Secciones

Economía: Chile y el mundo

E-mail Compartir

Pocos años atrás éramos la estrella de los países emergentes. ¡Qué tiempos aquellos! Ahora la ceguera de nuestros políticos, y de la ciudadanía en general, se encargaron de llevarnos por el sendero equivocado, donde priman las turbulencias políticas, y por ende, económicas.

Chile está inmerso en rencillas políticas estériles, proyectos y "fijaciones" inconducentes como una nueva Constitución, o el concepto de que cobrando más impuestos se creerá más. En mis largos años de estudios y experiencia económica, nunca he visto que una nación, y su gente, avancen y mejoren su realidad socioeconómica en base a cambios constitucionales, ingentes cargas tributarias (que luego se malgastan), o ideologías extremas que tensionan el acontecer nacional. Todo lo contrario, esas naciones tienden a hundirse en el mediano y largo plazo.

En su reciente informe económico el Banco Mundial recomienda a países como Chile que reconsideren la senda de crecimiento, mejorando el gasto total del gobierno. Dicha institución calcula que en torno al 17% del presupuesto público se malgasta en iniciativas ineficientes y gastos de personal innecesarios. Y es precisamente una de las maneras que la actual administración piensa hacer crecer al país, o sea, con un gasto de muy baja productividad futura.

Mientras el mundo ralentizará su crecimiento durante 2023, llegando al 2,7% según el Fondo Monetario Internacional (FMI), Chile entrará en recesión con una contracción del 1%. En tanto, algunos conspicuos personeros del actual gobierno afirman que es preferible crecer menos, pero tener más igualdad social. Me imagino que pensarán que esta última llegará por "generación espontánea". Y como si esto no fuera suficiente, nuestros principales socios comerciales internacionales también sufrirán un deterioro económico mayor al esperado el año 2023, con Estados Unidos creciendo sólo 1%, China un 4% o menos si continúa con su política de "Covid Cero", en tanto que la zona euro permanecerá severamente afectada por la guerra de Ucrania. La invasión rusa ha desestabilizado poderosamente la economía mundial y ha llevado a Europa a una crisis energética, produciendo además una espiral de inflación en todo el mundo.

Pues bien, nuestro Banco Central tiene como meta para 2023 una inflación de sólo 4% anual, lo que a todas luce parece demasiado optimista. La variación real del IPC ha bordeado el 14% y los ingresos de las personas han caído significativamente el último año. Esto implica que somos más pobres. La única manera de revertir dicha situación es controlando la inflación. Hoy podemos ver el daño que nos ha causado la política de retiros de los fondos de las AFP. Está claro que muchas familias necesitaron mayor liquidez en el período de pandemia, pero muchas otras no; ahora estamos pagando un alto precio. La meta de "crecer con igualdad", si somos pobres, cada vez será más lejana.

Chile ha sido históricamente un país ordenado en aspectos económicos, con visión de largo plazo. Ahora todos en general, y el mundo político en particular, debemos volver a esa senda con el objetivo claro de disminuir la pobreza, y entregar a nuestra población el crecimiento estable que se merece.

josé miguel serrano

Chile ha sido históricamente un país ordenado en aspectos económicos, con visión de largo plazo. Ahora todos en general, y el mundo político en particular, debemos volver a esa senda con el objetivo claro de disminuir la pobreza, y entregar a nuestra población el crecimiento estable que se merece.

Momento Político

E-mail Compartir

En 2011, se publicó el libro El Momento Político de América Latina (Fundación Carolina - Siglo XXI de España), en el cual diversos/as autores/as hablan sobre los cambios fundamentales en los ámbitos social, político y económico que ha ido experimentando Latinoamérica, a partir de la crisis económica y financiera internacional de 2008. El texto plantea que los diversos procesos experimentados han demostrado que los distintos países de la región han tomado más bien un rumbo propio que una convergencia hacia un modelo o proyecto común.

Así, los cambios, alternancias y ensayos fallidos han ido acrecentando nuestras diferencias idiosincráticas y culturales en política. Nos queda la sensación de que aunque nos auto-tildemos como el experimento más exitoso para matar al neoliberalismo, como señaló la economista ítalo-estadounidense Mariana Mazzucato, (EMOL, 27/10/2022), tal vez no seamos más que parte de una política igual de bananera que el resto de LATAM. No en vano el poeta Vicente Huidobro planteaba que: "Los políticos demagogos de América se han quedado dormidos en la época feudal. Mientras el mundo avanza, ellos siguen durmiendo a la sombra de un cocotero, esperando que les caiga un coco, como una bomba, sobre la cabeza" (Hoy, Año II, Santiago, 20/10/1933).

El medio Radio UdeC (03/01/2023) se cuestiona en un titular si los primeros indultos presidenciales constituirían una polémica artificial o un error en la lectura del momento político. Esto debido a la tensión entre la oposición y el oficialismo generada a raíz de los primeros 13 indultos del período presidencial de Gabriel Boric, lo que inclusive salpicó la relación entre los poderes Ejecutivo y Judicial. Podríamos concordar con la abogada constitucionalista Bárbara Sepúlveda de que no habría un momento ideal para la toma de decisiones tan complejas como el caso de un indulto ("Primer Café", Radio Cooperativa, 03/01/2023). Sin embargo, es bueno cuestionarnos a qué le podríamos llamar 'momento político', pensando que semanas antes nos estábamos preguntando por el 'momento constituyente', a raíz del acuerdo por el nuevo proceso constitucional.

Dado que como señala la historiadora canadiense Margareth MacMillan (2010), en política todo es hechos (contingencia), nos podríamos preguntar si el gathering momentum del Presidente Boric podría haber sido al final de su período, como en general se suele hacer desde el Ejecutivo como una especie de táctica "ring, ring, raj…", o hay alguna estrategia encubierta para enfrentar lo que el académico Juan Pablo Luna llama 'cóctel complicado' entre una crisis global de la institucionalidad y una crisis propia de democracia liberal (Webinar Frontal Trust: "Claves para entender el momento político", 29/07/2021). Las explicaciones posteriores del Primer Mandatario confundieron aún más a la opinión pública, y finalmente su decisión quedó sólo como un grave o severo error (Carlos Peña, El Mercurio de Antofagasta, 04/01/2023) desde una lectura eminentemente judicial en un país extremadamente normativo.

En su libro La Gran Transformación (1944), el economista húngaro Karl Polanyi plantea la desestructuración política y social es producto del desarrollo de las corrientes librecambistas en Inglaterra durante la implantación y desarrollo de la economía de mercado y las grandes transformaciones sociales en Occidente. Esto provocó grandes convulsiones sociales a la usanza de nuestro 18/O. Por ende, la asociación 'simbiótica' entre los indultos y el Compromiso Transversal de Seguridad, podría sólo ser una lectura en veredas opuestas del Estallido Social y los compromisos humanos que el Presidente hiciera en su período de campaña. En el mundo ideal del 'negacionismo político' de nuestra revuelta social, los indultos se hacen innecesarios y hasta atentatorios contra un gran acuerdo político por la seguridad. Sin embargo, en el realismo político, la inacción nos llevaría a lo que ocurrió en 2020 cuando aumentaron significativamente las denuncias en la Corte Interamericana de Derechos Humanos por violación de éstos durante la Dictadura. No reconocer los errores de las distintas instituciones durante el Estallido implicará que el Estado chileno deberá pagar grandes compensaciones. Por ende, los indultos podrían ser la solución a un problema más grave, hay que hacer lecturas internacionales de nuestra historia y no sólo mirarnos el ombligo.

Dra. Francis Espinoza F.

Opinión

"

"

No reconocer los errores de las distintas instituciones durante el Estallido implicará que el Estado chileno deberá pagar grandes compensaciones. Por ende, los indultos podrían ser la solución a un problema más grave, hay que hacer lecturas internacionales de nuestra historia y no sólo mirarnos el ombligo.

"

"

Académica UCN

Economista Universidad de Columbia