Simplemente Ana Gabriel: Puro romance
Hasta la fecha ha completado tres presentaciones sobre la Quinta Vergara a punta de canciones románticas y rancheras. Hoy es la cuarta.
Un día como hoy, pero hace seis años, Ana Gabriel pisaba por tercera vez el escenario de la Quinta Vergara. No hizo más que asomarse a escena para que los asistentes comenzaran a vitorearla y la artista respondió a ese cariño del Monstruo cantando grandes éxitos como "Soy como quise ser", "Cómo olvidar", "Huelo a soledad", "Destino" y "Mar y arena", logrando que la Quinta se convirtiera en un gran karaoke, mezclando rancheras y baladas.
"Las maduritas aún podemos hacer feliz a la gente" dijo en aquella oportunidad, causando más furor entre los asistentes que quedaron en llamas cuando la intérprete cantó "Quien como tú" y "Simplemente amigos", alcanzando el peak de sintonía (48 puntos) de esa noche y la versión completa.
Pero la relación de la mexicana con Viña comenzó en 1992, cuando ya llevaba 18 de carrera con temas conocidos como "Pecado original" e "Hice bien quererte", y habiendo ganado dos veces el premio a mejor intérprete del cancionero hispanoparlante, según recordó el propio Antonio Vodanovic cuando la presentó en aquella ocasión. El público se entregó totalmente a la mexicana de voz desgarrada, quien inició su presentación con un popurrí y siguió con sólo grandes éxitos.
En 1995 volvería al escenario para reanudar su relación con el Monstruo, el que ninguna vez le ha mostrado las garras a la intérprete de "Ahora" y "Luna". Al contrario, siempre ha estado dispuesto a alabarla y entregarle su cariño a través de aplausos, y galardones. Aquella vez comentó en pleno show que había llegado pocos días antes y estaba ansiosa por subir al escenario para decirle al público "todo el agradecimiento que le tengo a esta parte del mundo, a Chile y sobre todo que hace tres años que estuve aquí con todos ustedes".
Apesar de la extensa trayectoria de los hermanos Lucía y Joaquín Galán, más conocidos como el dúo Pimpinela, sólo llegaron a la Quinta Vergara en 1984. "Realmente no sé qué fantasma extraño hay en Viña del Mar, burocrático o alguien que organiza nos debe detestar, porque nunca más fuimos.
Ojalá se destrabe esto, porque ya no sé de qué cuestión extraña viene. Por nuestra parte nos encantaría, pero nunca dependió ni depende de nosotros", manifestó Lucía a Cooperativa en 2013. De allí que se considere que la actuación de hoy sea una especie de revancha.