Informe alerta de condiciones "inhumanas" en las cárceles
ANÁLISIS. El reporte constató que los presos viven hacinados, en infraestructura deficiente y con malas condiciones higiénicas.
Un informe realizado en diciembre pasado por la comisión de visita semestral de cárceles de la Corte de Apelaciones de Santiago, constató que los presos de 13 recintos penitenciarios de la capital viven en condiciones "inhumanas".
En diciembre la comisión, que es presidida por la ministra Romy Rutherford, visitó 13 cárceles y en su reporte alertó sobre las malas condiciones en que viven los presos.
El informe estableció, por ejemplo, que el Centro de Detención Preventiva Santiago Sur (exPenitenciaría) presenta "insuficiencias, destrucción y falta de higiene evidentes, así como rotura de cañerías que mantienen un pérdida constante de aguas corriendo en los pisos". Asimismo, advierte que en ese recinto "persisten las instalaciones eléctricas irregulares, que constituyen una amenaza permanente, no sólo de electrocución de algunos internos, sino que también como agentes potencialmente generadores de incendios".
En el caso del Centro de Detención Preventiva Santiago, criticó a la empresa concesionaria a cargo y recomendó "analizar" si los incumplimientos justifican terminar el contrato "atendida las graves falencias constatadas".
El informe califica como "atentados a la dignidad humana" las deficiencias en la alimentación y las condiciones higiénicas en que viven los reos. El reporte establece que los presos reciben su última comida a las 17.00 y que luego no les dan alimentos hasta las 9.00.
La comisión denunció que los internos reciben las bandejas de comida sin cubiertos, por lo que se ven obligados a comer con la mano. "La situación, según se aprecia, no sólo tiene evidentes ribetes de tipo sanitario, sino que tal vez los más grave, es que atentan en contra de una cuestión elemental de dignidad humana", señala el documento.
Una situación aún por se vive en el Centro de Cumplimiento Penitenciario Colina I , donde los internos reciben su última comida diaria a las 15.30.
La comisión también alertó por las malas condiciones que deben vivir los funcionarios de Gendarmería, que permanecen en un "lugar estrecho y hacinado, con filtraciones de agua desde el baño hacia un dormitorio".
El presidente de la Asociación Nacional de Suboficiales de Gendarmería, Joe González, criticó que "el hermano pobre siempre es Gendarmería y créanme que he visto de todo: Basura, hacinamiento de la población penal, chalecos antibalas que estaban amarrados con alambre".