Cuatro avionetas, una casa y dos máquinas fueron destruidas en seguidilla de ataques incendiarios
VIOLENCIA. Todos los atentados fueron adjudicados por agrupaciones por la "liberación nacional mapuche". Alcalde pidió más acción del Gobierno.
Una seguidilla de ataques incendiarios durante la jornada de ayer dejó daños en una serie de empresas, predios y hasta en el aeródromo de Curacautín, Región de La Araucanía.
El primero de estos atentados se produjo cerca de las 4:00 de la madrugada: un número indeterminado de encapuchados llegó hasta el Club Aéreo y prendió fuego a cuatro aeronaves dentro de un hangar.
En el sitio, Carabineros encontró un lienzo y rayados, que rezaban "Libertad a los presos políticos mapuche en huelga de hambre. Wallmapu avanza hacia la liberación nacional. Resistencia Mapuche Malleco".
Poco más tarde en Pillanlelbún, desconocidos llegaron hasta el fundo Rancho San Fernando. Ahí el cuidador se percató que estaban quemando una casa. Asimismo, también incendiaron un jeep y una cuatrimoto. Y al igual que en el primer caso, hubo una pancarta, esta vez firmada por el Movimiento de Liberación Nacional Mapuche.
Y pasado el mediodía al menos dos máquinas de uso forestal fueron quemadas durante un ataque al interior del fundo San Gregorio ubicado en Victoria.
De acuerdo a información entregada por la policía, la maquinaria en cuestión fue incendiada cuando estaba a punto de darse por iniciada una faena forestal. También se halló en el lugar un lienzo en que se atribuye el hecho al mismo Movimiento de Liberación Nacional Mapuche y se aludió a los "presos políticos mapuche" a los que se pidió a través de panfletos que sean trasladados a un centro de estudio y trabajo.
Llamado del alcalde
Tras el ataque al aeródromo, el alcalde de Curacautín, Víctor Barrera, dijo que "esto fue un ataque terrorista. Estuvieron amenazando con ametralladoras para que no salieran de la casa y ellos, un matrimonio, con incertidumbre que si le iban a quemar la casa con ellos adentro".
"(La empresa) prestaba un tema social tremendo, ellos llevaban pacientes en temas de riesgo a Angol o Temuco. Pacientes que eran accidentados a veces en la nieve, o automovilísticos y ellos estaban siempre estaban al servicio. Entonces lo que prestaban era netamente un servicio social que era por sobre el daño económico que se generó el día de hoy", añadió a La Tercera.
La autoridad agregó que "la inseguridad que se da en nuestra provincia y en nuestra comuna, no debemos seguir permitiéndolo y el llamado es a las autoridades. No somos los alcaldes los llamados a solucionar los temas de seguridad".
"El Gobierno tiene que hacerse parte y hacer algo drástico. Cada 15 días tiene que renovar el estado de excepción, pero ¿qué pasa con las comunas que están más hacia los sectores interiores donde muchas veces se ve algunos días dotación militar, carabineros, pero en este ataque a las cuatro de la mañana y no había nadie?", cuestionó.