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Algo de confianza

Hemos hecho nula pedagogía en demasiados planos y en ese silencio, se nos escapa la libertad, la democracia y el valor de las instituciones republicanas. Una gran lección es que las cosas no solo deben funcionar, deben hacer sentido a las personas y comprometerlas emocionalmente. Esa premisa es más universal de lo que pensamos.
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Es indudable que todos los cotizantes de las AFP saben que cada retiro de parte de sus fondos de pensiones impactará su futura jubilación, sin embargo el apremio de la contingencia empuja y apura esa incómoda decisión.

Pero hay algo más: el descrédito de las AFP ante la ciudadanía. La gente parece no creer en un sistema que hoy entrega montos menores, aunque en estricto apego a la realidad del mundo del trabajo. Chile tiene salarios promedio que bordean los 500 mil pesos, no de un millón, de modo que difícilmente podría accederse a una jubilación mayor, resultado más difícil considerando, encima, las lagunas previsionales.

Es decir, a sabiendas del perjuicio, muchos que hoy no requieren retirar el 10%, por ejemplo, prefieren hacerlo, porque no advierten ventajas ni credibilidad aunque el sistema objetivamente ha dado resultados, en las condiciones en que ha sido diseñado.

Es solo un ejemplo, pero extensible a tantas otras instancias.

La credibilidad va en picada, con las administradoras, con el gobierno, los políticos, los empresarios, el Congreso, las relaciones interpersonales, la Iglesia, la educación, incluso la democracia. Es el diagnóstico.

Poco se ha hecho por educar en estos planos, porque muchos han creído que la mera existencia de un factor implica su supervivencia o consolidación, olvidando que las creaciones humanas van y vienen, emergen y se derrumban de acuerdo al desarrollo de los contextos.

La naturaleza era un espacio a dominar y someter hace un siglo o más, hoy, afortunadamente, hay cada vez mayor conciencia de que se trata de un espacio del que solo somos una parte y que, incluso, dependemos de ella.

Las personas estamos dejando de creer y aquello es tanto un efecto de errores de conducción, falta de liderazgos y educación (de eso se trata la más básica) y la propia modernidad que hoy nos beneficia, pero cuya moneda de cambio parece ser el pago de esta suerte de desconfianza en el horizonte y en aquello que nos da sentido y contexto.

Una gran lección es que las cosas no solo deben funcionar, deben hacer sentido a las personas y comprometerlas emocionalmente. Sin aquello la complicidad es inexistente y los riesgos solo pueden aumentar.

Descentralización o desconcentración 2.0

"Un nuevo régimen de gobierno descentralizado con autonomía regional, será la madre de todas las batallas para avanzar". Cristian Rodríguez, Director Instituto de Políticas Públicas UCN
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Hasta ahora el debate sobre la nueva Constitución ha estado centrado en temas importantes, como son las reglas que definirán la composición de la constituyente, en los quórum que regirán la aprobación de las nuevas reglas que incorporará la carta magna, también se discute si la naturaleza del Estado será subsidiario o de derechos sociales, o si tendremos un régimen presidencial o semipresidencial, entre otros importantes asuntos. Sin embargo, es poco lo discutido sobre el régimen de gobierno que incorporara la nueva constitución, Chile ¿será un Estado unitario descentralizado basado en autonomías regionales?, o simplemente, se soslayará la cuestión a través de incorporar algunos acápites destinados a transferir ciertas autonomías y competencias hacia las escalas subnacionales.

La relativa ausencia de esta discusión en la agenda pública, eso sí que con notables excepciones, es preocupante. La presencia de una definición clara y maciza del nuevo régimen de gobierno en la futura Constitución, será un elemento fundamental para avanzar hacia un nuevo gobierno de la región, con autonomía de las directrices centrales y con competencias políticas, administrativas y fiscales claras para gobernar el territorio.

De no ser así, asistiremos a un aggiornamiento de lo existente, probablemente se profundizará el proceso de desconcentración de algunas competencias o se ordenarán otras, pero en lo sustantivo continuará el actual régimen subordinado a las directrices centrales.

La incorporación en la actual normativa de la figura del delegado presidencial, con facultades que multiplican varias veces a las que podría tener el gobernador o gobernadora regional en el futuro, es un precedente preocupante, este no solo tendrá a su cargo la seguridad pública, sino bajo su cargo estará la designación, administración y gestión de las secretarías ministeriales, ósea enormes recursos políticos, fiscales y administrativos. Se señala que esta situación cambiará en el futuro a través de las transferencias de nuevas competencias, pero el actual modelo está diseñado para que este proceso dure muchos años, lo cual no hace la diferencia con el pasado, más bien es una nueva forma de desconcentración 2.0.

Tampoco, se ha discutido sobre dos temas fundamentales de la descentralización. En primer lugar, vale preguntar si bajo la nueva constitución los consejos regionales serán reformulados en sus facultades, por ejemplo tiene sentido en el nuevo régimen que los consejos decidan la inversión pública, o se debe evolucionar hacia un cuerpo con robustas facultades de fiscalización y alcance normativo. En segundo lugar, el papel que los municipios tendrán en la nueva constitución abre interrogantes sobre una pieza clave para una descentralización efectiva; no obstante, hasta ahora la tendencia ha sido disminuir competencias de los gobiernos locales, como por ejemplo es el caso de la educación y probablemente en el futuro se disminuirán sus competencias en salud.

Las consecuencias de la ausencia de una discusión e inclusión de la descentralización en la agenda pública, es un tema preocupante porque definirá si los procesos de democratización en marcha en ciertas esferas del país alcanzarán a las regiones, si las políticas públicas serán definidas por los ciudadanos de los territorios, o si habrá una participación efectiva o solo será formal.

Primer evento de la Corporación Cluster Minero

"Necesitamos que todos los actores y, particularmente las empresas, conozcan cómo están operando estos recursos". Marko Razmilic K., Presidente, Corporación Cluster Minero Región de Antofagasta
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Desde comienzo de los años noventa, nuestra región viene avanzando en un proceso de clusterización en torno a sus recursos mineros. El sueño inspirador de estos treinta años de trabajo ha sido y seguirá siendo por un buen tiempo, la construcción de sólidas bases de un ecosistema económico, productivo, social, innovador, educativo, tecnológico e institucional para el desarrollo sustentable de nuestra región.

No obstante, avances claves en materia portuaria, energética, desalación de agua de mar para consumo humano e industrial, todavía nuestra región no logra la maduración de su clúster minero. Uno de los desafíos estratégicos pendientes es con nuestras empresas proveedoras. No tenemos un parque de empresas regionales intensivas en conocimiento, diversificadas e integradas a los mercados globales. Pero, por otro lado, en nuestra región tenemos un fondo regional público disponible de 5 o 6 millones de dólares al año que tiene por misión financiar proyectos de investigación aplicada a los procesos productivos de las empresas.

Desde abril de este año, junto al Intendente Regional, el Presidente de la Cámara Chilena de la Construcción de Calama, el Presidente de la Asociación de Municipalidades de nuestra región y los Rectores de la Universidad de Antofagasta y Universidad Católica del Norte, nos toca liderar la Corporación Clúster Minero de la Región de Antofagasta una de cuyas prioridades estratégicas es precisamente la contratación y desarrollo innovador y tecnológico de las empresas proveedoras regionales. Por esta razón, esta semana, el primer evento de esta Corporación, fruto del trabajo de los once gremios que integran su Consejo Gremial, se focalizó precisamente en cómo mejoramos la administración de los recursos FIC regionales para el desarrollo innovador y tecnológico de las empresas proveedoras regionales.

Para decirlo en positivo, tenemos un enorme desafío en la aplicación potente de estos recursos para que esta investigación conecte virtuosamente al mundo universitario con el mundo empresarial.

Este evento fue el primer paso de la Corporación Clúster para dar un salto cualitativo en el uso de estos recursos. Necesitamos que todos los actores y, particularmente las empresas, conozcan cómo están operando estos recursos, cuáles son los grandes desafíos tecnológicos de la industria minera, cuál es la oferta de conocimiento de las universidades regionales. Nuestro sueño es que, en el mes de enero próximo, cuando se abra la convocatoria para postular proyectos al fondo FIC, nuestras empresas, especialmente las pymes, se hayan conectado con las universidades para postular a recursos para desarrollar aquella innovación y desarrollo tecnológico que le permitirá diferenciar su oferta de valor para sus clientes.