Al transitar por las calles y avenidas es fácil observar los restos de polvo en calles y veredas producto del lodo, lo que ya está provocando molestias entre los antofagastinos, sobre todo en niños y la tercera edad.
Los stocks de mascarillas están agotados en las farmacias del sector céntrico, que sumado a los malos olores, alergias y calor en estos días, son factores de preocupación que urge una rápida respuesta de las autoridades.
Para Maribel Moscoso, quien es aseadora para una empresa externa en el consultorio centro-sur, esta situación comenzó a las pocas horas de producida las lluvias del 25 de marzo y que todos estos días ha sacado gran cantidad de tierra en la entrada del centro de salud.
'Hay bastante polvo. Es más, aún no termino de limpiar el interior porque la gente entra y sale con sus zapatillas o zapatos con tierra y cuando uno empieza a barrer adentro se levanta la polvareda', comentó.
Moscoso agregó que el fuerte olor que dejó el agua y alud es molesto para los usuarios. 'Es como un olor a humedad, uno se lava las manos y queda igual con tierra más aún que trabajo todo el día en esto', agregó.
'ENCERRADOS'
Noemi López vive por la avenida Irarrázaval (sector norte) y aseguró que tiene que rocear con cloro su casa y también el patio para poder respirar mejor, ya que los olores proveniente de los desechos del barro son molestos.
'El olor es insoportable día y noche que llega a doler el estómago. Es terrible. No podemos abrir las ventanas a pesar del calor y me preocupan los niños, ya que vivo con tres nietos y una bisnieta'.
En tanto, Ernesto Díaz no puede salir con su hijo de un año y dos meses a pasear por el sector de la Torre Pérez Zujovic o la costanera por el material en suspensión.
'Hay mucho barro todavía, polvo en suspensión que es peligroso para los niños. Es riesgoso pasear con mi hijo y por ello tenemos que pasar más tiempo en el hogar', aseguró.
John Díaz vive en la población O'Higgins, cerca de la quebrada Farellones, uno de los sectores donde bajó bastante agua y tierra, justamente en las calles Aysén y Puerto Natales.
Agregó que 'la lluvia causó justamente problemas en la salud de las personas, especialmente alérgicas. Con los vecinos nos hemos coordinado y entre todos tenemos que barrer y limpiar bastante las calles para sacar la polución', acotó.
limpieza
Ante esta situación, el intendente Valentín Volta informó que hay recursos disponibles por el gobierno para estas tareas, tanto en Antofagasta como Taltal, por más de $900 millones otorgados por la Subsecretaría de Desarrollo Regional (Subdere).
El jefe regional explicó que 'estos dineros deben ser ejecutados por los municipios de ambas comunas para estas nuevas faenas que es el retiro de los últimos escombros y la limpieza de calles'.
En este sentido, la capital regional cuenta con $350 millones mientras que Taltal, la más afectada por el aluvión, más de $600 millones.
Esta limpieza, precisó Volta, consiste en un sistema de cloración (cloro) en las calles afectadas por el temporal y que ya está aplicando el municipio del vecino puerto.
Agregó que en el caso de Antofagasta 'si hubiera dificultades por parte del municipio para esta tarea, nosotros (Gobierno Regional) asumiríamos la labor al igual que en la primera etapa'.
Maribel
Noemi
Ernesto
John
