Hermanas de caleta El Bote suben a un cerro para tener señal y hacer sus tareas escolares
EDUCACIÓN. Llegan caminando o en vehículo hasta el sector donde logran conectarse a Internet para cumplir sus deberes.
En el vehículo de su padre, dos hermanas que viven en la caleta El Bote, a unos 60 kilómetros al norte de Antofagasta, deben subir hasta un sector de cerros para encontrar la cobertura telefónica que les permita descargar el material para cumplir con sus deberes escolares.
Con la emergencia sanitaria en el país, las clases presenciales fueron suspendidas en marzo y remplazadas por educación remota. Pero este proceso resulta aún más complejo para Ivania y Javiera Molina, quienes viven en la caleta compuesta por unas 80 personas, en una zona en la que no llega la señal telefónica.
Las hermanas son alumnas de la Escuela "Edda Cuneo" E-88 y del Liceo Científico Humanista "La Chimba" B-36, unidades dependientes de la Corporación Municipal de Desarrollo Social (CMDS).
En la caleta El Bote no hay recepción telefónica, por lo que en caso de cualquier emergencia, los residentes tienen que trasladarse durante 20 minutos en vehículo por un difícil camino hasta Caleta Constitución, para recién solicitar una ayuda que por la distancia, tardará al menos una hora en llegar.
Desde la CMDS explicaron que si bien hay más alumnos que viven en caletas y zonas alejadas, la situación de estas hermanas es particular.
Traslado
Para alcanzar una cobertura que les permita conectarse a Internet, las estudiantes son trasladadas en el vehículo de su padre hasta llegar a un punto entre los cerros donde logran la recepción. Si el transporte no está disponible, deben caminar por varios kilómetros para llegar ese punto.
Cursando octavo básico en la Escuela "Edda Cuneo", Ivania explicó que con su hermana "tenemos que subir al cerro con muchas complicaciones, porque nuestras tareas tienen plazos y no tenemos tanto tiempo para hacerlas, porque cuando subimos no podemos quedarnos un largo rato para no dejar la casa sola, para nosotras es complicado".
Javiera, alumna de primer año medio del Liceo "La Chimba", dijo que "me ha costado demasiado, ahora estoy atrasada en mis tareas (…) por ejemplo a mí me cuestan las matemáticas, por eso cuando subo al cerro descargo tutoriales en YouTube para aprender mejor y hacer mis tareas, pero no es lo ideal".
A pesar de lo alejado que viven del radio urbano, la familia no se encuentra en una situación de alta vulnerabilidad y lo que más complica sus vidas es la falta de conexión.
Rodrigo Molina, padre de las alumnas, aseguró que "la carencia más grande que tenemos en este sector es la falta de telefonía, nos hace falta conectarnos con la ciudad y sobre todo en la parte educativa donde todos los procesos son por Internet y eso nos lleva a buscar señal por los cerros incluso durante la noche".
Oficio
Por ello, lo que más solicita es apoyo para los niños y una antena repetidora que les permita comunicarse.
La presidenta del directorio de la CMDS, la alcaldesa Karen Rojo, explicó que "vamos a oficiar a la Ministra de Transportes y en especial a la Subsecretaría de Telecomunicaciones, para que puedan realizar todas las gestiones necesarias para instalar una antena repetidora en el sector, de modo que estos casos no se sigan experimentando".
Además, Rojo instruyó que se realicen visitas constantes para llevar acompañamiento a los alumnos que viven en los sectores costeros de la comuna.
La falta de cobertura es un elemento sensible en un contexto donde ya hay otros factores que no hacen sencilla la educación de las hermanas de caleta El Bote.
En Caleta Constitución hay una escuela multigrado que cuenta con profesor e imparte con cursos de primero a sexto básico, por lo que luego deben viajar hasta Antofagasta.
Para asistir a sus establecimientos, ambas deben esperar un furgón contratado por la CMDS que traslada a los 12 niños que viven en caletas Lagarto, El Bote, Constitución, Errázuriz y Juan López.
Este servicio, que sale a las 5.30 horas desde Antofagasta, deja a los menores en sus escuelas y luego realiza el recorrido para dejarlos en sus casas.
Esta modalidad, interrumpida por la pandemia, la dispone también la CMDS para los estudiantes de La Negra.
"Tenemos que subir al cerro con muchas complicaciones, porque nuestras tareas tienen plazos y no tenemos tanto tiempo para hacerlas, porque cuando subimos no podemos quedarnos un largo rato".
Ivania Molina, Alumna de octavo básico