Decesos por Covid cayeron un 44% durante el primer trimestre del 2022
SALUD. En febrero de este año hubo 94 decesos, en contraste a los 114 registrados en el mismo mes durante el año pasado.
No existen dudas que la última ola de contagios por Covid-19 y su variante ómicron llevó al país y a la región a cifras nunca antes vistas, provocado principalmente por el alto nivel de contagiosidad que significó el nuevo linaje del virus.
Por lo anterior, la Región de Antofagasta estuvo rozando los dos mil contagios informados en un día, cuando el 28 de enero el Minsal reportó 1.739 casos nuevos de coronavirus en su balance diario.
Aún así, y tal como lo señalaron en un comienzo los expertos, las dosis que se han inoculado a nivel nacional mostraron su principal objetivo: evitar que los contagiados generaran cuadros graves de la enfermedad y los decesos.
Esto se desprende de los datos disponibles en el DEIS, que muestran que, pese al alto número de contagios en enero, solo hubo 35 muertes confirmadas por Covid-19, en comparación a los 83 registrados el mismo mes durante el 2021, en medio de la ola de casos provocados por la variante gamma, y cuyo peak de casos diarios fue de solo 504.
La diferencia también se registra en el resto del primer trimestre del 2022. En febrero la región tuvo 94 fallecimientos por el coronavirus, frente a los 114 notificados el mismo mes el año anterior, disminuyendo en un 17,54%.
Sin embargo, marzo es el periodo que presentó más diferencia entre los dos años. Mientras que el mes pasado se contabilizaron 38 fallecimientos por el coronavirus (cifra hasta el 23 de marzo), el 2021 se registraron 103 muertos confirmados, representando un descenso de 63,1%.
En efecto, si en 2021 hubo 300 muertes confirmadas por Covid-19 en el primer trimestre, durante este año se registraron 167, significando una caída de un 44,3% en este indicador.
El rol de las vacunas
El doctor Michel Marín, vicepresidente regional del Colegio Médico, precisa que todavía "se ve que fallecen muchos pacientes", pero señala que "en la relación porcentual respecto al número de fallecidos versus la cantidad de contagiados, eso claramente ha disminuido".
Argumenta que "se triplicaron las cifras (de casos diarios). Las cifras mayores que habíamos llegado los años anteriores eran 7 mil contagios diarios en todo Chile, y de repente llegamos a más de 30 mil. Esto redunda también en la región que, si uno ve los números absolutos, claramente tenemos menos fallecidos, aun cuando tuvimos más casos".
Marín detalla que pueden existir múltiples explicaciones para analizar este suceso, pero manifiesta que "la más cercana a tener la respuesta, y la única intervención importante que tuvimos, fue la vacunación. Entonces, en la medida que fue aumentando el porcentaje de pacientes vacunados, claramente fue disminuyendo la mortalidad. Y eso era obvio. Todos entendíamos que las vacunas no iban a evitar el contagio, y fue algo que se vio, pero los muertos fueron muchos menos".
Según el DEIS, el avance de la campaña con la tercera dosis en la Región de Antofagasta es de un 76,1%, mientras que el 92,1% cuenta con el primer esquema de inoculación completo. El porcentaje de cobertura decae estrepitosamente en el proceso con el segundo refuerzo - o cuarta dosis- donde la zona tiene solo un 12,7%, por debajo del promedio nacional que llega a 18,1% (ver recuadro).
La doctora Claudia Saavedra, microbióloga de la Universidad Andrés Bello, explica que dentro de los muertos por Covid-19 hubo "un porcentaje importante de personas que no estaban vacunadas, o que no tenían el esquema de vacunación al día".
Saavedra comenta que "es muy importante entender que la gran mayoría de personas en Chile está vacunada con el esquema de la vacuna Sinovac. Y la evidencia científica muestra que esta dosis no logra protegernos de la enfermedad grave frente a la variante ómicron (…). Por lo tanto, es importante tener un refuerzo con una plataforma distinta, en este caso de la plataforma RNA (como Pfizer o AstraZeneca)".
A esto, la académica agrega que "es muy importante mantener y destacar que el esquema de vacunación hay que tenerlo al día. Y eso significa que, si han pasado seis meses, uno requiere vacunarse. Es lo mismo que sucede con la vacuna de la influenza".
El doctor Marín sostiene que en el contexto actual, donde hay más libertades de movilidad y de reunión, todavía se deben mantener las medidas de autocuidado.
"Si todos nos vacunamos y mantenemos las medidas de autocuidado, probablemente no va a ser tan intenso el problema. El llamado es ese, a cuidarnos. Esto todavía no ha terminado. Lo único que hemos demostrado es que la mortalidad es inferior con la vacunación, pero que van a seguir habiendo casos. Y mientras más casos contagiados existen, más posibilidades de que el virus mute a nuevas variantes".