Los días y las semanas siguen su curso, mientras el paro docente en Antofagasta, el que ya superó el mes, parece estar lejos de terminar, pese al anuncio que el mismo Secretario Regional Ministerial de Educación, Alonso Fernández, hizo, a través de los medios de comunicación, respecto a que "veía posible que el pasado lunes, 15 de abril, se diera una vuelta a clases".
En este sentido, es impresentable que, a la fecha, ni el sostenedor, a través del presidente de su directorio, el alcalde, Jonathan Velásquez, ni el seremi de Educación de Antofagasta hayan podido destrabar el conflicto, por lo que pediré personalmente, la intervención- urgente- del ministro Cataldo para que sea él quien en su calidad de responsable de la Educación en Chile, medie alguna posible solución, ya que como hemos sido testigo la autoridades regionales, como son el seremi y la Delegada Presidencial, no han sido capaces de lograr que las partes involucras se sienten a conversar.
Es importante que niñas, niños y adolescentes regresen a clases, sin embargo, se deben otorgar ciertas garantías a la comunidad educativa, como el resguardo integral de todos quienes asisten a los distintos establecimientos dependientes de la Corporación. Lo anterior, mientras en el congreso, avanza la tramitación del proyecto de ley Katherine Yoma. De mi parte, la iniciativa contará todo mi apoyo, en la Cámara Alta.
De igual forma, se suma la urgencia de invertir recursos para la limpieza de los recintos, de administración de la CMDS. De hecho, producto del deplorable estado sanitario de la Escuela Japón, a inicios de abril de este año, efectué un reclamo formal en la Seremi de Salud y envié un oficio a la Superintendencia de Educación, con el propósito de que se tomen cartas en el asunto.
A su vez, se suman las impresentables cifras de alumnos y alumnas que, a la fecha, siguen sin tener dónde estudiar. Según datos del Mineduc, a nivel nacional, serían 880 estudiantes sin matrícula. En este sentido y si bien la CMDS ha anunciado algunas propuestas para cubrir el déficit, a nivel local, me parece preocupante que el seremi de nuestra región haya confirmado, a los medios de comunicación, que 380 estudiantes de Antofagasta, especialmente de primero medio, aún se encuentren sin un liceo donde cursar.
Frente a esto, el llamado por la educación es urgente, no podemos seguir esperando e insisto, para volver a clases, se requieren de una serie de acuerdos y trabajos para garantizar una convivencia segura y digna para todos quienes trabajan y son alumnas y alumnos de la educación pública. Lamentablemente, nuestras autoridades locales no han dado el ancho para destrabar el conflicto, mientras el reloj, los días y las semanas siguen su curso.