Planteles científico-humanista suben de 33 a 59 en doce años
EDUCACIÓN. Informe de la Comisión Nacional de Productividad además indica que los liceos técnicos bajaron, dato no compartido por la Seremi del ramo.
La cantidad de liceos científico-humanista se incrementó en la Región de Antofagasta entre 2004 y 2016. Así informó la Comisión Nacional de Productividad, entidad que también reportó una disminución de 17% en los liceos técnico-profesionales, dato que fue cuestionado por la Seremi de Educación.
Según el informe, el número de colegios científico-humanista (CH) aumentó de 33 a 59 durante el periodo. Por el contrario, los técnico-profesionales (TP) bajaron de 23 a 19 durante el mismo intervalo.
El economista de la Comisión Nacional del Productividad, Francisco Carrillo, explicó que el fenómeno se relaciona con ciertos "prejuicios" que existen sobre los liceos TP.
"Las familias que deciden seguir un camino científico-humanista piensan en la continuidad de estudios. El técnico-profesional carga con el estigma de ser una educación de baja calidad, lo cual no necesariamente es cierto", afirmó.
Discrepancias
El estudio de la comisión asegura que el 79% de los liceos técnicos son municipales, mientras que el 21% restante serían particulares subvencionados. No obstante, aquello no coincide con las cifras que posee la Seremi de Educación.
En la cartera coinciden en que hubo un aumento en la cantidad de establecimientos CH respecto a los TP, pero aseguran que la comisión no habría considerado algunos liceos. Es decir, en total serían 21 y no 19 los TP en la región: siete en Antofagasta, cuatro en Calama y los demás en Tocopilla, Taltal, Mejillones y San Pedro de Atacama.
Según el jefe del Departamento Provincial de Educación Antofagasta-Tocopilla, Luis González Egaña, el aumento ocurrió porque algunos institutos cambiaron de modalidad. Esto, gracias a una planificación académica de la Seremi que buscaba evitar la saturación del mercado con ciertas carreras.
En sus palabras, "en el área Administración teníamos centros de formación e instituciones superiores que la dictaban. Ocurría lo mismo con Contabilidad. Por tanto, el mundo laboral estaba saturado".
Ese habría sido el caso del Liceo de Hombres y el Liceo Marta Narea (exLiceo de Niñas), planteles polivalentes que dejaron de dictar especialidades.
Por otra parte, González explicó que el Liceo Landcaster (particular subvencionado) dejó de impartir carreras técnicas por iniciativa propia.
Tendencia
El mismo estudio revela que la mayor parte de los estudiantes de liceos técnico-profesionales se matriculan en el sector Administración y Comercio (31%) y Metal Mecánico (26%).
Ante esto, Francisco Carrillo advirtió la necesidad de proyectar las carreras en el tiempo, pues administración y comercio son rubros que progresivamente tienden a la automatización de sus servicios.
"Cuando un rubro tiene auge, y pasó con la minería, se crean muchas carreras relacionadas con esa oferta laboral. Pero después bajan esa oportunidad y los estudiantes se quedan con un sector que no le reporta mucho", afirmó.
En la misma línea, el sector minero sólo incluye 550 alumnos (9% de la región) y 4.660 estudiantes a nivel nacional.
Al respecto, el rector de la Universidad Santo Tomás, Exequiel Ramírez, afirmó que esto corresponde a uno de los desafíos del actual sistema.
"La tecnología cambia con mucha rapidez y eso nos obliga a estar actualizado en los laboratorios. Esos tienen que ser necesariamente conectados entre el mundo productivo y el mundo educacional", concluyó la autoridad.