El Servicio de Seguridad ucraniano trabaja para oficializar la implicación de hackers asociados al Gobierno ruso en el masivo ciberataque que sufrió Ucrania el viernes, lo que agrega tensión a la situación con este país, mientras Estados Unidos y la Unión Europea coordinan sus "respuestas" ante un posible ataque de Moscú a Kiev.
Expertos en ciberseguridad trabajan este fin de semana buscando establecer una "atribución oficial" de la autoría del ataque perpetrado en la noche del 13 al 14 de enero contra más de 70 páginas web del Estado, según el Servicio de Seguridad de Ucrania.
Kiev busca corroborar al 100% sus sospechas, después de que EE.UU. acusó a Rusia de orquestar "una operación de bandera falsa" para tener un pretexto para invadir o atacar el país.
"Hay algunos signos de la implicación en el incidente de grupos de hackers asociados con los servicios secretos rusos", dijo el Servicio de Seguridad de Ucrania (SBU).
Horas después del ataque, el Centro de Comunicaciones Estratégicas y Seguridad Informática ya habló de la "huella" rusa en el ataque informático al Estado ucraniano.
Lo que ya sabe el SBU es que, "con alta probabilidad, hubo un ataque a la cadena de suministro" y que "hackearon la infraestructura de una empresa comercial que tenía acceso a los derechos para administrar los recursos web afectados". Kiev se esperaba este tipo de ataques junto a otros por parte de Rusia, que buscaría desestabilizar el país y crear confusión y caos antes de una eventual invasión rusa.
Occidente acusa a Rusia de acumular unos 100.000 soldados en la frontera con Ucrania con el fin de atacar al país pronto, algo que Moscú niega sin poder aplacar los temores.
Ayer, el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, habló por teléfono con el alto representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores, Josep Borrell, para coordinar sus respectivos planes de respuesta si Rusia ataca o invade Ucrania.
"Blinken reafirmó que si aumenta la agresión rusa contra Ucrania, las consecuencias serán rápidas, graves y coordinadas", dijo el portavoz del Departamento de Estado estadounidense, Ned Price.
Blinken y Borrell conversaron sobre "su coordinación estrecha, junto a la OTAN y socios europeos, para responder al constante aumento de la presencia militar de Rusia dentro y cerca de Ucrania, que es muy preocupante", agregó Price.