"Las brasileñas abrieron el camino en el bodyboard, pero el mundo lo continuó"
A los siete años de edad, la rider Neymara Carvalho (campeona mundial de bodyboard en cinco oportunidades), ya había decidido que sería una referente dentro de este deporte.
Oriunda de Espírito Santo, Brasil, creció viendo a sus referentes como Mariana Nogueira desarrollar y obtener logros dentro de esta disciplina, así como el "boom" de las brasileñas durante la década de los 80; la misma que ella empezaría a realizar, ya de manera profesional con apenas con 16 años.
Durante sus más de dos décadas de carrera, Neymara (42) ha conquistado los certámenes más importantes como Hawaii, Portugal, Australia, Brasil, Japón y Europa, por nombrar algunos, incluso, mientras tenía cinco meses de embarazo.
Hoy, y aún vigente en este deporte, sigue ligada estrechamente con el mar. Hace 16 años formó una escuela en Brasil para rescatar a niños y niñas de la realidad de las 'favelas'. Con su escuela (que lleva el mismo nombre), pretende dar una opción de vida a estos niños, para que como ella, puedan conocer los beneficios del deporte.
¿Qué la motivó a seguir una carrera profesional dentro del bodyboard?
-En aquella época (década de los 80), hubo un "boom" de este deporte en Brasil. De hecho casi todas las campeonas de aquel entonces eran brasileñas.
Entonces yo miraba sus carreras y quería seguirlas. Después quería ser como ellas, llegar a donde habían llegado y después quería poder vencerlas. Así es como pensaba ya a los siete años de edad, por eso tomé la determinación.
¿Alguna exponente que recuerde y que la haya motivado a desarrollarse en este deporte?
-Mariana Nogueira. Fue campeona mundial mucho tiempo. Después, cuando comencé a correr, disputamos títulos varias veces, eso fue muy bueno, pues me ayudó a seguir creciendo, a seguir desarrollándome. El poder competir con alguien a quien admiraba mucho, fue algo fantástico.
¿Cómo afrontó su rápido reconocimiento siendo tan joven?
-Yo no estaba preparada para un crecimiento tan rápido, ni sicológicamente, ni mentalmente. Con esta proyección vinieron muchas cosas, todo pasó muy rápido, llegaron muchos sponsors, patrocinios y viajes. Después, ya con 18 años, fui a Japón, Francia, hice un circuito por Europa, Portugal, etc., cosa que me impactó mucho ya que yo venía de una familia muy humilde, muy simple, con casa de madera, muy muy simple.
¿Cuáles son los títulos más importantes o los que recuerda con más cariño?
-Los primeros títulos (2003 y 2004), fueron importantes. Eran los primeros. Era un reconocimiento a mi perseverancia. Pero los más significantes, llegaron después de que me embaracé (2007, 2008 y 2009), esto porque me costó mucho, ya siendo mamá, decidirme a seguir con mi carrera. Todas las mujeres a las que admiré, habían terminado sus carreras para ser madres, y no tenía ningún ejemplo de que alguien pudiese seguir desarrollándose en el bodyboard, ya con familia.
¿Fueron años difíciles, de ver poco a la familia?
-Fueron difíciles, claro, pero afortunadamente siempre conté con el apoyo de mi madre y mi marido. Mi hija Luna estuvo conmigo en todo momento.
¿Cómo ha visto la evolución que ha tenido este deporte en el mundo?
-Bastante bien, ahora tenemos muchos y muchas exponentes. En los 80, básicamente eran las brasileñas quienes siempre resultaban campeonas mundiales, uno podía entenderlo así, hoy eso ya no existe, ya no se sabe quién puede ser el próximo campeón, porque este deporte se ha esparcido y ha evolucionado en todas partes: Japón, Australia, Portugal. Su expansión ha sido increíble.
"Yo miraba sus carreras y quería seguirlas; después quise ser como ellas, llegar a donde habían llegado, y después quise vencerlas"."
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