"Mi mayor orgullo: ser la matriarca de la Dinastía Beisbolera de Chile"
Dicen que detrás de todo buen hombre debe haber una gran mujer, creencia que en muchos casos es una tremenda realidad.
Conocemos uno en que, producto de esa comprensión de parte de ella, ha hecho que no sólo su esposo sea ganador, también cada uno de sus hijos. Y son varios.
Nos referimos a la jefa de hogar Sonia Marín, quizás, para mucha gente, una desconocida. Pero, si le agregamos el apellido de su esposo, todos dirán: "¡Ah, era ella!".
Sí, porque se trata de "La Matriarca Sonia", la que vive y muere con lo suyos en torno al béisbol, el deporte que le apasiona desde que conoció a Ian Sommerville Clift, el jonroneros más grande que ha tenido la disciplina en el país.
Su abnegación por seguirlo ha hecho que sus regalones James y Ian Jr. sean tan buenos como él. Los tres fueron reconocidos por el Círculo de Periodistas Deportivos como Los Mejores de Chile.
Beisbolera total
¿Es cierto, Sonia, que es presidenta del Club Bronkos?
-Sí, mientras Ian lo es de la Asociación de Antofagasta.
¿Por qué le denominaron así?
-Era el nombre de un caballo fina sangre, que era un velocista increíble, y en el béisbol hay que ser muy rápidos para ganar como nosotros.
¿Cómo anda el club?
-Luciéndose como siempre, viajando repetidamente. Es que aparte de entrenar y enseñar lo que sabemos en béisbol, también en disciplina, respeto a los padres, seguimos sus notas y hasta hacemos de sicólogos. Gracias a Dios tenemos de los niños el respeto que nos hemos ganado.
¿Qué es para usted compartir su vida con un beisbolista como Ian Sommerville Clift?
-Buena, pero he tenido que adaptarme porque hay muchos viajes. Pero, es muy bonito, porque después comencé a vivirlo con mis hijos, que han ido a Ecuador y Nicaragua.
¿Es verdad que con la selección infantil fue como jefa de delegación a Salta, Argentina?
-Claro. Lo que pasa que en esto del béisbol trabajamos en familia.
¿Qué siente cuando debe desplazarse tanto y tan lejos?
-Es una experiencia maravillosa, además que cada vivencia, cada anécdota luego es conversada en la casa. Hay que agregar que se hacen muchas amistades.
La matriarca
¿Es cierto que es "La Matriarca de la Dinastía Sommerville"?
-Por supuesto, y mando en la casa y en la cancha.
Sonia, ustedes tienen cuatro hijos, ¿todos beisbolistas?
-Por ahí va la cosa: James, el mayor, Ian, Itan y Hellen. Ella entrena todos los sábados con nosotros. Tiene ocho años, es más alzada, más regalona.
¿Qué le parece que las niñas jueguen con los muchachos?
-Bien, porque cuando me integré a la familia Sommerville fue una regla aprender a jugar softbol.
Vicecampeona
¿Y usted juega?
-Ya no, pero lo hice. De hecho, con la selección de Antofagasta, el 94 fui vicecampeona de Chile, en San Antonio, y fue Ian nuestro entrenador.
¿Cuánto tiempo casados?
-En marzo cumpliremos 27 años, lo cual ha sido maravilloso. Ian es un gran hombre, igual que mis hijos.