¿Cómo aprovechar el nuevo boom de inversiones que se espera en la región?
ECONOMÍA. Plataforma de la Sofofa arrojó que Antofagasta lidera creación de puestos de trabajo de concretarse proyectos, con 38.500 entre construcción y operación.
Antofagasta concentrará un importante número de proyectos en los próximos años en áreas como la minería y energía, lo que la posiciona como la región líder en materia de generación de empleos. Esto, de acuerdo a información publicada por la Sofofa, la cual mediante la creación de la plataforma Prisma analizaron más de 27 millones de páginas del Servicio de Evaluación Ambiental (SEA), concluyendo que más de 178 mil puestos de trabajo a nivel nacional podrían crearse si se aprobaran los proyectos que actualmente están en tramitación, lo que significa el 21% de los desocupados del país.
La plataforma, según consignó El Mercurio, revisó 25.193 proyectos desde 1992, que consideran los aprobados, desistidos, en calificación, no calificado, rechazados y revocados.
En tanto, hoy existen 505 proyectos en tramitación, en distintas etapas del proceso, significando una inversión de US$ 96.455 millones para generar los puestos mencionados. Por su parte, de los 178.096 potenciales trabajos que se crearían, 123.437 serían en la construcción y 54.659 en operación.
En este contexto, la Región de Antofagasta lidera a nivel nacional la posibilidad de crear puestos de trabajo de aprobarse estos proyectos. De acuerdo a Prisma, existen 28.652 puestos en espera para la etapa de construcción y 9.851 en operación. Seguida de la Metropolitana con 21.364 para construcción y 12.621 para operación, mientras que en tercer lugar y bastante más lejos se ubica Atacama con 14.987 en construcción y 8.005 en operación.
Una cifra importante que abre el debate respecto a cómo la región debiera aprovechar este nuevo boom de inversiones que se avecina, de tal forma que se traduzca en un desarrollo y mejora en la calidad de vida para la zona.
Trabajo combinado
El presidente de la Cámara de Comercio de Antofagasta, Antonio Sánchez, observa que se trata de algo complejo, ya que no son procesos rápidos y son aspectos que se deben ir abordando con tiempo y planificación. En este sentido, recuerda que, cuando partió Minera Escondida en la década de 1990, en Antofagasta se construyeron poblaciones para los trabajadores en distintos sectores de la ciudad, lo que se tradujo en la llegada de miles de personas, considerando a los trabajadores y sus familias, lo que significó dinamizar la economía durante la década de 1990 y principios de los 2000, y activar el desarrollo de otros sectores, principalmente el comercio, ya que llegaron las cadenas nacionales y se construyó el mall.
"Tiene que haber un trabajo combinado entre las autoridades públicas y el sector empresarial. Y creo que una de las formas como efectivamente se lograría un éxito no es tan solo exigiéndole a las compañías mineras que contraten directamente trabajadores en nuestra región, porque no los hay (…). Por lo tanto, lo que se tiene que conseguir es que vengan trabajadores a vivir a nuestra región, y eso tiene que ser principalmente a través de empresas prestadoras de servicios a la minería. Esa gente sí va a traer trabajadores a nuestra región a vivir. No van a ser trabajadores tanto por turnos, sino que lograrían que se instalen en nuestra región ", indica.
El vicerrector de la Universidad del Alba Antofagasta y exintendente, Valentín Volta, cree que si se produce este boom como el que se dio hace unas décadas atrás, lo primero que se tiene que asegurar es que, tanto los trabajadores como los ejecutivos y las empresas de la región, hagan el máximo esfuerzo para proveerlo.
"Y eso parte por una política corporativa de las grandes empresas para que alineen con las necesidades que tiene la región, de poder generar ese capital humano y esas pequeñas y medianas empresas que le provean a esta industria. Creo que tenemos que ir dejando de lado tener las nóminas de trabajadores de todos los lados del país con muy poca mano de obra de trabajadores de la región, así como también dejar de lado las nóminas de empresas que proveen que la gran mayoría no son de la región sino que de otra parte", explica.
Además, cree que el compromiso que debiera asumir la comunidad, partiendo por las universidades, institutos profesionales, liceos técnicos con la industria, ejecutivo y gobierno en la región y municipalidades, es poder empezar a trabajar en el levantamiento de la mano de obra tanto profesional como técnica.
El arquitecto Emile Ugarte, en tanto, argumenta que los primero que se debe realizar es mejorar la ciudad, para que la gente que viene a trabajar se radique aquí para lo cual debe existir una buena oferta de viviendas.
"Antofagasta tiene una oferta muy mala de viviendas. La gran parte de la oferta de viviendas actualmente es al lado de un vertedero, que genera contaminación y varios años generará contaminación aunque se detengan los incendios intencionales. Hoy la única forma es hacer regiones urbanas, incorporar viviendas en el centro donde está el mejor equipamiento, hacer más playas artificiales. Hacer una ciudad mucho más entretenida y con calidad de vida, incentivar que la gente viva acá sino vamos a mantener los conmutados", fundamenta.
En este sentido, destaca iniciativas como sacar el barrio industrial y cambiar la institucionalidad del borde costero.
"Se tiene que conseguir que vengan trabajadores a vivir a nuestra región, y eso tiene que ser principalmente de empresas de servicios a la minería".
Antonio Sánchez, Presidente Cámara de Comercio de Antofagasta
"Parte por una política corporativa de las grandes empresas para que se alineen con las necesidades que tiene la región de generar capital humano".
Valentín Volta, Vicerrector U. del Alba, de Antofagasta
"La única forma es hacer regiones urbanas, incorporar viviendas en el centro donde está el mejor equipamiento, hacer más playas artificiales".
Emile Ugarte, Arquitecto