Ancla de Oro para LNA
El Liceo de Niñas de Antofagasta, LNA, durante un tiempo A-17 y hoy Liceo Marta Narea, ha obtenido el Ancla de Oro 2017. Esto nos llena de orgullo a todas las generaciones, desde su fundación el 17 de julio de 1905. Nosotros los liceanos sabemos que éste es un reconocimiento a tan larga y fructífera trayectoria. Por sus aulas han pasado distinguidos maestros, como Gabriela Mistral, Andrés Sabella, Pedro de la Barra, Mario Baeza Marambio. Pero, ¿sabrá la comunidad antofagastina el verdadero valor de este galardón?
Muy pocas personas recordarán que el Liceo de Niñas de Antofagasta es la cuna de las Universidades locales. En la década del 60, en la oficina de la distinguida educadora y directora del establecimiento, Sra. Nora Vera de Ramos, se incubó y tomó cuerpo la idea de los Institutos Universitarios para Antofagasta. La visionaria idea de la Sra. Nora encontró amplia acogida en Andrés Sabella, Ruperto Tapia Caballero, Erwin Ramos y otros notables educadores.
El LNA tenía un sistema de Educación Renovado. Sólo 7 establecimientos de Chile lo tenían. La malla curricular era absolutamente revolucionaria. Una educación completa y excelsa, donde, además de las asignaturas habituales, teníamos clases de idioma francés e inglés; educación musical; academias de teatro, periodismo, literatura chilena, literatura hispanoamericana. Lo más desconocido es la enseñanza de Educación Cívica, no sólo en la teoría, sino en la práctica. Y, ¿cómo es esto? Teníamos un Gobierno Estudiantil que se elegía de la misma forma en que se elige al Presidente de la República. Había un programa de gobierno, registros electorales, cámaras secretas de votación, y todo aquello que existe en una votación en nuestro país. Así, salimos al mundo preparadas (era sólo Liceo femenino) no sólo en conocimientos intelectuales, sino también para enfrentar la vida ciudadana.
Es oportunidad de recordar que, entre los premiados con el Ancla, figuran Nora Vera de Ramos (1970), Andrés Sabella y Antonio Rendic (1953), ex funcionarios del Liceo.
¡SALUD, QUERIDO LICEO!
María Canihuante