G-20 pone el foco en el multilaterismo frente a la vacuna contra el covid-19
CUMBRE. Macron pidió "evitar a toda costa el escenario de un mundo a dos velocidades", en que una parte pueda acceder al fármaco y la otra no. Merkel dijo que "si estamos unidos a nivel global, podemos dominar y superar el virus". Trump fue a jugar golf.
El comienzo de la cumbre del G-20, es decir, de los 20 países y estados con mayor desarrollo industrial, fue marcado por discursos en torno a la recuperación económica mundial en medio de la pandemia del coronavirus, junto al desarrollo y distribución de una eventual vacuna. Para estos fines los jefes de estado subrayaron la importancia de mantener relaciones multilaterales, en un giro a la inversa a lo propuesto por el Presidente de Estados Unidos, Donald Trump, quien durante toda su gestión ha defendido el nacionalismo.
"Tenemos el deber de afrontar el desafío juntos durante esta cumbre, y dar un fuerte mensaje de esperanza y de tranquilidad adoptando medidas para mitigar esta crisis", afirmó desde Riad, Arabia Saudí, el rey de aquel país, Salman bin Abdulaziz, quien este año ejerce la presidencia rotativa del grupo de las economías más industralizadas.
Durante la reunión que se extenderá hasta las primeras horas de mañana, los miembros del G-20 discutirán cómo impulsar la recuperación sanitaria y económica del mundo, en medio de la segunda ola del coronavirus que se está desarrollando en varios de ellos.
Uno de los temas que marcó las primeras horas del encuentro, como lo fue en la cumbre extraordinaria de líderes realizada en marzo, fue cómo hacer accesible la vacuna contra el covid-19 para los países menos desarrollados.
"Debemos trabajar para crear las condiciones para un acceso asequible y equitativo para todo el mundo", aseguró Salman, agregando que al mismo tiempo hay que estar preparados "para futuras pandemias".
A causa del virus, la cumbre se está realizando en forma telemática, razón por la que el Presidente de Francia, Emmanuel Macron, destacó en una grabación la necesidad de "garantizar el acceso (de la vacuna) a escala planetaria, y evitar a toda costa el escenario de un mundo a dos velocidades".
Fondos insuficientes
La canciller alemana, Angela Merkel, por su parte indicó que los fondos recaudados hasta ahora en el Covax, una plataforma para que los países de ingresos medios y altos financien el acceso a las vacunas de los más pobres, "no son suficientes".
La jefa de Estado recordó también a sus pares que el objetivo para fines de 2021 es repartir 2.000 millones de dosis y señaló que la iniciativa, de momento, ha logrado recaudar unos US$5.000 millones, cuando sólo la participación de Alemania asciende a más de US$593 millones.
"Esta ayuda a corto plazo es del interés de todos nosotros y vale también para mejorar la prevención a largo plazo ante futuras pandemias globales", dijo Merkel, solicitando a su vez fortalecer de manera sostenible a la Organización Mundial de la Salud (OMS) con "un financiamiento fiable, una mejor cooperación y una mayor independencia", para la cual "el G20 puede aportar un apoyo importante, e incluso irrenunciable".
"Si estamos unidos a nivel global, podemos dominar y superar el virus y sus consecuencias y para ello vale la pena un mayor esfuerzo", destacó la líder alemana, junto con señalar que así como cada país intenta dar sus propias respuestas a la pandemia tiene "contribuir también con las necesarias respuestas globales", porque "un desafío global, como sin duda lo es esta pandemia, sólo se puede superar con un esfuerzo global".
"Sólo uniendo nuestras fuerzas y trabajando juntos como podremos derrotar al coronavirus y salir más fuertes de esta crisis", aseguró por su parte el primer ministro británico, Boris Johnson. En tanto, el Presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, dijo que "no estaremos a salvo hasta que todos estén a salvo".
Desde Latinoamérica, el Mandatario argentino, Alberto Fernández, afirmó que la lucha contra la pandemia "no es una tarea solo de los gobernantes: es una tarea colectiva de la comunidad internacional que exige suscribir un gran pacto de solidaridad global", mientras que su par brasileño, Jair Bolsonaro, agregó que "desde el inicio supimos que era necesario cuidar de la salud y de la economía simultáneamente. El tiempo viene probando que acertamos".
En paralelo, Trump envió un discurso que no trascendió a los medios y se fue a jugar golf.
US$5.000 millones es el fondo de países de ingresos medios y altos para que los pobres accedan a las vacunas.
2.000 millones de vacunas contra el coronavirus