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DGA multa a un particular por extracción no autorizada de aguas subterráneas

FISCALIZACIÓN. Además se ordenó al infractor retirar las obras que conducían las aguas y cegar la poza donde estas afloraban y eran acopiadas.
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Una multa de 274,6 UTM (16 millones 853 mil 274 pesos) tendrá que pagar el antofagastino Sergio Berger Pallomari, quien, según la Dirección General de Aguas, incurrió en extracción de agua sin autorización desde una poza y que comercializaba a terceros en el sector La Negra de la capital regional.

"El Código de Aguas, en su artículo 294, establece que los embalses con capacidad superior a cincuenta mil metros cúbicos o cuyo muro tenga más de 5 metros de altura, deben ser presentados para su aprobación ante la DGA. En este caso, se observó la posible existencia de una obra de estas características con la técnica de la teledetección, y así, los fiscalizadores según las coordenadas que arrojó el análisis, llegaron a ese punto en la comuna de Antofagasta", precisó Marcela Astudillo, directora regional de Aguas.

Esto se dio en el marco de una serie de fiscalizaciones que realiza la DGA a través del análisis de imágenes satelitales para identificar distintas infracciones a distancia, como embalses o tranques cuya construcción no esté autorizada por este Servicio MOP. Esta técnica permite abarcar superficies más grandes y vigilar lugares a los que no se podría acceder de manera permanente.

Durante la inspección los fiscalizadores se encontraron con dos pozos de aguas subterráneas que contaban con derecho de aprovechamiento de agua, pero que estaban fuera de servicio. Sin embargo, a 75 metros de dichos pozos, se hallaba una poza excavada, la cual en las imágenes satelitales se percibía como un embalse, desde donde se extraía agua mediante cachimba para la venta a camiones aljibes que surtían a dos empresas de energía eléctrica.

"Luego de procesar los antecedentes recopilados en la inspección en terreno, de notificado el eventual infractor de los hallazgos y de analizados los descargos presentados por él, se elaboró el informe técnico. Este informe técnico concluyó que la poza excavada no calificaba como embalse, ya que en el lugar no se acopiaban aguas, sino que dicha zona fue utilizada para extracción de áridos y allí afloraban aguas", comentó Astudillo.

Sin embargo, se hacía uso de las aguas afloradas sin autorización de la DGA, excedía los 2 litros por segundo que le otorgaba su derecho y por la dimensión de la zona excavada, existiría una pérdida de aguas producto de la evaporación.

Término inmediato

"El derecho otorgado sobre los 2 pozos que no estaban en función, no lo autoriza a sacar agua desde cualquier parte de su terreno, pues para ello debe tramitar el cambio de punto captación. Segundo, tampoco utilizaba el agua para consumo humano, sino que para la venta a empresas de energía". Y en tercer lugar, añadió Astudillo, "las empresas compradoras, al ser evaluadas en el marco ambiental, tenían la obligación de utilizar agua industrial si la fuente original de abastecimiento cuenta con las autorizaciones sectoriales y ambientales correspondientes, y en este caso, la poza excavada no cuenta con derecho de aprovechamiento de agua".

Junto con la multa aplicada, se ordenó el término inmediato de la extracción de aguas subterráneas desde la poza excavada, el retiro de todas las obras que permitan extraer y conducir agua desde la poza y su cegamiento. La normativa indica que de no cumplir con lo ordenado por la DGA, Sergio Berger se expone a una segunda multa de mayor cuantía. Para verificar que se hayan cumplido las instrucciones ordenadas, un equipo de la DGA realizó una constatación en terreno; sin embargo, no pudo acceder al predio al encontrarse cerrado con candado y sin moradores, por lo que planificarán una nueva inspección.

El Abra inició programa de nivelación de estudios para adultos

NIVELACIÓN. Serán 70 personas de Chiu Chiu, Ollagüe y Tocopilla.
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El Liceo Politécnico Diego Portales en Tocopilla, la Sede Comunidad Indígena de Ollagüe y la escuela G-52 San Francisco de Chiu Chiu, fueron las sedes oficiales para el inicio de clases del programa de nivelación de estudios de educación básica y media liderado por Minera El Abra.

La ejecución del proyecto comenzó en enero con un diagnóstico territorial socioeducativo donde se levantaron las necesidades de adultos con trayectorias de formación inconclusas. El programa se extenderá hasta junio y abrió un cupo para 70 estudiantes, que participarán de módulos presenciales y online que los prepararán para rendir el examen de nivelación de estudios del Ministerio de Educación.

El programa contempla intervenciones psicopedagógicas, socioemocionales y de apresto laboral, con el propósito de apoyar y fortalecer el aprendizaje de las y los estudiantes y lograr que culminen el proceso que les dará nuevas oportunidades.

Testimonios

Martina Mendoza tiene 63 años y es una de las alumnas en Chiu Chiu. "Llegué hasta sexto básico y me quedé acá y no tenía medios para estudiar y al final se pasaron los años. Ahora me dio por estudiar, mis hijas me dicen estudia mamá o termina por lo menos octavo y ellas me motivaron, pues como tengo un almacén, me dicen que podría aprender a usar el computador y hacer mis guías y facturas".

Ginette González de Caspana, llegó a clases con su hijo de 19 años, ambos dispuestos a sacar cuarto medio. "Para tener mejores opciones de trabajo y más adelante continuar estudios si se puede. Igual estoy con mi hijo, él tiene primero medio y felices los dos, para apoyarlo a él y si él puede me ayuda también".

El programa de nivelación de estudios liderado por Minera El Abra tendrá diferentes módulos que serán dictados por docentes de la OTEC Leonardo Da Vinci con el acompañamiento e intervención psicopedagógica de fundación La Semilla.

Observatorio ALMA inaugura innovador proyecto deportivo con tecnología única

MEDIDA. Se trata de una multicancha con una cobertura que impide el paso de la luz al exterior y es capaz de resistir todo tipo de tormentas de nieve y de arena.
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Uno de los proyectos más anhelados por los colaboradores del observatorio ALM A -el mayor centro astronómico del mundo, ubicado a 40 km de San Pedro de Atacama, comenzará a funcionar este martes 14 de marzo, tras 34 meses de construcción.

Y es que el centro de investigación contará por primera vez con un complejo deportivo de 1.200 metros cuadrados, que contempla cancha de tenis, futbolito, básquetbol, vóleibol y un gimnasio. Un proyecto que nació el 2018, cuando la Associated Universities INC (AUI) lanzó un concurso de arquitectura para la construcción de una multicancha para los trabajadores del observatorio, ubicado a 3.000 metros de altura, en la Región de Antofagasta.

El nuevo espacio debía cumplir con una serie de condiciones y requisitos de diseño y construcción, entre ellos, bajo consumo energético y una estructura que no generara ningún tipo de contaminación lumínica. Además, debía proporcionar bienestar a los usuarios en cuanto a temperatura y protección de la radiación solar y del viento.

Luego de un largo proceso de selección, el proyecto fue adjudicado a la empresa especialista en coberturas de PVC Toptent, quien junto a la Constructora Sergenco llevaron a cabo el proyecto desarrollado por el arquitecto Benjamín Murua. Su propuesta incluyó una novedosa estructura ovalada en armonía con el entorno, con un alto nivel de innovación en forma y diseño.

Para la construcción de esta obra única en el mundo, Toptent-Sergenco realizó un estudio detallado de la cuenca y del valle de Chajnantor, definiendo como una de las prioridades eliminar toda contaminación lumínica. "Con ese propósito nos pusimos a trabajar y establecimos distintos parámetros para que la estructura se pudiera mimetizar con la geografía del lugar, manteniendo una forma aerodinámica propia de la zona. Trajimos los volcanes al diseño, optamos por el color de la arena con alta opacidad para no alterar el entorno, hasta impedir completamente el paso de luz al exterior", explica el arquitecto Benjamín Murua.

La gran estructura tiene 1.200 metros cuadrados, con vigas de madera ancladas sobre una base de hormigón, ubicada a 3,5 metros bajo el nivel del terreno, para que el impacto visual sea el menor posible. La cubierta está conformada por dos membranas selladas e infladas a presión, separadas por una cámara de aire que las mantiene infladas con motores sensoriales que permiten resistir eventos climáticos extremos como tormentas de nieve o de arena, lluvias y viento extremo, añade Diego Huidobro, Gerente de Toptent.