Correo
Amor de ministros
La guinda de la torta. El país con graves problemas de Seguridad, economía, salud, educación, etc., y los lindos de amantes.
Marcos Rojas
Conciencia sobre el ruido
En grandes ciudades, la exposición a ruidos no laborales (ambientales, como ruido de tránsito, etc.), de manera reiterativa en nuestro día a día, puede llegar a dañar estructuras sensibles del oído y afectar de manera permanente nuestra audición. Además, la exposición a sonidos ambientales molestos puede generar trastornos emocionales y físicos (mal humor, jaquecas, irritación, falta de concentración y atención, etc.) que afectan, en ocasiones, el funcionamiento diario de una persona en sus actividades cotidianas.
Recientemente se conmemoró el Día de la Conciencia sobre el Ruido, campaña busca promover la conciencia sobre este problema y animar a la población a tomar pequeñas acciones para prevenir los efectos dañinos en sus lugares de trabajo, vivienda y estudio.
Los desafíos a futuro son educar a la población sobre los problemas en la salud en general que trae la exposición constante al ruido y, además, favorecer conductas y hábitos que aporten a reducir los niveles a los que nos exponemos a diario.
Cristian Poblete Venturini
Emprendimiento senior
En Chile emprender no es una excepción, es la norma. Según las cifras, 1 de cada 4 adultos está involucrado en un emprendimiento de etapa inicial. Somos, según el último reporte del Global Entrepreneurship Monitor (GEM), uno de los países con mayor actividad emprendedora temprana del mundo, entonces ¿Qué está pasando con estos emprendimientos?
Podríamos sentirnos orgullosos, pero el cuadro no es tan alentador: muchos de los emprendimientos, especialmente los que son liderados por personas +50, existen por una necesidad, nacen porque el empleo formal escasea, nacen porque reinsertarse en el mundo del trabajo después de los 50 sigue siendo una carrera cuesta arriba. Nacen como solución de corto plazo, no como una apuesta de futuro, con una poca probabilidad de escalar y generar puestos de trabajo y/o crecimiento.
En paralelo, el país vive una transformación silenciosa, la del envejecimiento poblacional: por cada 100 personas menores de 15 años hay 79 personas mayores, según el último Censo 2024. Sí, Chile está envejeciendo, y lo hace mientras se reinventa desde el emprendimiento, ¿qué pasaría si unimos ambos fenómenos?
Hoy, cuando discutimos sobre el futuro del país, deberíamos hablar más del talento que se está perdiendo por no saber conectar a las personas con más experiencia con las herramientas adecuadas para emprender. De las regiones donde el emprendimiento surge por falta de alternativas, y no por diseño. De las mujeres que emprenden desde la necesidad, y no desde la elección. De cómo podríamos construir un ecosistema donde emprender no sea un salvavidas, sino un trampolín.
Invertir en el emprendimiento no es solo apoyar a quienes tienen una idea. Es apostar por una economía más diversa, más resiliente, más humana. Es reconocer una búsqueda de oportunidades. La pregunta, entonces, no es si necesitamos más emprendedores. Los tenemos. La pregunta es si, como país, queremos que esos emprendimientos se transformen en empresas que crezcan, generen valor y construyan un futuro compartido. O si seguiremos celebrando las cifras sin mirar lo que realmente significan.
Carlos Román
Deberes constitucionales
La Constitución de Chile asegura a todas las personas el derecho a la vida, la igualdad ante la ley, la libertad de trabajo, el derecho de propiedad, a la educación y a la salud, entre otras cosas. Con toda la información existente, es evidente que el Estado y el jefe de Estado no están cumpliendo con sus deberes constitucionales.
En estos días ello se acentúa con el desafío al Estado chileno de terroristas de Temucuicui y funerales de extremo riesgo de narcotraficantes que hacen lo que quieren.
El Estado y el jefe de Estado saben quiénes son, dónde actúan, dónde viven, pero no los detienen y los políticos nada reclaman. Algo muy raro está pasando en Chile.
Jorge Porter Taschkewitz
Madres cuidadoras
Este Día de la Madre queremos reconocer a las madres cuidadoras: mujeres que se convierten en el sostén emocional y físico de sus hijos durante tratamientos tan duros como el cáncer.
En Chile, más del 90% de quienes cuidan a un niño enfermo de cáncer son madres. Muchas dejan sus trabajos, su hogar o a otros hijos para estar 24/7 al lado de quien más las necesita.
Pero ese esfuerzo tiene un costo: de acuerdo a un reciente estudio del Ministerio de la Mujer y Equidad de Género, 7 de cada 10 de ellas (70,8%) presentan síntomas de angustia, ansiedad o depresión. Aún falta que su salud mental sea prioridad y que existan programas reales de apoyo; la salud de sus hijos también depende de la de ellas.
Estas madres no sólo cuidan. También aprenden, contienen, acompañan y resisten. Por eso, este día no basta con saludarlas. Hay que cuidarlas, escucharlas y no dejarlas solas.
Marcela Zubieta