"Lo que estamos pidiendo son cuatro años para poder cumplir con ese desafío"
Iván Mlynarz, vicepresidente ejecutivo de Enami, destaca los buenos números que tuvo la empresa en 2024. "Estamos teniendo US$6 millones de utilidades. Son chiquititas, pero sin ninguna duda es un cambio bien importante", dice en esta entrevista, en donde aborda los desafíos próximos para la empresa minera.
En su visita a Antofagasta, Mlynarz cuenta que "estamos poniendo al día la situación general de la Enami. Es importante para las autoridades de la región comprender cuáles son los desafíos que tenemos acá en la región, en particular lo que son los desafíos nuestra planta en Taltal, que estamos en una tramitación de una DIA, una Declaración de Impacto Ambiental, y hemos entregado nuestra última adenda hace algunos días. Esperamos tener contacto a comienzos de enero con una resolución favorable para seguir operando en Taltal y seguir de alguna manera cumpliendo con los pequeños productores de esa ciudad".
El vicepresidente detalla que "estamos pidiendo una prórroga de ese funcionamiento durante cuatro años y ocho meses. Periodo en el cual nosotros vamos a implementar las instalaciones en Las Breas, que es la zona hacia el interior. Primero con un poder de compra, que nos va a permitir el traslado y tener esa condición, y luego poder habilitar una planta propia en esa zona. Pero para eso necesitamos este tiempo de seguir operando abajo en Taltal, y en cuatro años más estaríamos en condiciones de poder estar ya operando en la parte alta".
¿Cómo ve este trámite en el SEA?
- Como empresa estamos muy convencidos de que los estudios que hemos hecho son bien concluyentes, en términos de que no generamos impacto en el medio ambiente. Vienen respaldados por una buena cantidad de profesionales. Las consultas se han ido acotando en este proceso, y esperamos que la revisión que se va a realizar ahora sea exhaustiva, porque nos interesa que la comunidad esté confiada en que no estamos generando impacto en el medio ambiente. Estamos confiados en nuestros estudios.
¿Qué beneficio va a traer para la Enami el traslado hasta Las Breas?
- El beneficio fundamental va a ser poder cumplir un compromiso con la comunidad. Nosotros llevamos décadas funcionando en Taltal. La comunidad ha crecido. Las exigencias ambientales también, y poder operar en la parte alta nos va a permitir de alguna manera continuar con el desarrollo de la Enami en la pequeña minería en la zona, pero también descomprimir o entregarle mayor seguridad a la comunidad. Es una promesa que hemos hecho hace ya mucho tiempo y que no hemos cumplido. Lo que estamos pidiendo hoy día son unos añitos más acotados, muy definidos, cuatro años para poder cumplir con ese desafío, que es bueno para Enami pero también es bueno para toda la gente y toda la ciudad de Taltal.
Por otro lado también se destaca los $US27 millones extras que vienen por la ley de presupuesto 2025. ¿Cómo va a influenciar este dinero en las operaciones de Enami?
- Es bien importante el cambio. Pasamos de US$8 millones en el presupuesto de la nación a US$35 millones. Eso dividido en dos glosas. Una que es para el fomento a la pequeña minería. Pasamos de 23 años recibiendo solo US$8 millones a US$10 millones. Eso va directo en instrumentos de fomento, asistencia técnica a los pequeños productores, préstamos y otro tipo de instrumentos que permiten mejorar su funcionamiento. Y US$25 millones que es una capitalización del dueño del Estado chileno a la Enami para poder financiar diferentes proyectos. Yo les puedo dar el ejemplo. En el caso de Taltal y Tocopilla, el Gobierno Regional compra los nuevos chancadores en este convenio que hemos aprobado en 2024, pero que se tiene que implementar en 2025. Pero Enami tiene que instalarlos. Esa instalación no es gratis. Y esos US$25 millones que hoy día vienen en el presupuesto de la Nación nos permiten financiar una actividad que ya teníamos comprometida. Y así tenemos US$25 millones de diferentes inversiones que tiene que hacer la Enami en cada una de sus instalaciones para seguir operando en el país. Hoy día, a diferencia de lo que pasaba antes, al tener esos US$25 millones de capitalización nos permite tenerlo financiado y no tener que ir a buscar préstamos a la banca para financiar una empresa de esta envergadura.
Buenas cifras
Y a eso se suma también en que este año, a septiembre, Enami tuvo buenas cifras en cuanto a operaciones.
- Las buenas cifras se deben al trabajo que se ha realizado en el último tiempo. En el 2023 nosotros tuvimos US$200 millones de pérdidas. Nosotros hoy día estamos teniendo US$6 millones de utilidades. Son chiquititas, pero sin ninguna duda es un cambio bien importante. Y para el 2025 esperamos mantener esos indicadores. Esa es una empresa que está nivelada financieramente y que no se va a encontrar apremiada. Y eso nos permite garantizarle a los pequeños productores que vamos a seguir comprando sus minerales en nuestros poderes de compra, que vamos a poder seguir pagando de buena forma en esa. Pero además que lo vamos a poder hacer más rápido y una serie de cosas que son muy interesantes para mantener la cadena de pago de los pequeños productores del país.
Desafíos
¿Qué otros proyectos tienen en carpeta para seguir creciendo?
- Nosotros en Antofagasta este año también vamos a empezar a implementar en Tocopilla una planta fotovoltaica. Hoy día nosotros funcionamos en nuestra planta en Tocopilla con motores diésel. Vamos a avanzar en una planta fotovoltaica, donde vamos a reemplazar el diésel por energía solar. Una actividad bien importante que vamos a desarrollar aquí en la Región de Antofagasta. Y tenemos proyectos importantes de litio en la Estrategia Nacional del Litio. Enami tiene un proyecto que se llama Altoandino en la Región de Atacama. Durante el primer semestre del 2025 vamos a seleccionar nuestros socios para esta alianza público-privada. Tenemos cuatro empresas en la lista corta que vamos a tener que elegir entre BYD, que es la empresa que hoy día produce más autos eléctricos en el mundo; ERAMET, que es una empresa francesa que su especialidad en minería son los minerales críticos; Rio Tinto, que es la segunda minera más grande del mundo, y POSCO, que es la siderúrgica más grande de Corea del Sur. Entre esas cuatro empresas nosotros vamos a seleccionar nuestros socios y vamos a seguir desarrollando el proyecto.
¿Qué desafíos se vienen tanto para el Enami como para los pequeños y medianos productores en lo que viene a corto, mediano y largo plazo?
- Nosotros estamos muy deseosos de invitar al país a un desafío. El desafío es de qué manera la pequeña minería duplica su producción en el país. Eso se puede realizar rápidamente. Las trabas que tiene la pequeña minería no son las que tiene la gran minería. Los proyectos pueden duplicar sus producciones de manera rápida, dos o tres años. Lo que tenemos que ser capaces de identificar es cuáles son hoy día los cuellos de botella, lo que impide en este salto importante ponernos de acuerdo y poder avanzar. Hoy día el Enami está financieramente saneada y se puede poner en disposición para que junto a los pequeños productores, junto a las autoridades regionales y del país, tomar esta iniciativa de cómo duplicamos la producción en cuatro o cinco años, que nosotros creemos que es posible. Así que vamos a hacer esa invitación y esperemos que en los primeros meses del 2025 lleguemos a un buen acuerdo y nos pongamos todos, pequeños productores, Enami, autoridades políticas y regionales, a destrabar y darle un nuevo impulso a la pequeña minería del país.