Correo
Día contra el Trabajo Infantil
La Declaración sobre los Derechos del Niño fue aprobada el año 1959 por parte de las Naciones Unidas y ratificada en Chile el año 1990. Estos derechos se rigen por cuatro principios fundamentales: la no discriminación, el interés superior del niño, su supervivencia, desarrollo y protección y su participación en decisiones que les afecten.
Angélica Silva Ríos
Seguridad privadaLos anuncios presidenciales en materia de seguridad confirman uno de los temas que más han rondado en la agenda pública y legislativa durante los últimos meses: la creación del Ministerio de Seguridad Pública. Existe un acuerdo transversal respecto a la necesidad de tener un organismo como ese. Como Asociación de Empresas de Seguridad Privada y Transporte de Valores (Aseva), celebramos esta iniciativa, pero no podemos dejar pasar esta oportunidad para insistir en la importancia de sumar esfuerzos. Está a la vista que hoy las policías no pueden dar solución a todos los problemas, por ello es necesario potenciar y empoderar a la seguridad privada.
Vemos con preocupación que el conocimiento de la industria de la seguridad privada no es aprovechado y nos preocupa que se pierda la oportunidad de crear un marco legal moderno, con la incorporación de una ley de seguridad privada, que potencie a este sector como un actor más dentro de las nuevas estructuras de seguridad nacional.
Estamos seguros que esta industria puede ser un actor relevante. Por ello es necesario que antes, o en paralelo, se converse en la Comisión Bicameral de Seguridad Pública del Congreso Nacional una ley de seguridad privada que establezca un marco regulatorio adecuado.
Las sociedades que han entendido eso, son las que han logrado enfrentar acertadamente los desafíos que impone en la actualidad la delincuencia.
Aldo Vidal Comité Técnico de la Asociación de Empresas de Seguridad y Transporte de Valores (Aseva)
La apuesta peruana
En las recientes elecciones presidenciales, Perú apostó por el pasado, no por el futuro. Sin resultados oficiales todavía, todo apunta a que será Pedro Castillo quien obtendrá el triunfo en esta segunda vuelta contra Keiko Fujimori. Dos versiones muy diferentes y contrapuestas que dejan al país partido en dos. Castillo, con una vuelta a los postulados de ultraizquierda de hace más de 30 años, inspirados en el movimiento terrorista de Sendero Luminoso, remozado con la "revolución del siglo XXI" de Chávez, a quien cita insistentemente; y Fujimori, que lo intenta por tercera vez, basada en el gobierno de su padre, que ha salido y entrado a la cárcel, acusado de graves violaciones a los derechos humanos, corrupción generalizada y un autoritarismo creciente.
La ciudadanía se ha expresado más por oposición a la otra alternativa que por un apoyo claro a los dos candidatos resultantes.
Una búsqueda de solución a tantos y graves problemas muy incierta, sobre todo si Castillo asume la Presidencia. Su modelo radical y estatista a nombre del "pueblo", con todo lo vago que implica, ha quedado demostrado que, aplicado en otros países, no evidencia ningún resultado positivo, ni para las libertades ni el desarrollo económico y tampoco para la alternancia democrática.
La apuesta por modelos antiguos resulta demasiado alta para obtener el éxito requerido.
Samuel Fernández Illanes