Más de 40 funcionarios que trabajaron durante la pandemia fueron despedidos del HRA
Durante el mediodía de ayer la asamblea de trabajadores a honorarios del Hospital Regional realizó una manifestación en el frontis del recinto. ¿La razón?, su disconformidad con el despido de colegas que trabajaron en el recinto durante la pandemia, y que fueron desvinculados recientemente, al considerar que la continuidad de sus servicios comprometían fuertemente el presupuesto anual de la red asistencial de la región.
Según un catastro inicial hecho por la agrupación de trabajadores de la salud, 'Abran Paso', se trataría de más de 40 profesionales a honorarios que cesaron funciones desde la jornada del martes, habiendo sido notificados de la medida durante el transcurso de la semana pasada.
Por medio de esta movilización, la asamblea buscó generar conciencia sobre la importancia que este tipo de funcionarios tienen en la atención del hospital, los cuales, afirmaron, no siempre trabajaban en condiciones óptimas. Los voceros de la agrupación aseveraron que los despidos son parte de una serie de decisiones similares que la directiva del recinto asistencial viene realizando desde el año pasado.
"A medida que fueron bajando los casos de coronavirus, las autoridades han manifestado intenciones de "descongestionar" los trabajadores de honorarios. Estos a su vez se han mantenido con contratos inestables; durante el año pasado empezamos con contrato anual, pero sin derecho de colación y con mucha dificultad para tener días administrativos", indicó el representante de la asamblea, Sebastián Rojo.
El que fuera auxiliar de servicio en la unidad de pacientes críticos también denunció que "desde el 2021 han existido recortes de personal por supuesta falta de recursos, cuando sabemos que acá los hay. El problema es que se ha hecho mal uso de ellos. Aquí cada trabajador de cada estamento cumple un rol esencial, por lo que nos parece una brutalidad que esto ocurra".
Consecuencias
Los manifestantes señalaron a la unidad de rehabilitación cardiaca como una de las áreas más afectadas por los despidos, ya que a su juicio los profesionales cesados cumplían funciones de gran importancia y los pacientes que tenían a cargo provienen de distintos lugares del norte de Chile.
"Nos despidieron a un psicólogo y a un enfermero que trabajaban con pacientes con enfermedad cardiovascular en el área hospitalaria, así como en la ambulatoria. Esto es duro considerando que trabajamos con toda la macrozona norte. No sabemos cómo daremos abasto" expresó Belén Verdejo, psicóloga de la unidad.
Otra unidad que sufrió la baja de dos personas fue la de nutrición, desde la cual también se manifiesta una reducción de personal progresiva que lleva produciéndose hace meses. En su caso, los funcionarios a honorarios eran considerados los que lograban que esta área funcionará de manera apropiada.
"Siempre nos han ido reduciendo cada vez más la dotación, hasta que llega un momento en el que no podemos seguir aguantándolo. En nuestro caso, el equipo de nutricionistas se ve sobrecargado, trabajando 24/7 y haciendo turnos los fines de semana", señaló Geraldine Morales, coordinadora subrogante de esta área.
Apoyo
A la protesta no tan solo acudieron los funcionarios afectados, sino que también integrantes de diferentes gremios de profesionales de la salud, como Fenpruss, Asenf y Fentess. El apoyo de estas organizaciones se basa en que consideran que la desvinculación de los trabajadores mermaría seriamente el funcionamiento del recinto.
"A modo general esto va a afectar desde el hecho de que hay que cerrar camas, hay prestaciones que no se otorgarán y cirugías que se deben reorganizar. Espero que a nivel central se den los recursos necesarios, y ojalá por medio de cargos, porque en el fondo esa es la estabilidad que necesitan los trabajadores", advirtió el enfermero y vocero de Asenf, José Luis Carrera.
"El gobierno siempre señaló que el recurso de honorarios tenía fecha límite asociada al manejo del Covid-19. Pero lo más importante para nosotros como gremio es que el hospital desde antes ya tenía una brecha de recursos humanos, y considerando esto, se debiese reconsiderar esta decisión, además de que hablamos de gente muy profesional", compartió el dirigente de Fenpruss, Wilson Gallardo.
En tanto la médico y concejala Natalia Sánchez, quien también trabaja en el hospital, consideró que este conflicto es la muestra de una problemática nacional. "Es un ataque en contra de la salud pública. Estamos hablando del fin de la alerta por el covid, pero no de la crisis crónica del sistema. Esto no solamente afecta a los despedidos, sino que a quienes nos quedamos dentro y que tendremos sobrecarga laboral, porque antes de esto ya faltaban manos", expresó.