"El final del Apertura para el CDA"
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deportivo
Lo difícil lo hizo fácil el CDA. Mantuvo su esquema habitual, pero esta vez se eligió con justeza a quienes debían asumir los roles determinados en un 3-5-2 flexible, siendo equilibrados en el ida y vuelta, sin que fueran determinantes las ausencias.
El "comodín olvidado", Cristian Rojas, cumplió cabalmente el desafío de ser el líbero, pesando incluso en el juego ofensivo, cuando fue a las pelotas detenidas. Y no fue menos Ronald González, eficiente escudero de Villagra, en los momentos que debió ayudar a contener, y ser contundente en la llegada por el sector izquierdo. Falta, sin duda, "aquel técnico" que aproveché sus virtudes, en el ida y vuelta, más el permanente contacto con el balón.
Otro elemento resaltante fue Angelo Araos, con permanente presencia por ser sub 20. Esta vez fue a la zona de volantes y ahí creció. Necesita ser participe del "armado" y lo demostró en el Sausalito.
El CDA, aprovechando algunas facilidades del "desdibujado" Everton, pero no rival de poca calidad en su casa, hizo lo suyo a un tranco preciso, sin dejar espacios que durante varias fechas lo llevaron a perder el "equilibrio" de un juego asociado que debería ser permanente en el tiempo.
Los tres puntos en el Sausalito permiten, sin duda, mirar con mayor tranquilidad lo que viene en el Clausura del 2017. No es lo mismo terminar noveno con 19 puntos, a cinco del último, con un promedio escuálido en la parte baja de la tabla de ubicaciones, que partir con certezas de ascender rápidamente en la próxima competencia.
Es tarea de Vergara visualizar los hombres adecuado para estructurar el conjunto. La lección que deja la pasada por Viña del Mar es clara. Hay posiciones que tienen nombre y apellido. No es necesario "experimentar" más allá de lo lógico y conocido.
Lo vivido en la "ciudad jardín" reafirma la idea que existe un plantel interesante. Se demostró en noventa minutos. Hubo un funcionamiento con movimientos certeros, recorridos lógicos y acciones precisas para hacer daño.
René
Cortés