Siendo hijo adoptivo de esta ciudad, es considerado uno de los más relevantes alcaldes que ha tenido Antofagasta. En su gestión como edil, la que se extendió por 18 años de forma consecutiva, inició un gigantesco plan de obras que permitieron un cambio sustantivo de la urbe.
Uno de sus principales hitos como jefe comunal fue obtener un préstamo, a título personal, de la banca británica para financiar la pavimentación de Antofagasta, construir el Mercado Municipal y remodelar la avenida Brasil y el Balneario Municipal.
Su vocación de servidor público y su dedicación a la ciudad le hicieron justo merecedor de una serie de reconocimientos. Así, llevan su nombre la Octava Compañía de Bomberos, la Escuela Básica D-74, uno de los bandejones del Parque Brasil y un monumento instalado al inicio del mismo, diseñado por el arquitecto Jorge Tarbuskovic Dulcic.
Pero el gran legado que dejó a la ciudad el alcalde Maximiliano Poblete Cortés, para algunos parece no ser mérito suficiente, lo que quedó de manifiesto tras el ataque con pintura realizado al busto del también exalumno del Liceo de Hombres de Antofagasta, durante una marcha el lunes.
Sin duda una lamentable situación que también ha afectado a otros monumentos en honor a personas ilustres que han contribuido de gran manera a la construcción de la identidad antofagastina.
"El doctor Maximiliano Poblete Cortés fue considerado alcalde modelo' por su espíritu de servicio, que se manifestó en el municipio antofagastino durante 18 años. Fue gestor de obras fundamentales, como la construcción de los sistemas de agua potable y alcantarillado, la pavimentación de las calles principales y el riego de las demás", explicó el periodista, académico e historiador Isidro Morales Castillo.
Obispo
Otra de las personalidades que también destacó por su labor por el desarrollo de la zona fue monseñor Luis Silva Lazaeta, el primer obispo de Antofagasta.
Al igual que lo sucedido con el busto de Maximiliano Poblete, el monumento que rinde homenaje al sacerdote, ubicado frente a la Catedral, fue atacado en varias ocasiones. Hoy la escultura de cobre que ahí yacía fue retirada.
Isidro Morales nos cuenta sobre su legado para la ciudad. "El obispo de Oleno, Luis Silva Lezaeta es, sin dudas, una de las personalidades más importantes de la historia antofagastina. Su trabajo fue pastoral, de beneficencia, pero también educacional, ya que impulsó la fundación del Colegio Belga-Inglés para Señoritas y el Colegio San Luis. Erigió templos como la Catedral, Corazón de María y San Francisco. También promovió la construcción del nuevo Hospital del Salvador en Avenida Argentina, y el Asilo de Ancianos para enfrentar el flagelo de la mendicidad que afectaba a los adultos mayores".
A la lista de monumentos y símbolos agraviados se suman el busto de Arturo Merino Benítez (fundador de la Fuerza Aérea de Chile), y la escultura del padre Alberto Hurtado, entre otros ilustres.