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Pese a baja la región mantiene un alto índice de inasistencia grave a clases

EDUCACIÓN. Según datos de Centro de Estudios del Mineduc, entre marzo a junio pasado la zona registró un 33,8% de inasistencia escolar, casi 15 puntos porcentuales más en comparación a 2018.
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El retorno a clases tras la pandemia ha marcado un grave retroceso en aprendizaje agudizado por la inasistencia grave a las aulas, luego de que el país en la crisis sanitaria se alzó como el primero entre los 38 países de la OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos) con la mayor cantidad de días sin clases (52 semanas escolares).

Un panorama, que hoy en cuanto a presencialidad en las aulas evidencia un progresivo repunte, según el reciente informe denominado "Reporte nacional de asistencia del primer semestre educativo (marzo-junio) de los años 2018, 2022 y 2023", del Centro de Estudios del Mineduc (CEM).

Según el documento, a nivel nacional todas las regiones del país registraron un incremento en su asistencia promedio 2023 respecto al 2022. El informe detalla que la asistencia promedio desde marzo a junio del año 2023 apuntó un 86,2%. Esta cifra representa un aumento respecto al mismo período de 2022 (83,7%), sin embargo, aún persiste una brecha en relación al promedio de asistencia de 2018 (90,4%).

Plan de reactivación

Sobre estos registros, el seremi de Educación de la Región de Antofagasta, Alberto Santander, afirmó que la recuperación de la asistencia a las escuelas y liceos ha sido una de las principales preocupaciones desde que los estudiantes volvieron a clases presenciales. "En la región de Antofagasta, tuvimos una disminución en la cifra de inasistencia grave de estudiantes durante este año en comparación al 2022, sin embargo, no debemos conformarnos, debemos seguir haciendo esfuerzos para que todas y todos los estudiantes asistan a los establecimientos educacionales".

"Como parte del Plan de Reactivación Educativa nos encontramos en el proceso de contratación de más de 40 personas que formarán parte de los equipos de revinculación y asistencia, quienes se desplegarán por las comunas de la región con el objetivo de ubicar a las y los estudiantes desvinculados o que presentan una inasistencia grave para traerles de vuelta a las salas de clases, ejecutando acciones con el fin de promover la asistencia sistemática a las aulas. De igual forma, desde el año pasado se está haciendo envío a los establecimientos educacionales de reportes con información detallada de la asistencia de las y los estudiantes con el fin de que los equipos de gestión de cada establecimiento puedan tomar medidas y establecer estrategias con el fin de asegurar la asistencia de cada alumna y alumno", explica.

Según el estudio del CEM, la Región de Antofagasta entre marzo a junio pasado registra un 85,0% de asistencia promedio, que refleja un alza (1,7%), comparado al mismo período 2022 (83,3%). No obstante, el registro del primer semestre de ese año resulta menor (-4,4%) al de la misma etapa escolar de 2018 (89,4%).

Elena Palacios, directora del Liceo La Portada de Antofagasta, explica que la motivación por mantener la asistencia al establecimiento se impulsa de distintas maneras. "En asistencia nosotros estamos en un 85%, por lo que no ha sido significativa la ausencia a clases (…) La asistencia se motiva de diferentes formas: uno conversando con el apoderado para conocer la causa de por qué el alumno no asiste. Segundo, ver los motivos, porque son múltiples. Hace poco se levantó la emergencia sanitaria (por pandemia), pero nosotros sabemos que el virus va a permanecer. También hay contagios por resfríos y enfermedades afines. Otros relacionados a situaciones familiares, socioemocionales y sociales. Hay que investigar el porqué de la inasistencia y después ver cómo podemos generar un compromiso de parte del apoderado para valorar la importancia que tiene asistir a clases", expresa.

"Debemos recordar que recién este año se adoptó una presencialidad más permanente. Como que los niños estaban como más acostumbrados a estar en casa. Hoy, entonces, hay que implementar una reeducación y concientización sobre la importancia de que los niños permanezcan en el establecimiento", precisa Palacios.

Inasistencia grave

Según datos del CEM, el porcentaje de estudiantes con inasistencia grave (85% o menos) desciende para todas las regiones respecto al año 2022. De acuerdo con este reporte, a escala país el porcentaje de estudiantes con inasistencia grave entre marzo y junio de este año bajó (31,2%), comparado al mismo período de 2022 (38,9%). Sin embargo, aún se mantiene una amplia brecha al comparar con el primer semestre de 2018 (17,6%).

La Región de Antofagasta, en tanto, entre marzo a junio pasado registra un 33,8% de inasistencia grave. Una cifra que refleja también una baja comparado al mismo período 2022 (40,4%), aunque todavía lejos del indicador de inasistencia grave de 2018 (19,5%).

Falta de justificativo

Manuel Rojas, inspector general del Liceo Experimental Artístico (LEA), afirma que este establecimiento hoy se mantiene lejos de la insistencia grave, al registrar sobre un 90% de presencialidad. Sin embargo, afirma que determinados mensajes de las autoridades han resultado confusos para mantener una continua presencia en clases. "Hay causales del mismo Ministerio, como contradicciones durante la pandemia (…) Tú tienes un Ministerio de Educación que tiene una orden y después tienes un Ministerio de Salud que señala públicamente que no importa que los niños falten a clases, porque se tienen que cuidar por la influenza. Porque hay niños que faltan no tres días, sino cuatro o cinco días, y eso influye en la estadística de ausencia en los establecimientos", opina.

"Al determinarse que no era necesaria una justificación de certificados médicos, esto ha hecho que, lamentablemente, haya mucho ausentismo más por esa contingencia sanitaria, más que por algunos problemas sociales o de otro tipo en la ausencia a los alumnos en clases", detalla Rojas.

Repartidor de pan muere tras recibir disparo en la cabeza

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LoUn hombre mayor de edad resultó muerto cuando recibía atención médica de urgencia como resultado de una herida de bala que recibió en la cabeza en la madrugada de ayer. El lamentable hecho aconteció en la intersección de la avenida Granaderos con Alejandro Rodríguez en el sector norte de Calama.

Si bien, en forma inicial se pensó que se trataría de un robo, por las circunstancias del suceso propiamente tal. Esto fue descartado con el paso del tiempo, donde el chofer de un furgón utilitario que estaba realizando la entrega de pan como todos los días, mientras se desplazaba por calle Carcote en dirección a Granaderos y en la esquina de Alejandro Rodríguez donde se encuentra un semáforo, recibió un disparo en la cabeza que fue la causal de la muerte.

De acuerdo, a los antecedentes preliminares, dados a conocer por el fiscal de turno, Héctor Acuña, quien manifestó que fue descartado el robo como móvil en la dinámica, y se investiga la razón de este hecho que genera conmoción en la comunidad. Para esto se estableció el barrido de todas las cámaras de vigilancia del sector perimetral, tanto públicas como privadas.

La víctima fatal de nacionalidad boliviana, de 24 años, se encontraba de manera regular en el país, se desplazaba con una acompañante al momento de recibir el disparo percutado por un solo tirador desde un automóvil que está plenamente identificado por las cámaras de vigilancias que cubren dicho perímetro de la ciudad.