"Hay un grado de irresponsabilidad bastante importante en la designación de seremis en esta región".
Catalina Pérez — Diputada RD
"Ciudad que visito, los vecinos se quejan por el mal diseño de las ciclovías".
Cristián Monckeberg
Ministro de Vivienda
En un artículo publicado por los diarios de Madrid, el marqués de Dos Fuentes se ocupa de la sencillez de los democráticos procedimientos de los políticos de Chile. "Cuando llegan al poder -expresa- no adquieren automóviles ni lacayos y se codean con todo el mundo. El fetichismo del político Castro es ignorado".
Gamal Abdel Nasser, presidente de la República Árabe Unida, dijo anoche que una guerra entre árabes e israelíes parece inevitable. Sean cuales sean las resoluciones de Naciones Unidas, "la contienda ocurrirá inevitablemente, querámosla o no", declaró Nasser, ante miles de soldados concentrados en una base blindada.
Albert Hofmann, el químico suizo que descubrió el alucinógeno LSD, falleció en su domicilio de Burg (cantón de Basilea) donde se encontraba con dos enfermeros, según informó la Asociación Multidisciplinar para estudios Psicodélicos en su web. Hofmann colaboraba, con la investigación para el uso médico de ciertas drogas.
A las puertas de la celebración del Día Internacional del Trabajo, queda cierta duda que ninguno de nosotros, ni autoridades, líderes, ni los trabajadores, estamos al tanto del impacto que se viene sobre esta área de la sociedad.
Y el responsable es uno solo: La tecnología, la robotización, la inteligencia artificial, desarrollos que cambiarán para siempre lo que conocemos y la forma en que nos manejamos. De hecho, tales asuntos, no son predicciones, ni cuentos de ciencia ficción, son realidades bien concretas y a la mano.
Un computador elimina el trabajo de cientos de personas, o lo hace más eficiente; un robot puede terminar con los choferes, puede procesar textos, analizar datos, entre otros.
La pregunta necesaria es: ¿Se trata solo de una cuestión económica o es también un asunto de decisión política? ¿Hasta dónde puede avanzarse? ¿Es posible detenerse en estos desarrollos sabiendo que otro lo hará?
Es inquietante, en este escenario, que los gremios de trabajadores no dediquen un minuto para pensar en esto y, en general, sigan levantando banderas con demandas del siglo pasado. Existiendo dificultades por superar, poco estamos advirtiendo la ola de cambios que trae consigo la tecnología.
Los temas de hoy no son los mismos de hace algunas décadas; las demandas no pueden ser las mismas porque las amenazas son otras. Son miles, quizás millones, de puestos de trabajo los que están en riesgo por un software, o una aplicación que hará más eficientes los procesos, pero que tendrá efectos mayúsculos en la sociedad.
Peor aún con la clase política que debiera tomar algunas definiciones. El asunto es que se entiende que se trata de un problema definitivamente muy complejo, porque, por un lado están las opciones que abre la tecnología y, por otra, las opciones que cerrará a muchos humanos que no se adaptarán al cambio, o ni siquiera tendrán esa opción.
La educación, más que nunca, la adaptabilidad al cambio son urgencias para todas las personas, para los trabajadores.
El 19 de abril, en el Salón de Honor del exCongreso Nacional de Santiago, se lanzó la nueva etapa del Centro de Excelencia Fondap-Conicyt Serc Chile (2018-2022), que reúne a las universidades de Tarapacá, Antofagasta, Técnica Federico Santa María, Chile, Adolfo Ibáñez, Católica de Chile, Concepción y Fraunhofer Chile, instituciones que tienen en sus manos convertir a Chile, y en especial a nuestro norte, en un polo mundial en investigación, desarrollo y aplicación de energía solar.
Un desafío que nos demanda las nuevas generaciones es la utilización de fuentes de energía autóctonas y amigables con el medio ambiente, es un reto conjunto desde la ciencia, las políticas públicas, el sector privado y la ciudadanía, y Serc Chile cumple un rol importante.
En su primera etapa (2013-2017) sus más de 80 investigadores sumaron 230 publicaciones científicas y 7 patentes. Serc Chile lideró la adjudicación de fondos Corfo para AtaMoS-TeC, un consorcio público-privado que cuenta con el apoyo de 19 empresas nacionales y extranjeras, esta iniciativa, que tiene como beneficiaria a la Universidad de Antofagasta, busca diseñar, probar y construir un módulo fotovoltaico de acuerdo a las condiciones propias del Desierto de Atacama (alta radiación y clima desértico), que permita aumentar la eficiencia de las plantas fotovoltaicas que actualmente suman más de 2.000 MW en operación. Otra iniciativa de SERC Chile, que cuenta con el apoyo de la Fundación BHP Billiton, es Ayllu Solar, proyecto que busca desarrollar aplicaciones a escala humana en actividades productivas propias de las comunidades, con un componente importante en la formación de capital humano en la región de Arica y Parinacota.
Lo anterior suma una inversión pública-privada de más de 18.600 millones de pesos, que han sido confiado a la capacidad de Serc Chile de trabajar con los más selectos investigadores nacionales y con una red de apoyo internacional, que ha privilegiado un trabajo asociativo por sobre el individual, dando un ejemplo de que cuando existe voluntad es factible lograr resultados. Esto nos permite soñar con que Chile, en un mediano plazo (2030) pueda convertirse en el gran generador de energía renovable para Latinoamérica, potenciando las interconexiones Argentina-Brasil y Perú-Ecuador-Colombia, aplicaciones en una minería de baja emisión de carbono y la masificación en el uso de la energía solar en nuestros hogares.
Carlos Arenas Coronil
Investigador Serc Chile