Agencias
El Observatorio Europeo Austral (ESO) estima que a mediados del año que viene estará la primera piedra del telescopio E-ELT, llamado a convertirse en el mayor y más potente del mundo, ubicado en Cerro Armazones, al sur de Antofagasta.
Impulsar la construcción del Telescopio Europeo Extremadamente Grande (E-ELT) será el gran reto por delante para el investigador español Xavier Barcons, nombrado este mes nuevo director general del ESO y que asumirá su cargo en septiembre de 2017.
El E-ELT es el gran proyecto en el que está embarcado el Observatorio Europeo Austral, y hará honor a su nombre gracias a un espejo circular de 39 metros de diámetro construido con multitud de fragmentos hexagonales.
"Su dimensión es lo máximo que creemos que se puede hacer hoy en día", comentó en una entrevista Barcons, investigador del Instituto de Física de la Universidad de Cantabria (IFCA) y del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC).
Barcons asumirá la dirección del ESO en un momento clave para el E-ELT, en el que debe darse el empujón definitivo a esta gran infraestructura científica e impulsar su construcción en Chile, un emplazamiento especialmente apto por la calidad en la observación astronómica.
Carretera
Aunque ya construyeron la carretera y se ha aplanado la cima en la que se levantará el telescopio, y los principales contratos de construcción ya están otorgados, la primera piedra de la infraestructura en sí podría ponerse a mediados del año que viene, según Barcons.
El E-ELT se unirá a la nómina de infraestructuras del ESO, que tiene más -aunque de dimensiones muy inferiores- repartidos en varios puntos de Chile.
Todos esos instrumentos producen gran cantidad de datos y de resultados científicos que, una vez recabados, son propiedad durante un año de los investigadores que impulsan cada uno de los proyectos, y que después pasan a ser públicos.
"Cualquier investigador de cualquier lugar del mundo puede utilizar esos datos para hacer sus estudios e investigaciones, y lo cierto es que en la última década el número de resultados científicos que se obtienen por datos de archivo, los que ya están en el dominio público, ha ido creciendo mucho", subrayó Barcons.
Telescopio Extremadamente Grande
El Telescopio Europeo Extremadamente Grande (E-ELT por su nombre en inglés, European Extremely Large Telescope) es un telescopio terrestre de grandes dimensiones, con un diámetro de 39 metros. Es la propuesta del Observatorio Europeo del Sur para la nueva generación de telescopios ópticos. El Observatorio Europeo del Sur (ESO) se ha centrado en este nuevo diseño, más pequeño de lo previsto, después de que un estudio de viabilidad del anterior proyecto, un telescopio de 100 metros de diámetro conocido como Overwhelmingly Large Telescope, concluyera en que costaría alrededor de 1.500 millones de euros y sería demasiado complejo de contruir. Está prevista su terminación en 2022.