Integración de Calama y Antofagasta al plan 'Calle sin Violencia' genera apoyo transversal entre actores políticos
MEDIDAS. Gobernador regional, consejeros regionales y el presidente de AMRA precisaron que es necesario complementar la medida reforzando al Ministerio Público y policías.
"Por fin ya podemos comunicar a toda la población de nuestra región que tenemos a nuestras dos comunas, Antofagasta y Calama, como parte del plan 'Calles sin violencia', que se focaliza en poder disminuir, investigar y atacar los delitos que más preocupan a la población, que son los homicidios y los delitos violentos". Con estas palabras la delegada presidencial Karen Behrens confirmó la integración de las dos principales localidades de la zona a la estrategia de intervención elaborada por el Gobierno.
El anuncio llegó luego de días de dudas y críticas ante la información preliminar que circuló, en donde ni la capital regional ni la comuna loína aparecían dentro de la primera etapa del plan, dos zonas de la región que desde desde todos los sectores políticos indicaban como las más críticas de Antofagasta y el país, por sus altos índices en cuanto a delitos.
Cabe indicar que fue la propia ministra del Interior, Carolina Tohá, quien comunicó la noticia directamente a los alcaldes de ambas ciudades. En total, a nivel nacional se intervendrán 46 comunas.
Pasos adecuados
Al respecto, el consejero regional Víctor Guzmán (PC) manifestó que "era esperable que Antofagasta estuviera en el plan de seguridad nacional. A mí me parece que los pasos a seguir son los adecuados y que, por lo demás, están en la legislación vigente. El trabajo hoy es hacer cumplir la ley; ese es el trabajo de policías, tribunales y fiscalías, junto a gendarmería, que es esencial para interrumpir la articulación de las bandas delictuales desde las cárceles".
Una opinión similar manifestó el gobernador regional de Antofagasta, Riardo Díaz: "Era un contrasentido no incluir nuestras comunas en el plan, cuando el mismo Ministerio del Interior señalaba que lamentablemente en nuestras comunas había incrementado los delitos violentos. Fue la presión de todos lo que logró cambiar esta medida".
Acotó que "hay que insistir en fortalecer la labor de la fiscalía. Se hacen denuncias y vemos poca concreción (...). Es hora de actuar, de recuperar los barrios".
Apoyo
En tanto, el consejero regional Fabián Ossandón (ind. - P. Radical) destacó que "Antofagasta y Calama hayan sido consideradas en el plan. Con esto, esperamos que el Estado de Chile le dé un golpe duro y certero a la delincuencia, narcotráfico y crimen organizado. En este plan el apoyo a los municipios es fundamental ya que podrán implementar las medidas necesarias para prevenir el delito en los barrios".
Agregó que para que este plan tenga éxito, es necesaria "la unidad y la colaboración de todos quienes ejercemos una función pública; solo eso permitirá el éxito de todas las acciones que se quieran implementar para poner orden y combatir la delincuencia".
En tanto, la consejera Andrea Merino (PS) criticó los reproches que surgieron antes del anuncio oficial de la cartera de Estado: "El Ministerio del Interior había definido a las comunas anticipadamente y no alcanzó siquiera a nombrarlas y todos empezaron a decir que Antofagasta y Calama no estaba y eso, por supuesto, es algo que no ayuda a mejorar la sensación de inseguridad".
Como sea, dijo que "es necesario entender que ninguna acción por sí sola va a resolver el problema de seguridad publica, ya que son procesos de cambios que son más largos", aunque resaltó que "sí va a contribuir enormemente ya que no es la única medida que se está tomando; es la sumatoria de todas las acciones que está tomando el Gobierno del Presidente Gabriel Boric, en esta materia, lo que va a resolver el problema de seguridad, pero necesitamos que todos las autoridades públicas puedan contribuir en esto. Me parece que esos llamados públicos diciendo que el gobierno había olvidado el norte, no ayudan en nada".
"Todo suma"
En tanto, desde la oposición, el consejero Daboberto Tillería (UDI) reconoce que "todo suma" en cuanto a combatir la delincuencia. Y recalcó que "era muy escandaloso que no estuviésemos. Creo que, dentro de todo, son medidas que sirven para que, de alguna manera, se puedan dar señales potentes respecto a erradicar prontamente este tema de la delincuencia, que nos tiene bastante complicado a todos".
Una opinión un poco más critica deslizó la consejera Katherine San Martín (ind.): "Que Antofagasta y Calama no hayan sido prioridad desde el principio nos dice que las autoridades locales, desafortunadamente, no tienen la influencia que quieren hacernos creer que tienen en Santiago. Es un Gobierno capitalino-santiaguino y así actúan en desmedro de las regiones".
Amra
Por su parte, el presidente de la Asociación de Municipalidades Región de Antofagasta (AMRA), Marcelino Carvajal, si bien resaltó la medida, también enfatizó que "me parece un poco injusto que comunas más pequeñas, como Mejillones (ciudad donde Carvajal es alcalde), donde también hemos visto este tipo de delitos, no aparezcamos en el listado. Creo que la cobertura del plan debiese ser más amplia. Somos muchas las comunas chicas, que al tener menos control, menos seguridad, cuando llegan este tipo de crímenes y delitos, llega a ser muy impactante".
Con todo, el edil concluyó que "es un buen inicio, pero es necesario entender que todos tenemos problemas de seguridad; hay que hilar más fino, Mejillones también se ha visto afectada por delitos de alta connotación Pública".
"Es necesario entender que ninguna acción por sí sola podrá solucionar el tema de la delincuencia, necesitamos que todos puedan contribuir".
Andrea Merino,, consejera regional.