanyahu consideró que se trata de un "error histórico", advirtió que su país no está obligado a cumplir con el acuerdo y hará todo lo que crea necesario para defenderse.
Irán, importante productor de petróleo, se encuentra sumido en una fuerte crisis a raíz de estas sanciones. Rohani, un moderado, vinculó su futuro político al acuerdo nuclear y prometió en su país que las sanciones serían levantadas rápidamente.