A 135 años de su visita: La agitada jornada del Presidente Balmaceda en Antofagasta
PATRIMONIO. En marzo de 1889, la autoridad realizó el primer viaje al norte tras ser anexado después de la guerra del '79.
El presidente José Manuel Balmaceda fue el primer mandatario chileno en visitar la comuna de Antofagasta. El hecho ocurrió entre el 15 y 16 de marzo de 1889, en el contexto de su viaje al norte.
Balmaceda recala en la comuna tras haber zarpado desde Tocopilla el jueves 13, siendo ese puerto la primera comuna de la región que visitó en este controvertido viaje, ya que era la primera vez que una máxima autoridad chilena visitaba las provincias recientemente anexadas a Bolivia y Perú tras la Guerra del Pacífico, hecho bélico acaecido apenas una década antes.
En el libro "La gira del presidente Balmaceda al norte", del historiador Rafael Sagredo Baeza, entrega detalles de este hecho, la cual no solo contempló Antofagasta, sino también Iquique, Tocopilla, Coquimbo y las salitreras de la zona.
Recibimiento
El presidente Balmaceda y su comitiva desembarcaron a las 10:00 A.M del viernes 15 de marzo de 1889 en el desaparecido muelle Fiscal, ubicado el actual casco histórico de Antofagasta, siendo recibido entre vítores por la población local, el cuerpo de Bomberos (que armó una fanfarria) y el alcalde, don Eduardo Lefort.
El libro consta que "aI momento de desembarcar el presidente Balmaceda, que lo hizo junto con su comitiva y acompañado por el intendente Villegas, el alcalde Eduardo Lefort, el juez y numerosos vecinos, los fuertes (defensas costeras) de la ciudad hicieron las salvas (cañonazos) de estilo, las que fueron contestadas por el crucero Esmeralda". Ya en el puerto, autoridades, población y comitiva entonaron el Himno Nacional.
El mandatario y su comitiva disfrutaron de un almuerzo brindado por la empresa de Ferrocarriles Antofagasta, consistente en platos elaborados principalmente con pescados y mariscos de la zona. Todo, acompañado de las mejores reservas de vino.
Por la tarde, visitó la iglesia parroquial (actual Catedral San José) en donde obsequió un crucifijo de oro al obispo de la ciudad, Luis Silva Lezaeta. Esta reliquia actualmente aún se conserva en el templo. Recorrió además el edificio de la intendencia y el de la aduana (actual Museo Regional), escuelas públicas y la cárcel.
En esta visita, Balmaceda aprovechó de inaugurar unos malecones (murallones para delimitar la franja costera) que eran parte de las obras que realizaba la empresa del ferrocarril en ese entonces. A las 20:00 horas de ese día, el presidente partió a bordo de un convoy a la pampa para conocer la realidad de las salitreras de la región.
Balmaceda se dirigió a la provincia del Loa, llegando la madrugada del sábado 16 de marzo, donde aprovechó de visitar las salitreras de la zona y Calama, donde se le ofreció un almuerzo al mediodía y, además, donó dinero para la reparación de la iglesia local.
Banquete despedida
A eso de las 18:00 horas del sábado 16 el tren retornó a Antofagasta, siendo recibido por la población. A las 20:00 horas la comitiva se dirigió a la entonces Escuela N°1 de Niñas para disfrutar de un banquete de despedida.
Cabe señalar que la escuela de niñas -ubicada en la intersección de las calles Condell con Baquedano- corresponde al actual teatro Pedro de La Barra, cuya estructura es un silencioso testigo de aquella jornada.
La entrada a este edificio fue engalanada con un arco del triunfo confeccionado por el cuerpo de bomberos de esa época. En este banquete participaron el obispo de la ciudad, Luis Silva Lezaeta y el alcalde Eduardo Lefort.
El extinto diario local el Industrial, en una crónica del 18 de marzo de ese año, registra las palabras del jefe comunal. "Amor patrio, y el de gratitud y admiración al benemérito ciudadano y distinguido hombre público. Al hombre tantas veces ilustre en el Congreso, en la política y en la diplomacia, a don José Manuel Balmaceda".
A su vez, Balmaceda "con la elocuencia característica que tanto le distingue" agradeció la recepción de sus anfitriones, y también agradeció a los antofagastinos por "los esfuerzos del trabajo a que se debía la existencia de la industria en el desierto", prometiendo "ingentes esfuerzos para permitir el desarrollo de la industria en beneficio de sus habitantes". Asimismo, el mandatario aseguró que "las industrias de Antofagasta recibirán los beneficios de la exportación económica".
A las 22:00 horas, el alcalde LeFort sorbía la última copa de vino antes de ir a despedir al mandatario, quien después de este banquete, se dirigió con toda su comitiva, autoridades locales y habitantes hasta el muelle fiscal, donde Balmaceda abordó el vapor Amazonas, despidiéndose de la población antofagastina, y enfilando rumbo a el próximo destino de su gira al norte. Taltal.
"Las industrias de Antofagasta recibirán los beneficios de la exportación económica"
Pdte. José Manuel Balmaceda, Visita histórica a la región, 16 de marzo de 1889