Hace unos pocos días se informó que la minería nuevamente ha liderado las exportaciones en Chile durante los cinco primeros meses del año. Con embarques por US$ 23.057 millones en los cinco primeros meses del año, reflejando un alza del 8,2% con respecto a igual periodo del año 2023 (+US$ 1.739 millones).
En este dinamismo han incidido las alzas registradas principalmente por los embarques de concentrados de cobre, oro y hierro.
Esta noticia viene a ratificar el buen momento y trabajo desarrollado por los directorios y compañías mineras, recibiendo de buena manera este nuevo "Mes de la Minería", que albergará un sinnúmero de actividades, seminarios e importantes anuncios que marcarán la agenda del resto del año.
En la actualidad, Chile, y en especial, nuestra región de Antofagasta, no pueden desaprovechar el potencial que la naturaleza le ha brindado al tener un tercio de las reservas mundiales de cobre, hacerlo sería hipotecar el desarrollo económico del país. Chile no controla el precio del cobre ni la ley del mineral, pero sí puede influir en su productividad y sus costos. Por ello, creemos y vemos un trabajo serio y las señales positivas así lo indican.
En lo local, todas estas buenas perspectivas se trasladan a un gran trabajo que comienza a tomar rumbo, desde el ordenamiento y gobernanza de la Estrategia Minera para el Bienestar de la Región de Antofagasta (EMRA) que transformará el panorama minero y socioeconómico de la región. Acá el sector minero es fundamental en la toma de decisiones, destacando la experiencia y aporte en recursos que se requiera.
A su vez, no debemos olvidar el éxito rotundo de la reciente Exponor 2024, que posee una proyección de US$940 millones en concreción de negocios -luego de sus cuatro días de exhibición- y cuyo impulso se debe sostener y promover en un corto y mediano plazo.
Estos y otros antecedentes, que albergamos en nuestra Corporación Clúster Minero -cuya gerencia lidero hace un año - permiten tener una mirada de esperanza, de seguir trabajando por nuestra región y de ir mejorando aspectos en el desarrollo de esta industria que debe ir siendo más sostenible, inclusiva, diversa, mejorando el empleo local y con un mejor relacionamiento en su entorno.
Somos optimistas frente al presente y futuro y seguimos creyendo que la unión y el diálogo constructivo es la base del trabajo armónico para seguir creciendo en la senda exportadora que nos permita un mejor bienestar como región y país. ¡Bienvenido agosto, bienvenido Mes de la Minería!