Aumentan los negocios cerrados o en arriendo en el centro de Antofagasta
ECONOMÍA. Locatarios aún no logran normalizar sus horarios de funcionamiento y sufren la fuerte competencia del comercio ilegal.
"El dueño decidió cerrar. Desde que comenzaron las protestas la clientela bajó mucho y al parecer no quedaba otra". Ese es el relato de una de las garzonas de una céntrica cebichería peruana que hace unos días debió bajar sus cortinas definitivamente debido a los efectos del "estallido social".
En el casco central de la ciudad, donde conviven el retail y las grandes cadenas con pequeños y medianos comerciantes, hoy abundan los letreros "se arrienda" y casi en la misma proporción, los locales con sus cortinas cerradas.
Y es que se van a cumplir ya cinco meses desde que comenzaron las movilizaciones y, además del deterioro de la placa comercial y la proliferación sin control del comercio ambulante, estos locales aún no logran normalizar sus horarios de funcionamiento.
Yasna Ahumada, administradora de Valdés Peñailillo Inmobiliaria (VPI), explicó que producto de esta situación se está produciendo un ajuste importante en los valores de los inmuebles comerciales en el sector centro.
"Hemos debido conversar con los propietarios y explicarles la situación del comercio en el centro de la ciudad. Prácticamente no han podido trabajar por las protestas y así es imposible que paguen el mismo canon de arriendo. Los valores hemos debido bajarlos en promedio un 25%", aseguró.
En Antofagasta no existe una medición específica para las ventas del comercio. Sin embargo, en el gremio reconocen que el informe que entrega mensualmente el Instituto Nacional de Estadísticas (INE) sobre las ventas de supermercados es un muy buen reflejo de lo que ocurre en el resto del rubro.
Y las cifras de la repartición de gobierno reflejan lo que está ocurriendo a nivel regional y ayudan a dimensionar la compleja situación que enfrenta el gremio en general.
Según el último informe del INE -entregado esta semana- durante enero el Índice de Ventas de Supermercados a precios constantes anotó una baja de 2,1% respecto del mismo mes de 2019.
El indicador encaja así su quinto mes consecutivo con números rojos, luego de un 2019 que se mantuvo con variaciones positivas hasta septiembre.
Seguridad
El presidente de la Cámara de Comercio, Servicios y Turismo de Antofagasta, Antonio Sánchez, advirtió que este éxodo de los comerciantes del centro de la ciudad se viene produciendo desde hace un par de meses.
"Es lógico. Los más pequeños no tienen espalda para soportar tanto tiempo en estas condiciones. No solo son los robos y destrozos en las jornadas más violentas, sino también las movilizaciones más pacíficas que obligan a cerrar más temprano de lo normal", dijo.
Coincidió con Ahumada en torno a que el valor comercial de las propiedades en el casco central ha decaído significativamente. "No hay interés por venir a instalarse al centro, todo lo contrario, los comerciantes están huyendo y buscando otros sectores donde poder instalarse", advirtió Sánchez.
Según el líder gremial, es altamente probable que se produzca un desplazamiento hacia zonas o enclaves que ofrezcan mayor seguridad.
"Puede ser que se vayan a otros sectores de la ciudad o se resguarden en grandes superficies como los mall -que tienen la opción de enrejarse- y pueden ofrecer mayores niveles de seguridad a sus arrendatarios, aunque con niveles de precios mucho más altos".
Competencia
Finalmente, el representante gremial lamentó la proliferación de los ambulantes que -según él- es un golpe adicional al comercio establecido.
"Le hacen un grave daño al comercio y también al país que debido a su actividad informal recauda mucho menos por concepto de IVA, en momentos en que es necesario financiar una cuantiosa agenda social", concluyó.
Comercio ambulante impacta a locales establecidos
Susana Torres es suplementera. Sus padres lo eran y hoy ella administra el negocio. Explica que la competencia con los ambulantes es en desventaja. "Nosotros vendemos el agua a $1.000 y ellos a $500. Pero nosotros tenemos que pagar IVA y otros impuestos, ellos no. Así no se puede competir".
Carlos Céspedes es administrador del local Waide, en el centro. La proliferación de los ambulantes lo ha perjudicado mucho. "Esto es molesto, muchas de las personas que nosotros necesitamos que vengan al centro, no lo hacen porque está lleno de ambulantes, a penas se puede andar".
Mónica Aracena es administradora de Ópticas Schilling, rubro que se ha visto perjudicado por el comercio ambulante. "Nosotros vendemos lentes con la protección debida, ellos (ambulantes), no, pero aún así la gente les compra, ya que sus precios son muy baratos, pero sin seguridad".
Daniel Peñaloza es encargado de tienda en Smart Chile y explicó que algunos clientes siguen prefiriendo el comercio establecido. "Si nos ha repercutido, no podemos decir que no, pero los clientes saben y están conscientes de que si compran con boleta, tienen la garantía si el producto falla".