Redacción
Por el delito de robo con homicidio fueron formalizado ayer dos jóvenes antofagastinos acusados del asesinato de Carlos Páez Araya, de 35 años, guardia de seguridad y conductor de la app InDriver, quien estuvo perdido desde la noche del 17 a la tarde del 21 de enero, cuando se halló su cadáver.
Los presuntos autores del homicidio fueron identificados con las iniciales de M.A.S.M. y C.H.J.O.M., este último menor de edad. A un tercer implicado, identificado como Y.A.C.Q., se le imputa participación como encubridor.
Según manifestó el vocero del Ministerio Público, Nelson Díaz, la detención se realizó gracias a un trabajo conjunto entre la Fiscalía y la Brigada de Homicidios de la Policía de Investigaciones (PDI).
"El objetivo de todo esto era la sustracción del vehículo de la víctima y de otras especies, específicamente dinero y celular, pero el objetivo era sustraer el vehículo", manifestó Díaz, aludiendo a las causas del homicidio del conductor.
Viaje
Durante la formalización, el Ministerio Público expuso las declaraciones realizadas por los tres detenidos, las cuales apuntaban a que la muerte de Páez se habría producido en el contexto de una pelea.
De acuerdo a tales versiones, poco después de las 23 horas del viernes 17 de enero, M.A.S.M., y C.H.J.O.M., solicitaron un servicio de transporte a través de la aplicación InDriver para dirigirse desde la población Ana Giglia Zappa hasta la cancha de velocidad en calle Adamson, donde iban a disputar un partido de fútbol con amigos.
El servicio fue tomado por Carlos Páez Araya, trabajador de una empresa de seguridad que en su tiempo libre se dedicaba a prestar servicios para la App en su Kia Río gris.
Víctima y victimarios no tenían ningún tipo de parentesco ni amistad.
Uno de los imputados, el menor de edad, se sentó en el puesto del copiloto, mientras el otro se ubicó atrás.
En el trayecto uno de ellos llamó a los amigos que esperaban en la cancha diciendo que no les iba a alcanzar el dinero para pagar el servicio.
Tras escuchar el diálogo, Carlos Páez habría detenido el Kia Río en calle Valdivia para increpar a los pasajeros.
En ese contexto, según el testimonio de los detenidos, las palabras fueron escalando hasta que el conductor comienza a agredir al menor de edad sentado a su lado, situación que habría ocasionado la reacción del joven que iba en parte trasera, quien comenzó a extrangular a Páez hasta que éste se desvaneció.
De ahí, ambos habrían llevado el cuerpo en el mismo vehículo hasta la salida de Antofagasta, en el sector del Salar del Carmen, donde abandonaron el cadáver.
Encubridor
Posteriormente los imputados regresaron con el vehículo de la víctima a la población Ana Giglia Zappa, donde cuentan todo lo ocurrido a Y.A.C.Q. y le entregan el automóvil para que lo "desaparezca". Éste, sin embargo, no lo hace y finalmente la PDI lo encuentra sin su patente en la misma población el 23 de enero.
Durante la audiencia de ayer, el Ministerio Público solicitó prisión preventiva para los dos imputados mayores de edad y la internación provisoria para el menor por un plazo de 90 días, petición que fue concedida por el juez Francisco Lanas.