Extranjeros residentes cuentan sus tradiciones para celebrar el Año Nuevo
GASTRONOMÍA. El buñuelo no puede faltar en la mesa de los colombianos, por su parte, la carne de lechón asada es la tradición de los bolivianos.
Melisa Granja, de Cali, Colombia, no lleva un año en Chile. Dijo que cumplirá los doce meses en marzo. Son sus primeras fiestas de fin año afuera de su país, y claramente es diferente. Reconoce que aquí va desde el trabajo a la casa y viceversa. "Serán unas fiestas extrañas. Distintas. En Colombia todo este tipo de fiestas se celebra en la calle, con la gente del barrio, se rumbea; aquí la gente pasa más en las casas aunque en Año Nuevo me dijeron que es distinto porque se toma mucho alcohol", dice.
El presidente de la Colectividad de Colombianos Residentes en Antofagasta, Benjamín Cruz, afirmó que para celebrar las efemérides de fin de año, los colombianos siempre preparan y comen natilla (una especie de flan) y buñuelos (una especie de pan frito a base de queso). "Algunas personas también comen lechona (cerdo), tamales, rollos de carne con salsas agridulces de piña o ciruela, ensaladas tropicales, arroz dulce a base de pony malta, Coca Cola o coco. Todo varía según la ciudad de procedencia de la familia puesto que la gastronomía colombiana es muy diversa y diferente según el departamento, pero lo que sí es común a nivel nacional es la natilla y el buñuelo, y aquí en Antofagasta se consume mucho", afirmó.
Valentina Fernández es boliviana. Lleva diez años en Antofagasta, y reconoce que ya con su familia han creado una fusión antofagastina y paceña (boliviana) para el Año Nuevo. "Lo que comemos es el lechón al horno, plato típico de mi zona que es La Paz. Se caracteriza cocinarlo con el cuero, el cual en el horno se tuesta, lo que de un sabor agradable a la carne. Esto se acompaña con un plátano de postre y ensaladas. La tradición la hemos mantenido a través de mi mamá, a lo que le hemos añadido la posibilidad de bajar a la costanera a presenciar los fuegos artificiales. En cuanto a música, escuchamos cumbia chilena y folclor boliviano lo que nos motiva mucho, pues recordamos nuestras raíces", dijo.
Argentina
Argentina, sin duda, está de moda. Son los flamantes campeones mundiales de fútbol. Por esta razón será un Año Nuevo distinto. La cónsul de Argentina en Antofagasta, Ana Carolina Massuh, detalló que la gastronomía de Año Nuevo para los argentinos se compone de lo siguiente: asado de carne, pollo y cerdo, comidas frías como bocaditos salados, piononos, huevos rellenos, gran variedad de ensaladas de vegetales y mixtas, y de postre tortas, helado, tiramisú o postres con dulce de leche. Reconoce que será un Año Nuevo marcado por las celebraciones del fútbol.
Por su parte, el comunicador argentino Sebastián Quinzán dijo que para sus compatriotas las fiestas de fin de año son con la familia, "pero Año Nuevo es más variado. Puede ser con amigos o familia. El asado difícilmente falla, aunque considerando la gran cantidad de italianos que existe en mi país, también se suele comer pastas. La cultura de los fuegos artificiales han ido disminuyendo y eso es algo positivo. Lo bueno de este fin de año, es que sin dudas, lo mejor está por venir".
Venezuela
José Luis Lemus es de Maracaibo, Venezuela, y emprendió hace unos años en Antofagasta con el restaurante "Venezuela Libre". Sostuvo que la comida de los venezolanos para estas fechas puede decirse que es muy básica, pero tradicional. "Nosotros comemos hallacas (parecida a la humita chilena y al tamal mexicano, pero más elaborada), que pueden ser de pollo o carnes, o mixtos. Se hace un guiso muy particular que queda muy bueno al paladar. Se acompaña con ensalada. Otras personas hacen pollo al horno, aunque todo depende como estén los recursos de cada familia. No puede faltar el pan de jamón ni el ponche crema, que es un licor que se hace en la casa", afirmó.