El Mandatario hizo un positivo balance de su gira y destacó los acuerdos alcanzados
VIAJE. Piñera aseguró que retorna a nuestro país con "el alma inspirada" por el Papa Francisco. Estuvo diez días en Europa.
El Presidente Sebastián Piñera realizó ayer, poco antes de emprender el viaje de regreso a Chile, un positivo balance de su gira por Europa, la cual incluyó la concreción de importantes acuerdos en distintas áreas.
Durante diez días, el Mandatario visitó cinco países -Francia, España, Alemania, Bélgica e Italia-, a la vez que se reunió con las principales autoridades de dichas naciones, avanzando en materia económica en la captación de inversiones y la modernización del acuerdo de Asociación con la Unión Europea (UE).
Al respecto, Piñera manifestó que "estamos terminando nuestra gira a Europa, ha sido intensa, pero profunda". Detalló que "nos reunimos con el Presidente Pedro Sánchez, de España; con el Presidente Emmanuel Macron, de Francia; con la Canciller Ángela Merkel, de Alemania; con las máximas autoridades de la UE. Tuvimos una reunión con empresarios en Hamburgo y hemos terminado con la visita al Papa, con la canonización de Pablo VI y el arzobispo Romero (ver nota principal)".
A su juicio, ésta "ha sido una gira en que hemos logrado grandes acuerdos para Chile, para abrir más mercados a nuestras importaciones y al mercado europeo, especialmente en el mundo de la alimentación y agrícola. Y acuerdos importantes en materia de educación, ciencia, tecnología y energías".
"Por tanto, nos vamos contentos, porque el objetivo de esta gira fue lograr acuerdos que fueran beneficiosos y buenos para todos los chilenos, para tener más inversiones, más crecimiento, más empleo y oportunidades", sostuvo.
Finalizó señalando que "ahora volvemos a Chile con el alma inspirada por el Papa a trabajar todos juntos por hacer de Chile un mejor país".
El jefe de Estado inició su viaje por el viejo continente el pasado 6 de octubre junto a la Primera Dama, Cecilia Morel, el Canciller Roberto Ampuero y un grupo de legisladores.
Su primera parada fue Madrid, donde se reunió con el Presidente Sánchez, y luego fue a París, donde lo recibió Macron. Ahí el Mandatario pidió acelerar el proceso de extradición de Ricardo Palma Salamanca, condenado como autor material del asesinato del senador Jaime Guzmán, en 1991.
Tras ello se reunió en Berlín con Merkel, con quien trató los crímenes de lesa humanidad cometidos en Colonia Dignidad durante el régimen militar. Tras pasar también por Bélgica, finalizó su gira junto al Papa Francisco en el Vaticano.