El compromiso de un matrimonio por educar a sus alumnos con escasa conexión a Internet
EDUCACIÓN. Los profesores Rosa Contreras y Jorge Rodríguez están a cargo de la Escuela Rural G-98, situada en la localidad de Carolina de Michilla.
Con 37 años de matrimonio, Rosa Contreras y Jorge Rodríguez, han dedicado toda su vida a la labor docente. En Mejillones trabajaron 32 años, pero desde hace cuatro asumieron el desafío de hacerse cargo de la Escuela Rural G-98 "Lucila Godoy Alcayaga" de Michilla.
Esta localidad, ubicada a 110 kilómetros de Antofagasta, cuenta con muy baja conectividad a Internet, plataforma que se transformó en un servicio de primera necesidad desde la llegada de la pandemia en marzo.
Pero estos profesores con creatividad, pasión y mucha vocación han logrado derribar esta barrera tecnológica para que los cerca de 20 alumnos de primero a sexto básico de este establecimiento educacional puedan continuar con sus estudios.
Los docentes con rutinas de títeres y actuaciones disfrazados grabadas han buscado que sus estudiantes puedan aprender de una manera distinta, quienes además destacan la calidez de sus alumnos.
Fruto de su esfuerzo, es que además el establecimiento obtuvo la Excelencia Académica en marzo. "En Michilla, por zona geográfica la conectividad es muy mala. Solo nos llega la compañía Entel, y Movistar si uno va hacia las faldas de los cerros, por ejemplo, a partes puntuales, puede alguien lograr comunicarse. Es muy baja la señal, pero hemos logrado hacer varias cosas", recalca Rosa Contreras.
La educadora agrega que a los niños se les ha entregado material en forma física y que cuando han logrado tener buena señal, hacen videollamadas con ellos por whatsapp.
Y el material pedagógico lo llevan a la casa de los alumnos.
"Cuando aún no habían llegado los libros escolares, cargamos las tablets que hay de los niños y descargamos la primera parte que envió el ministerio relativo al programa Aprendo en Línea. Por lo cual se les entregó los tablets y fuimos dirigiendo a los apoderados a través de mensajes de Whatsapp", explica la docente.
Contreras agrega que su esposo, quien además es el encargado de la escuela, confeccionó un buzón afuera del colegio para que los apoderados depositen el material que trabajan junto a los estudiantes para ser revisado.
Mientras que esta semana, la seremi de Educación les entregó material pedagógico correspondiente a la segunda etapa del "Plan Aprendo en Casa", elaborado por el Ministerio, con el objetivo de facilitar el proceso educativo a distancia en el periodo de cuarentena.
La profesora además destacó el compromiso y preocupación del seremi de Educación, Hugo Keith.
"La respuesta de los apoderados ha sido positiva. Casi el 100% de los niños ha realizado las tareas. Ha sido un gran desafío para el primer año, ya que es complicado porque nosotros no tenemos niveles de transición. Entonces, ellos llegan sin escolaridad a la escuela. Ese ha sido un gran desafío, pero el apoyo de los apoderados ha sido asombroso para nosotros porque cuesta, ya que se necesita que sean clases presenciales dirigidas por el profesor para que los niños puedan obtener las herramientas necesarias", indicó.
Vocación
Su esposo y además jefe, Jorge Rodríguez, es el encargado de la escuela, quien destaca el esfuerzo puesto en este tiempo.
"Ha sido difícil, pero es un atentado a la creatividad de los profesores porque no hemos escatimado esfuerzos para salir adelante con los niños. De una u otra manera, tenemos que buscar la alternativa A, B o C y en eso mi señora y yo mezclando un poco de locura, entusiasmo, alegría, amor y pasión a lo que hacemos gracias a Dios que hasta ahora creo que nos ha dado resultados", señaló.
Respecto a cómo ha sido su experiencia de trabajar en una escuela rural, destacó que la importancia de que un profesor trabaje en algún momento de su vida en un establecimiento con estas características, pues cree que ahí está la esencia, "la base de las herramientas que a uno le faltan, en el aula rural las aprende".
"La pandemia dentro de todos los efectos malos que ha tenido, ha emergido algo positivo. Ha fortalecido lazos en algunas personas para poder ayudarse unos con otros. Ha permitido valorar el trabajo quizás muy simple y humilde de las personas, conocer al vecino. Y valorar de una manera diferente las acciones que se hacen que eran cotidianas. Hoy para mí es extraordinario lo que hacen las personas que son recolectores de basura, los que trabajan en movilización y en distintas cosas. Creo que a nivel docente nos ha permitido mejorar la conectividad a través de Whatsapp, teléfono para saber cómo se sienten. Se han creado mejores lazos a diferencia de probablemente en una situación normal, se han mejorado los canales de comunicación", enfatizó.
Rodríguez agrega que el niño que vive ya en un mundo cibernético, normalmente pierde algo que es tan esencial como la sociabilización.
"Se transforma en isla, pese a que viva rodeado de millones de personas. En cambio, aquí como ellos no tienen acceso a Internet, menos de un celular. Y si tuviesen la posibilidad de usar celular, nosotros trataríamos que no lo llevaran a la escuela porque es un elemento distractor, preferimos que la atención sea más focalizada en compartir", indicó.
Los profesores adelantaron que están trabajando en un proyecto junto a Minera Centinela para crear una radio escolar que los pueda apoyar en la labor educativa, la que luego podría transformarse en una señal comunitaria.
"La respuesta de los apoderados ha sido positiva. Casi el 100% de los niños ha realizado las tareas. Ha sido un gran desafío para todos".
Rosa Contreras, Profesora
"Se han creado mejores lazos a diferencia de probablemente en una situación normal, se han mejorado los canales de comunicación".
Jorge Rodríguez, encargado de la escuela