"Las conclusiones del proceso constituyente interpretan bastante las demandas actuales"
La abogada y exseremi de Justicia durante la segunda administración de la Presidenta Michelle Bachelet, Alejandra Pozo, tuvo un rol clave en la Región de Antofagasta en el Proceso Constituyente, llevado adelante por ese gobierno.
La iniciativa, desarrollada en 2016, tenía como fin recoger la opinión y las demandas de la ciudadanía, de manera que sirvieran como base para una nueva Constitución.
Las conclusiones de este proceso quedaron plasmadas en un proyecto de ley ingresado al Congreso en marzo de 2018, pocos días antes de que finalizara el gobierno de Bachelet, cuya tramitación no avanzó.
Pozo, quien fue la coordinadora de ese trabajo en la región, considera que muchas de las demandas planteadas actualmente por la comunidad están reflejadas en este proyecto de ley. Por eso destaca la importancia de que estas iniciativas sean consideradas, recordando que durante este proceso constituyente se invirtieron recursos públicos.
¿Cómo fue su experiencia de participar en este proceso para construir una nueva Constitución?
- Considero que el proceso fue inédito a nivel nacional. Porque el gobierno de Michelle Bachelet al implementar el proceso constituyente estableció la metodología de los encuentros locales autoconvocados, de los cabildos provinciales y regionales.
También estableció un consejo de observadores ciudadanos que estaba conformado por académicos, abogados y profesionales de diversos sectores políticos, de la exNueva Mayoría, Chile Vamos, de organizaciones sociales y dirigentes de sindicatos, y además un equipo de sistematizadores.
Entonces, el proceso implementó la metodología para los encuentros locales autoconvocados y cabildos, lo que permitió llegar a conclusiones que sirvieron como base ciudadana para el proyecto que se redactó e ingresó al Congreso en marzo del 2018.
¿Cuáles fueron las conclusiones?
- Las conclusiones que están sistematizadas reflejan bastante lo que la ciudadanía hoy está demandando. Dentro de las cosas que se pudieron concluir, por ejemplo, es que la gente solicitaba salud pública de calidad garantizada.
En materia de seguridad social, que incluye a las AFP, pedían un sistema de seguridad garantizado por el Estado. Se pedía una educación laica, gratuita y de calidad pública, lo que no significaba que no quisieran la privada, pero que la pública fuera laica, gratuita y de calidad. También se pedía que se garantizara una vivienda digna y acorde al tamaño de las familia (...) Y exigían el derecho a un medio ambiente libre de contaminación y sustentable. Eran los cinco derechos que las personas pidieron que estuvieran garantizados en la nueva Constitución a nivel nacional.
¿Y a nivel regional?
-En materia regional, lo que más recuerdo dentro de los valores que se discutían era democracia y transparencia. En la región también se solicitaba que se considerara la probidad como un valor en la nueva Constitución.
Esas conclusiones se pueden consultar en el sitio web www. unaconstitucionparachile.cl . Allí están las conclusiones de los sistematizadores, del consejo ciudadano de observadores, separados incluso por consulta individual, encuentros locales, cabildos y los conceptos que las personas entendía por valores.
Constitución
Esto terminó en la presentación de dos proyectos de ley..
- Se redactaron dos proyectos. El primero que presentó la Presidenta Bachelet fue el 2017 para modificar el capítulo 15 de la Constitución. Ese capítulo contempla el proceso de reforma de la Constitución. Posteriormente, en 2018, con todo lo que se recogió en el proceso constituyente, que se llama las bases ciudadanas, se redactó el proyecto de nueva Constitución que ingresó en marzo.
Y ese proyecto no avanzó en el Congreso...
- No avanzó. Y hoy, desde mi experiencia y por lo que he visto en las calles y manifestaciones, creo que ese proyecto de nueva Constitución sí refleja lo que se recogió en las bases ciudadanas, que son demandas muy acordes a lo que actualmente se está pidiendo.
¿Usted cree que dado que una de las demandas que más se reitera es la necesidad de una nueva Constitución, sería bueno que se utilizaran estas conclusiones o el proyecto ya presentado?
- Yo sugería que se ocuparan los dos proyectos que ingresó la Presidenta Michelle Bachelet porque además en el proceso constituyente hubo recursos públicos, organismos internacionales que observaron. Estuvo el consejo ciudadano de observadores, el comité de sistematización, además recordemos que hubo una etapa previa de educación cívica a través del constitucionario, que era un manual con conceptos básicos para que la ciudadanía pudiese debatir. Cosa que hoy no creo que sea tan viable porque si estamos en un proceso de reducción de presupuesto fiscal, el nuevo gobierno tendría que considerar en la ley de presupuesto que se discuta un proceso para crear una asamblea constituyente que sea garantizado en términos de transparencia.
¿Fue alta la participación?
- Habría que hacer dos consideraciones. Una es la participación en relación a la población nacional y otra la participación ciudadana en relación a los votantes. Una vez que el voto es voluntario tenemos una baja participación ciudadana en las elecciones (...) y que en la última elección en el país fue de un 34%. Entonces, si consideramos este porcentaje de participación ciudadana en las elecciones y lo comparamos con quienes participaron en el proceso constituyente, sí es bastante representativo.
Participaron alrededor de 300 mil personas a nivel nacional. Pero no es tan representativo de la población, que tampoco es muy activa políticamente. No lo es en las elecciones menos lo iba a ser para un proceso constituyente donde requería tiempo, opinión, análisis, diálogo. Sí es representativa de la ciudadanía activa.
Usted recomendaría que se hiciera un proceso similar a ese...
- No soy quién para recomendar que se haga o no un proceso similar. Yo recomendaría que se activarán esos proyectos de ley que ya están en el Congreso, que es la reforma al Capítulo 15 y luego que se tramite el proyecto de ley que ingresó Michelle Bachelet. Realizar uno nuevo tendría que ser analizado por el gobierno, pero además tendría que haber presupuesto. Creo que lo que existe es bastante válido porque refleja lo que hoy la gente está manifestando en la calle. Lo que está en el proyecto de nueva Constitución sí se refleja en las demandas.
¿Usted cree necesaria una nueva Constitución?
- Creo que es necesaria una revisión con independencia de la forma en que nació. Todos sabemos que la Constitución surge en una etapa de dictadura, pero hubiese sido en dictadura o en democracia siempre es recomendable revisarla, porque la sociedad de 1980 es distinta a la que existe en 2019. Y es evidente que toda ley debiera adecuarse a la actual sociedad.
"Yo sugería que se ocuparan los dos proyectos que ingresó la Presidenta Michelle Bachelet porque además en el proceso constituyente hubo recursos públicos, organismos internacionales que observaron". "En materia de seguridad social, que incluye a las AFP, pedían un sistema de seguridad garantizado por el Estado. Se pedía una educación laica, gratuita y de calidad pública, lo que no significaba que no quisieran la privada, pero que la pública fuera gratuita y de calidad".