Federalismo
Salvo mensajes vagos y lugares comunes, la franja de constituyentes no ha aportado ningún contenido sustancial. Temáticas como responsabilidad fiscal, iniciativa exclusiva presidencial en gasto público o régimen político definitivamente serán los puntos centrales del debate competitivo que nos espera. Eso es positivo, en cuanto las discusiones se guíen por el rigor técnico y una perspectiva de largo plazo. Otra de esas aristas es la organización territorial del Estado y una de sus alternativas es el federalismo.
Esta modalidad se presenta como la opción más coherente para enfrentar los desafíos cada vez más complejos y multidimensionales de las regiones, de la mano de los mismos que las habitan y en base a fuertes mecanismos de rendición de cuentas. Los retos de política pública, por ejemplo, de transformación digital o resiliencia climática no son iguales, ni homogéneos en las regiones de Ñuble o Antofagasta. Tampoco lo son las políticas de capacitación y reconversión en Aysén o Valparaíso para enfrentar la cuarta revolución industrial. Estos requieren flexibilidad y aterrizaje a sus contextos de base. El federalismo permite atender esas particularidades con resolución.
En pleno siglo XXI, el paso del unitarismo al federalismo en Chile no sería ni traumático, ni refundacional. Estaría dentro de las expectativas más vinculantes y técnicas para resolver brechas locales de desarrollo. Esto es bienvenido y realista. Nuestros desafíos de desarrollo implican transitar por vías institucionales y de orden fortalecidas que hagan posible el crecimiento económico y el aumento sostenido del capital humano para enfrentar el futuro del trabajo con éxito. Este es un sendero modernizador necesario para lograr niveles de bienestar y prosperidad que nos conviertan en el primer país desarrollado de América Latina.
Camilo Barría-Rodríguez
Comunicadores sociales
Indagando acerca de la carrera de Licenciatura en Comunicación Social. Se constata que sólo algunas universidades la dictan y principalmente que: 1.- Dicha carrera, tiene una duración de 10 semestres académicos con, 1 de práctica a rendir. Es decir, más de 5 años. (Univ. de Chile). 2.- Su malla curricular, es bastante análoga a la carrera de periodismo. Previa titulación, faculta para estudios como Magister o doctorado a fines del área.
Dicho esto, y atendiendo a la voluntad de miles de ciudadanos, los cuales votarán por don Wilson Díaz para alcalde en elección próxima. Me parece muy acertado lo expresado por la candidata María Inés Verdugo en Antofagasta TV.
Allí, señala la preocupación que le afecta, en cuanto a que los electores vayan a entender la popularidad pública de candidatos, de estudios mínimos y mal rotulados como "Comunicadores Sociales", por sobre la capacidad y competencia de candidatos profesionales titulados, con formación académica y empírica en el ejercicio de asuntos públicos.
El desempeño bajo un micrófono en medios audiovisuales, sin exigencias curriculares para la labor comunicacional-periodística en estricto rigor no capacita a ciudadano alguno para administrar a una comuna con más de 400.000 habitantes. A sabiendas que los fiascos resultan irreparables. Concuerdo, con la señora Verdugo.
Carlos Alfaro
Cristian Cuturrufo
Deseo corregir, y con todo respeto, la aseveración que señala el señor Julio Sepúlveda en la carta emitida por este medio el día martes 23 de Marzo; en donde señala que la primera presentación en la ciudad del artista recién fallecido Cristian Cuturrufo fue en el año 2005; en una destacada gira que por la región realizó junto a Valentín Trujillo y otros artistas locales que fue organizada por la Seremia de Cultura que el mismo Sepúlveda muy bien dirigió durante el mandato del presidente Ricardo Lagos.
Le comento que desde el año 2003 en adelante y por varios de los siguientes años Cristian Cuturrufo fue invitado recurrente a ser parte de las variopintas presentaciones musicales que se desarrollaron en el desaparecido Bar Restaurant Emporio Racconto, y quien en más de una oportunidad compartió el mismo escenario con otros artistas nacionales como el connotado Hector ¨Parquímetro¨ Briceño, además de artistas locales como Jaime Cabrera que el mismo Sepúlveda menciona en su carta y Carlos Pérez entre otros.
Dichas noches en que Cuturrufo fue el anfitrión sin duda fueron las noches más amenas e increíbles que en dicho local, ubicado en donde hoy se ubica el Restaurant Amares, se desarrollaron durante sus 5 años de existencia; y que confirman que Chile perdió sin duda a uno de sus mayores exponentes musicales.
Cristian Cuturrufo... te extrañaremos y gracias por haber compartido tu talento a o largo y ancho de nuestro país.
Mauricio Líbano Briceño