Nueva concesión administrará el Aeropuerto por los próximos 26 años
CONECTIVIDAD. El proyecto será ejecutado por la empresa Sacyr-Cointer y buscará duplicar la capacidad de tráfico en el terminal aéreo de Antofagasta.
Fue el consorcio Sacyr-Cointer la entidad que se adjudicó la concesión del Aeropuerto Andrés Sabella. Se trata de una oferta que presentó la empresa de UF 4.300.000, la cual busca triplicar la superficie de los terminales aéreos de Antofagasta y Atacama, en los cuales se espera implementar nuevos puentes de embarque y un aumento en la cantidad de los estacionamientos.
Proyecto andrés sabella
Actualmente, el Aeropuerto Andrés Sabella cuenta con una superficie de 10.192 m2 la que se incrementará en 21.230 m2, totalizando 31.422 m2.
Con esta mejora se busca un crecimiento del 208%, debido a que dispondrá de cinco nuevos puentes de embarque, más los cuatro ya existentes, totalizarían nueve puertas de embarques. Asimismo, los totems de chequeo automático serán 10, aumentarán a cinco los puestos de control AVSEC, cuatro nuevos puestos de control PDI, tres nuevas cintas de retiro de equipaje y la creación de un puesto de control SAG/Aduana.
Usuarios
Por estudios, Javiera Salgado (31) debe tomar un avión con destino a Santiago cada dos semanas, la odontóloga comenta que es evidente que el aeropuerto necesita una ampliación y aboga a que, "por ser una zona minera, Antofagasta es la ciudad que recibe mucha gente durante la semana y en ocasiones se vuelve caótico, ciertos días no son agradables para viajar. Al poco espacio también se le suma la poca cantidad de baños que hay en la zona de espera porque considerando la gran cantidad de personas, a veces uno prefiere ir en el avión".
Una de las problemáticas principales que expresa es la falta de espacios cómodos para la espera, Salgado apuntó a que, "una vez me pasó que tuve que esperar casi una hora parada, fue complejo porque llegué temprano para evitar retrasos y estar tranquila en mi espera, sin embargo, fue peor porque no había ningún asiento disponible y mi caso no era el único, sino que siempre veo a varias personas de pie".
Alejandro (28) trabaja en el rubro minero, para el operador el viaje de regreso a su hogar en Santiago se hace un trayecto hostil, la congestión a la hora de la espera del embarque es el principal motivo por el cual no le gusta el aeropuerto.
"El lugar es bastante incómodo y súper caluroso, además es demasiado pequeño considerando el alto flujo de pasajeros, sobre todo los jueves cuando los trabajadores de BHP u otras mineras vuelven a sus hogares, de verdad es imposible caminar y no hay donde sentarse", comentó el trabajador minero.
"Creo que ya es hora que le hagan una remodelación a este terminal, considerando que somos muchas personas que lo utilizamos semanalmente", agregó.
Por ello, el proyecto de ampliación busca ser una de las alternativas y soluciones a la poca capacidad del terminal aéreo, obras que, según se dio a conocer desde la concesionaria, iniciarían en 2027 y se entregarían en 2030.