Buen balance de primera semana de clases mixtas en colegios de la ciudad
EDUCACIÓN. En Antofagasta varios establecimientos optaron por combinar trabajo en aula con grupos pequeños de estudiantes y transmisiones online para el resto del curso.
Como "positivo" catalogaron esta primera semana de clases las directivas de los establecimientos escolares que optaron por un retorno al aula con modalidad "mixta" en Antofagasta.
En la capital regional hay hasta el momento seis establecimientos en esta modalidad, que combina clases virtuales y presenciales, cumpliendo un aforo máximo en cada sala, de acuerdo a lo establecido por las autoridades sanitarias.
Los colegios que actualmente están aplicando este formato de retorno son el San Luis; Chañares; New Heaven; colegio Antofagasta; Costa Cordillera; y el Antofagasta International School (AIS).
Los primeros
Tanto el colegio Chañares como el New Heaven volvieron a clases mixtas el lunes.
El jefe de Administración y Finanzas del Chañares, Alejandro Fuentealba, dijo que el retorno se dio "en completo orden", respetando los protocolos y las normas dispuestas por las autoridades.
"Tuvimos el apoyo de los apoderados, que también siguieron los protocolos. Los niños han respondido de la mejor manera posible", agregó.
Si en los días previos a la pandemia había 26 estudiantes por sala, actualmente solo tienen a ocho. Fuentealba afirmó que el resto sigue la clase "desde sus casas en una transmisión vía streaming que se realiza desde el aula".
En tanto, la sostenedora del New Heaven, Daniela Barría, explicó que en el establecimiento se contrató a un prevencionista de riesgos para liderar este regreso.
En cuanto al aforo en las salas, Barría afirmó que se dividen en grupos de 15 a 17 estudiantes en una sala de casi 75 metros cuadrados, por lo que estamos dentro de la norma.
Además, la sostenedora del New Heaven señaló que se establecieron recreos diferidos, donde primero sale a descanso un grupo de niños y luego el otro, y tienen a personal monitoreando.
San Luis
La rectora del San Luis, Astrid Carrasco, enfatizó que "el balance es positivo" luego de esta primera experiencia aplicando esta forma de hacer clases, que comenzó el jueves.
Carrasco explicó en este inicio ingresaron solamente los estudiantes de primero y segundo básico. Desde el lunes se sumarán los alumnos de kínder y prekínder, y desde el 15 de marzo comenzarán a entrar cursos más grandes, quienes hasta el momento se mantienen con clases remotas.
"Desde el 15 de marzo entrarán los terceros básicos. El 22 entran cuartos y quintos, y así iremos evaluando, hasta llegar a los cuarto medios", argumentó.
La rectora agregó que se implementó este orden debido a que "consideramos que los más pequeños son los que más necesitan presencialidad en el colegio. Necesitan estar con su profesora en directo".
La rectora recalcó que los niños ya tienen internalizado el hábito de la mascarilla y el constante lavado de manos. Sin embargo, agregó que una de las cosas que se deben enseñar a los niños es el uso a nuevos artículos con los que no estaban familiarizados, como los lavamos portátiles.
Además, la rectora comentó que se hará una inducción a los profesores en el uso de las cámaras, para la grabación en directo de las clases.
Rimay
Otro establecimiento que optó por clases mixtas fue la Escuela de Lenguaje Rimay. Su directora, Paula Villegas, comentó que como institución "nos estábamos preparando desde el año pasado. Las escuelas especiales no recibimos subvención del Estado para la implementación de los mismos protocolos o comprar materiales".
En el retorno a clases, el colegio también dispuso de distintos protocolos para resguardar la seguridad sanitaria.
Villegas detalló que tienen un tótem en la entrada que toma la temperatura, y además los niños se deben lavar las manos antes de entrar a clases.
La directora añadió que, si bien el tamaño de sus salones permitiría un aforo de 15 alumnos, decidieron dividirlos a la mitad, y con jornadas reducidas.
Sobre lo que se vendrá para el establecimiento, su directora argumentó que "es una decisión casi fluctuante. El mismo virus nos hace cambiar. Hay una comunicación constante con las familias".
"Somos respetuosos con sus decisiones (...) No tenemos una planificación estructurada ni rígida hasta fin de año. Somos flexibles en relación con dar el mayor cumplimiento de darle la atención pedagógica y fonoaudiológica a los niños", añadió Vergara.