Polonia refuerza su frontera con Bielorrusia con militares ante ola de migrantes
ESCALADA. Miles de personas intentaron cruzar a la UE, donde creen que todo es parte de un plan de Lukashenko para desestabilizar a Europa.
Efe/Redacción
El Gobierno polaco decidió aumentar su presencia militar en la frontera con Bielorrusia y prohibió el tráfico terrestre en el área hasta nuevo aviso, después de que miles de migrantes que estaban en la zona intentaron cruzar a su territorio. Tras ser ahuyentados, los refugiados se prepara para nuevos incidentes, mientras Europa acusa que se trata de una "inaceptable" manipulación de los inmigrantes por parte de Bielorrusia.
El primer ministro polaco, Mateusz Morawiecki, declaró que "sellar la frontera" está en "el interés nacional" de Polonia" y agregó que también "la estabilidad y la seguridad de toda la Unión Europea (UE) están amenazadas. No nos dejaremos intimidar y defenderemos la paz en Europa con nuestros socios de la OTAN y la UE".
Durante la noche del lunes, varios grupos de cientos de migrantes se agruparon frente a la valla que delimita la frontera polaco-bielorrusa en el área de Kuznica y, cuando intentaron derribarla, las fuerzas fronterizas polacas los expulsaron con carros lanza agua. Solo en ese lugar eran más de dos mil los migrantes, y entre ellos se contaban familias completas con menores de edad.
Varsovia anunció que ampliará las fuerzas militares destacadas en la frontera, que actualmente suman 12.000 efectivos, y se ordenó la movilización urgente de dos batallones en la provincia de Podlasia (este), una de las tres regiones polacas que permanecen en estado de emergencia desde el 2 de septiembre. Asimismo, se trasladó allí a fuerzas policiales de varias ciudades para que colaboren en la vigilancia.
Compleja situación
En grabaciones difundidas por el Gobierno polaco y la Guardia de Fronteras se puede ver a cientos de migrantes acampados y deambulando a lo largo de la valla fronteriza durante la noche del lunes.
En uno de los videos se aprecian disparos desde el lado bielorruso, lo que en opinión del general Waldemar Skrzypczak, "pueden ser ejecuciones" de migrantes para forzarlos a mantenerse en la frontera polaca, pues, según dijo, "los bielorrusos son capaces de cualquier cosa".
Por su parte, el general polaco Roman Polko aseguró tener constancia de que entre los migrantes hay personas "que muestran signos de pertenecer al servicio secreto bielorruso" y que las autoridades de Minsk proporcionan a los refugiados "números de teléfono de periodistas y organizaciones polacas" para coordinar sus infiltraciones y que "usan a los niños para provocar empatía".
Durante este año se multiplicó el número de intentos de entrada ilegal en Polonia desde Bielorrusia y tanto Varsovia como la UE consideran que es el resultado de un plan de Alexander Lukashenko para desestabilizar a Europa.
En ese sentido, el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, calificó de "inaceptable" la "táctica híbrida de Bielorrusia en la utilización de migrantes".
En la misma línea, el Consejo de la Unión Europea decidió suspender parcialmente la aplicación del acuerdo de facilitación de visados UE-Bielorrusia, "en respuesta al ataque híbrido en curso lanzado por el régimen bielorruso".
Bielorrusia advierte
Por su parte, Minsk advirtió "a la parte polaca contra todo tipo de provocaciones contra Bielorrusia para justificar posibles acciones de fuerza contra personas necesitadas y desarmadas, entre las cuales hay muchos niños y mujeres", señaló el Ministerio de Asuntos Exteriores de Bielorrusia.
Según la diplomacia bielorrusa, el "agravamiento de la situación migratoria" en la frontera es "consecuencia directa de la postura de Varsovia de ignorar largamente una realidad objetiva".
Lukashenko niega todas las críticas y acusó a "mafias" europeas de la crisis migratoria con Polonia. "Los ponen en aviones, que aterrizan aquí, los cogen, los llevan a la frontera, les ayudan a cruzar y allí ya los reciben los suyos: polacos, alemanes, ucranianos. Y todo a cambio de dinero", aseguró.