Residencias: la última prioridad
La región sufre una compleja crisis por falta de residencias para menores de edad, pero este problema prácticamente no existe en la discusión política y social. La vulneración a la infancia es un tema que reaparece cada cierto tiempo y genera indignación social, como por ejemplo con el caso del pequeño Tomás, pero que con los días vuelve a diluirse.
La situación de las residencias para niños y adolescentes vulnerables es un ejemplo de lo que ocurre cuando las políticas públicas se olvidan de un área específica. En este caso la protección de la infancia. Un tema que regresa a la agenda noticiosa cada cierto tiempo, sobre todo por casos de connotación nacional como por ejemplo la muerte del pequeño Tomás en Arauco, pero que así como aparece y genera indignación momentánea, se diluye con el pasar del tiempo.
Incluso hay problemas relacionados a la infancia que a pesar de que han salido publicado en lo medios, han generado una prácticamente nula reacción social. Por ejemplo, en la Región de Antofagasta se han cerrando varios hogares en los últimos años (el último fue el Laura Vicuña, del Hogar de Cristo), y la residencia que queda abierta, la Aldea SOS, lucha no solo contra la falta de recursos, sino también contra la exigencia del sistema de tener que recibir más menores. Por lo mismo, la Aldea SOS ya anunció que una vez termine el convenio actual, postulará a una iniciativa más acotada, de entre 20 a 25 niños. Y aunque hay proyectos de nuevas residencias en curso, estas aún son eso: proyectos.
Los problemas en los hogares Laura Vicuña y las Aldeas SOS tienen además elementos muy complejos de vulneración de derechos de algunas de las residentes (no por parte de funcionarios de los hogares, sino por parte de personas externas que se han aprovechado de la vulnerabilidad de algunas de las residentes). Incluso funcionarios han sido agredidos en incidentes.
"Es una necesidad urgente el contar no solo con una residencia en condiciones idóneas sino también con una activa participación de personal de salud especializado", sostuvo el Juzgado de Familia de Antofagasta en febrero de este año. A pesar de lo anterior, nada parece poner este tema más arriba en la lista de las prioridades tanto políticas como sociales. De hecho, el serio problema de las faltas de residencias para menores en esta región casi no ha sido nombrado en las promesas de campaña de los candidatos a distintos cargos locales de la elección de abril.