La Independencia de Ecuador
" Ecuador y Chile guardan el tesoro inapreciable de su amistad fraterna que nace y desciende del mutuo respeto, habiendo sido solidarios en todos los instantes cruciales de su historia". Dr. Bayardo Cadena Jàcome, Cónsul Honorario de Ecuador en Antofagasta
El 10 de agosto, Ecuador celebró un año más de su Independencia, por lo cual quiero llegar a ustedes, con una muy breve reseña histórica de lo que significa este día para el Ecuador y Latinoamérica, al cumplirse el Bicentésimo décimo cuarto aniversario del primer grito de Independencia, por lo cual Quito se ha denominado Luz de América ya que fue el primer país que se independizó de España en Latinoamérica.
Ecuador formaba parte, desde 1614, del Virreinato del Perú y a partir de 1739 pasó a pertenecer al Virreinato de Nueva Granada.
Ya en el siglo XVIII muchos criollos intentaron realizar movimientos para llevar a cabo sus ideales de emancipación.
En los comienzos del Siglo XVIII, los patriotas Doctor Francisco Eugenio de Santa Cruz y Espejo, quien tuvo como nombre verdadero Luis Chusig, debiéndose cambiar de nombre para poder ser admitido en la Universidad, ya que no se admitía a los indígenas, llegó a ser médico, pionero, precursor y mártir de nuestra Independencia, quien 15 años antes de esta gesta inmarcesible, dejó sembrado en el corazón de los quiteños la flama de la libertad y que pagó con su vida el atrevimiento de haber fundado el primer periódico de la colonia denominado "Primicias de la Cultura de Quito", instrumento de lucha para la emancipación de Nuestra América.
También Juan Pío Montúfar y otros fueron quienes encabezaron los movimientos que desembocaron en el 9 de agosto de 1809. Honrar honra, dijo el Apóstol de América José Martí, sería injusto no mencionar en este acto el nombre de la heroína quiteña Manuela Cañizares, quien jugó un rol protagónico para la consumación del primer Grito de Independencia que celebramos el día 10. En su casa un grupo de patriotas se organizó, y se creó la Junta Soberana de Quito presidida por Juan Pío Montúfar, marqués de Selva Alegre.
El 2 de agosto de 1809 llega a un punto culminante la sublevación popular, que seguía manteniendo sus ideales de emancipación y fue así que un grupo de ciudadanos desarmados asaltaron las prisiones para liberar a los presos; los motines se volcaron también en las calles ocasionando sangrientos enfrentamientos.
En 1810 continuaron nuevas rebeliones en Santiago de Chile, Bolivia, México, Caracas, Santa Fe de Bogotá y Buenos Aires.
Estos pronunciamientos dieron inicio a los procesos de independencia de lo que actualmente son Ecuador, Bolivia, México, Venezuela, Colombia, Chile y Argentina.
La libertad pasó a ser un objetivo común en el nuevo continente, y gracias a ella nació nuestra América Latina.
La amistad entre Chile y Ecuador, fortalecida a través de los años, grata a los sentimientos de ambos pueblos y estimulada por un activo intercambio cultural, posiblemente encuentra entre sus máximos embajadores a un poeta y un pintor.
Pablo Neruda decía que los nombres de Orozco, Rivera, Tamayo y Guayasamín forman la cordillera de los Andes de la pintura del continente americano. Será también por eso que Oswaldo Guayasamín, incorporó a su iconografía los volcanes, como fuerza de la naturaleza que acompaña al dolor y a la alegría, a la destrucción y a la creación, que dan contorno al "mestizo árbol americano", como al mismo pintor le gustaba decir.
Al decir del literato ecuatoriano Juan Valdano, los rayos del sol caen perpendiculares sobre los hombres y mujeres mestizas que afanosamente sienten su destino en la concreción de la democracia, la justicia y la libertad. Lo recibimos aquí, en el "país del fin del mundo", lo reciben hombres y mujeres también mestizos que han luchado con denodado esfuerzo por idénticos valores. Ecuador y Chile guardan el tesoro inapreciable de su amistad fraterna que nace y desciende del mutuo respeto, habiendo sido solidarios en todos los instantes cruciales de su historia.
La Región de Antofagasta estos últimos 50 años, se ha consolidado como una de las regiones ancla del proceso minero del país, la apertura de la economía a nivel mundial y el ingreso de capitales extranjeros a la gran minería del cobre, sin lugar a dudas marcan una sociedad abierta al mundo globalizado, pero con una serie de desafíos que hay que enfrentar y resolver.
Desde esta perspectiva, la Región ha entrado en un acelerado proceso de cambios respondiendo a los capitales y sus inversiones debiendo adaptarse al fenómeno global y exigiendo cada vez a sus habitantes y a sus recursos naturales . Ante este promisorio escenario económico que se ha presentado en Chile, y debido a las particulares reducciones de le economía de los países vecinos, Chile ha sido un país tentador en cuanto a ofrecer posibilidades de trabajo y mejoras sustantivas en el desarrollo personal, económico y familiar de grupos de migrantes vecinos que han decido radicarse en este Chile promisorio.
Antofagasta es hoy una ciudad multicultural.
Al concluir, quiero expresar, como ecuatoriano y en nombre de mi país, nuestra profunda gratitud al pueblo chileno, y de manera especial a ustedes compatriotas ecuatorianos que han venido a esta país a entregar su fuerza de trabajo con respeto, con altura y con dignidad.
Muchas gracias.